Vísperas de la boda.

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Todos trabajaron con la mejor disposición dadas las circunstancias, el salón era un espacio excesivamente amplio con un gran balcón: El balcón desde donde el pilar solía asomarse a saludar a los cefirianos, la entrada y salida fue decorada con una hermosa tela blanca que colocaron Presea y Caldina con sus poderes de baile. Igualmente en el centro de la sala colgaron una tela transparente que llegaba  a las cuatro esquinas del salón entreverada con las columnas de mármol, esta tela era transparente y brillante, colocaron en varios lugares maceteros de hierro pintados de blanco, las flores serían colocadas ese mismo día,  acomodaron una gran cantidad de mesas y las cubrieron con manteles blancos, después las sillas también las estaban decorando con sendos moños del mismo color.

-Todo esto sería más fácil si Clef Latis estuvieran aquí- Suspiró Hikaru limpiándose la frente.

-Claro, ellos moverían varias mesas a la ves con su magia- Dijo Fuu

-Nos tienen a nosotros, ¿qué a caso no somos suficientes?- Preguntó Rafaga

-Por supuesto que si guapos- Guiñó un ojo Caldina su prometido y al príncipe Ferio.

-Aún así desearía tener el mismo control de mis poderes que ellos, temo que si lo intento solo haré que las mesas y la decoración vuelen por todos lados.- Reflexionó Fuu

-Estoy seguro que un día conseguirás esa precisión- Dijo Ferio dándole unas palmaditas en la cabeza.

-Oigan- Dijo Umi- No es momento para estar romanceando... 

-¿Qué Umi?- Bromeó Ferio- ¿Acaso tienes envidia?

Umi se puso rojisíma.

-!Claro que no tonto!... es solo que si tengo que atar un solo moño más... Perdón Caldina no quise ser grosera ups.

-Descuida niña, todos estamos algo cansados aquí. Y ahora...

Caldina abrió una caja de las que Rafaga y Ferio habían traído.

-Ah- Hizo Umi de manera involuntaria.

-¿Qué pasa? ¿Acaso no te gustan?- Caldina sacó las primeras dos lámparas doradas, dentro de la caja había muchas más lámparas y todas eran iguales, parecía que un genio saldría de ellas en cualquier momento.

-!No! !Para nada! !Son geniales!... Es que me trajeron recuerdos de repente.

-Ajajajaja seguro que la pasaste muy bien con los genios de las princesas Tata y Tatra en aquellos momentos.

-Fue divertido, pero no son mi tipo, la verdad me perturban un poco y las lamparas...

-Las cubrirán con flores y listones, las encenderán y al verlas olvidaras esos recuerdos desagradables- Dijo Caldina.

-No podía faltar un elemento decorativo de tu natal Zizeta- Sonrió Rafaga- Por cierto Umi... cual más o menos vendría siendo tu tipo?

-¿Tal vez te gusten los chicos altos de grandes ojos verdes?- Preguntó Caldina ilusionada.

-Pues... no he pensado mucho en ello, pero alguien alto estaría bien.

-¿Alguien tan alto como Rafaga?- Preguntó Hikaru- o tal vez como Latis.

-¿O como yo?- Preguntó Águila, Umi se sonrojó.

-¿En realidad importa?- Preguntó Umi, miró a Hikaru y a Fuu ellas tenían a Latis y Ferio, probablemente todos se preguntaban porque ella no tenía a nadie, tal vez estaban pensando en que algo estaría mal con ella - No lo sé... solo me gustaría que fuera un hombre apuesto y elegante... como un príncipe.

-O sea, ¿Como yo?- Dijo París

-!Claro que no! !Tu eres muy confianzudo y siempre estas diciendo cosas inapropiadas! !No pareces un príncipe te he creído más el que fueras bandolero y espadachín!...!Ah! Perdón Fuu.

El anciano mago y la piedra azul.Where stories live. Discover now