Omega Dominante (TojixGojo-Bl-omegaverse)

5-Nunca fui un alfa.

5-Nunca fui un alfa.

Podía escuchar el goteo de la lluvia filtrarse por las paredes, esto es una casa deplorable en ruinas muy alejada de la gente, no logró oír ningún sonido humano, solo animales merodeando afuera, también hace demasiado frío para tan poca ropa, se está congelado.

Satoru intentó recobrar la fuerza en múltiples ocasiones pero siempre que cree lograrlo ese sujeta aparece y le clava su arma maldita, nunca deja que se recupere por completo, solo puede agonizar prolongadamente de manera patética.
Esa tarde el sujeto entró en la habitación con una manta y se la tiró encima, Satoru la tomó con dificultad y se cubrió agazapado en un rincón.

—¿Me envenenaste? —preguntó.

El hombre se apoyó en el marco de la puerta con sus brazos sujetó la parte de arriba de esta, es muy alto, tan alto como el mismo Gojo pero con más masa muscular que lo hace parecer un verdadero gordilla parado ahí, Satoru sonrió débilmente pensando en ello, no pudo evitar comprar los cuerpos de alfas que vio en este tiempo.

—Se podría decir que sí —el hombre tomó su cuchillo y lo afiló con cuidado —. Esto fue una herencia que mi padre me dejó, puede interrumpir rituales a quien sea cortado con él, claro que esto no funcionará por mucho tiempo contigo —explicó con cuidado, él avanzó y hundió de nuevo el cuchillo en la garganta del muchacho quien ni siquiera se resistió.

Satoru sintió el ardor distintivo de su tortura y aguantó el grito, aunque sus extremidades se retorcieron de manera involuntaria.

«Aún no es momento de intentar algo», se dijo a sí mismo.

—¡Ja! —lanzó el hombre moviendo el cuchillo aún en la garganta del chico —. Un rico alfa tan bendecido como tú, siendo tratado de esta manera por un simple alfa y pobre como yo. Quise hacer esto desde el primer momento que te vi, matar al alfa más fuerte de todos.

«Nunca fui un alfa», quiso decir pero de su boca solo salió un quejido, observó en los verdes ojos de su secuestrador un entusiasmo maligno.

Satoru de a poco perdió el conocimiento y cayó en un pozo oscuro, su energía fue drenada de nuevo y volvió a estar por completo a merced del caza recompensas.

Al despertarse se encontró con la garganta envuelta en una venda como ya es costumbre, él debe sanarlo parcialmente para evitar algún fallo, luego lo dejará descansar hasta casi sanar y lo volverá a herir, puede ver como disfruta haciendo aquello, ese hombre se deleita con su sufrimiento.

Satoru comprendía que mucha gente lo odiaba, como los profesores y otros herederos los cuales eran comparados con él, pero no recuerda haberle hecho algo a este hombre para que lo odie tanto, siente su tortura demasiado personal. El mismo caza recompensas lo dijo: “siempre te quise matar”.

Además se dio cuenta de algunas cosas este tiempo, ese tipo es un alfa recesivo, no lo parece, podía jurar que es un alfa súper dominante el cual fue echado de su clan por ser un demente violento, pero al parecer fue expulsado por su condición defectuosa, él conoce la posición que toma el clan Zenin ante los alfas defectuosos.

«¿Suguru, dónde demonios estás?», se preguntó.

En la oscuridad de la habitación percibió un aroma muy dulce y delicado el cual no olía hace muchos años, intentó averiguar de dónde provenía y se olió a sí mismo muy conmocionado.
¡Es su feromona Omega! Su aroma de presentación como un Omega dominante el cual es varias veces más imponente que el de un Omega común o un recesivo.
«No, no, no, esto está muy mal», se dijo a sí mismo. Se frotó varias veces su cuello el cual picaba por la incomodidad y se negó repetidas veces, de allí se desprende su aroma.

Revisó su manta y se percató que el caza recompensas había dejado un ligero rastro de su propia esencia, seguramente por error, y lo frotó con violencia.

«¡Que bien aroma!», muy distinto al bosque de Suguru Geto o el aroma a mar de Riko Amanai, mucho menos al horrible y asfixiante peste de Naoya Zenin. Esto es muy ligero hasta llegar a la nariz cuando se vuelve algo picoso pero agradable, pero demasiado caliente, ¡necesita algo fresco la feromona del alfa! Pensó en su propia feromona.

—Sí, mi feromona iría perfecto con esta esencia —se dijo todavía con el rostro hundido en ese lugar de la manta donde el alfa había dejado su rastro —. Siento como si... como si... solo necesitara esto para seguir viviendo.

¡Alto!, ¿qué demonios está diciendo? Está codiciado las feromonas alfa de su captor, no es loquito desequilibrado, claro que no. Es su estado de celo hablando por él, por fin llegó en el peor momento.

¡Nadie puede saber esto! Satoru entró casi de inmediato en crisis, ese hombre volverá en la noche a llevarle comida y podría notarlo, en ese momento será su fin.

Alcanzó su barrera, maduró por completo como Omega dominante y su cuerpo se halla listo para su primer celo... Realmente quiere morir en este momento.

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Suguru Geto se paró ante su nuevo compañero con mala cara, no podía creer que ya dieron por pérdido a su amigo y le dieron otro compañero. Él quiso romper las reglas y escapar para buscar a Satoru por su propia cuenta cuando este beta lo atrapó saltando fuera del recinto por la noche.

—Iremos juntos —le dijo el chico rubio conociendo sus pensamientos —. Si fuese Yū quien se hallase pérdido también lo haría.

Suguru Geto sintió empatía por este Kōhai pues perdió a su amigo —y según los chismes amante—, hace unos días mientras ocurría la asimilación del señor Tengen. Suguru por alguna razón se sintió especialmente responsable de aquello.

Como beta Nanami Kento es muy fuerte y hábil, también posee un carácter inquebrantable y lo demuestra huyendo esa misma noche con Suguru Geto directo a buscar el rastro de Satoru Gojo.

El beta y el alfa saltaron la pared ante la mirada estática del profesor quien se mantuvo callado y no interfirió.

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¿Dónde está la madre alfa súper protectora de Satoru y por qué no mueve cielo, mar y tierra para encontrar a Satoru? Trágicamente ya no está entre los vivos :( no llegó a conocer a sus nietos, mientras Satoru era secuestrado otro golpe se realizaba en la mansión Gojo.
Es por eso que Satoru no es encontrado aún.