Capítulo 16

108 8 11
                                    

Nos montamos en el avión y Ryan comenzó a guardar el equipaje en el compartimento superior que había sobre los asientos

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


Nos montamos en el avión y Ryan comenzó a guardar el equipaje en el compartimento superior que había sobre los asientos.

—¿Estás cómoda? —dijo Ryan mientras se sentaba.

—Creo que sí —contesté.

De la nada, la azafata hizo un anuncio para garantizar la seguridad de los pasajeros:
"Señoras y señores, bienvenidos a bordo. Por favor, asegúrense de que su equipaje de mano esté guardado en los compartimentos superiores o debajo del asiento frente a usted. Les recordamos que deben abrocharse los cinturones de seguridad y asegurarse de que sus mesas de bandeja y respaldos de asientos estén en posición vertical. Les pedimos que apaguen todos los dispositivos electrónicos o los pongan en modo avión hasta que se lo indiquemos. Por favor, presten atención a la demostración de seguridad que vamos a realizar. Gracias por volar con nosotros y les deseamos un vuelo agradable."

Sentí una sensación ligera y un silbido en los oídos cuando el avión despegó, así que tuve que taparme los oídos.

–Si te silban los oídos bosteza para que ayudes a equilibrar la presión de los oídos—Explicó Ryan.

–Está bien—Contesté.

Al bostezar el silbido se fue.

–Gracias—Contesté.

–De nada puerco espín—Contestó Ryan.

–Despiértame cuando lleguemos—Le dije a Ryan.

–Está bien—Contestó Ryan.

Sueño:
Abrí los ojos y estaba en medio del vacío,me paré y empecé a caminar hacia adelante lentamente.Tenía un extraño presentimiento de que ya había estado allí.

–¡Sandra!—Una voz femenina me llamó.

–Dime—Contesté.

Miré hacia todos lados pero no salió nadie.

–¡Sandra!—Volvió a llamarme aquella voz.

Giré hacia atrás y era mi madre.Cuando vi a mi madre corrí hacia ella y la abracé fuertemente,mientras la abrazaba me acariciaba el cabello sus manos eran suaves.

–Mamá no sabes cuánto te quiero—Dije con lágrimas en los ojos.

–Estoy bien.Pero tú no lo estás—Respondió mi madre con una voz suave y lenta.

–¿Mamá de que hablas?—Cuestioné preocupada.

–Tú hermano está enojado contigo,porque no lo has atendido en mucho tiempo.Deberías llamarlo—Dijo mi madre.

–No lo voy a hacer el no me quie...

–Yo si te quiero—Dijo Xavier.

–¿Qué haces aquí?—Pregunté nerviosa.

–Vengo a llevarte conmigo—Respondió Xavier y comenzó acercase a mi.

Mi madre de la nada desapareció sin dejar rastros.

–Ven con tu hermanito Sandra—Dijo Ryan.

–Aléjate de mi maldito asqueroso—Lloriquee.

–Deja de llamarme así—Me golpeó.

Fin del sueño.

–¡Sandra!—Me llamó Ryan.

–¿Qué...qué pasa?—Contesté sobándome los ojos.

–¡Ya llegamos!—Dijo Ryan emocionado.

–¿A dónde?—Pregunté.

–¡A las Vegaaaaaaaaaasssss!—Gritó Ryan.

Nos bajamos del avión y nos dirigimos con las maletas hacia la revisión.Después de hacer todos lo necesario por fin nos fuimos.Unos guardaespaldas de Ryan nos estaban esperando en el aeropuerto.

—¿Siempre viajas con guardaespaldas? —pregunté, impresionada por la presencia de los hombres de traje que nos rodeaban.

—Solo cuando es necesario. Las Vegas puede ser un lugar salvaje, y quiero asegurarme de que estés segura —respondió Ryan con una sonrisa tranquilizadora.

Finalmente, llegamos a una limusina negra que nos esperaba. Los guardaespaldas abrieron la puerta y nos ayudaron a entrar.

Por fin llegamos a una mansión con vista a la playa.Tenía que admitir que esta casa era mejor que la otra.

–¿Está es tu casa?—Pregunté impresionada

—¿Lo dudas? —contestó Ryan con una sonrisa confiada.

La mansión era impresionante, con amplios ventanales que ofrecían una vista panorámica del océano. El sol se estaba poniendo, tiñendo el cielo de tonos naranjas y rosados que se reflejaban en el agua.

—Es hermosa —dije, aún asombrada por la magnificencia del lugar.

—Y ahora es tu hogar, al menos por el tiempo que estemos aquí —dijo Ryan, guiándome hacia adentro.

El interior era tan lujoso como el exterior, con muebles modernos y obras de arte que adornaban las paredes. Ryan me llevó a través de los pasillos hasta llegar a una habitación con una cama enorme y una terraza privada.

—Espero que te guste tu habitación —dijo él, abriendo las puertas de la terraza para que pudiera escuchar el sonido de las olas.

—Es más de lo que podría haber imaginado —respondí sinceramente.

Ryan asintió y me dejó sola para que pudiera instalarme. Mientras desempacaba, no podía dejar de pensar en todo lo que había sucedido. Las Vegas, la mansión... todo parecía un sueño del que no quería despertar.

Al desempacar me di cuenta que solamente había ropa de Ryan y no había ropa mía,estaba muy molesta.Fui a la sala para poder preguntarle a Ryan dónde estaba mi ropa,cuando llegué encima de los muebles había cajas de ropa y de zapatos.

–¿Qué es todo esto?—Pregunté

Encontré una nota de Ryan que decía:

..."No sabía cuál vestido escoger si el negro o el blanco así que te compré los dos.Ponte bonita que te tengo una sorpresa"...

Ryan.

Cuando abri la caja, habia dos hermosos vestidos. Al parecer, Ryan sí conoce bien mis gustos, pero en mis pensamientos todavía estaba la imagen de Arbusto, con sus ojos penetrantes y su cabello naranja.

 Al parecer, Ryan sí conoce bien mis gustos, pero en mis pensamientos todavía estaba la imagen de Arbusto, con sus ojos penetrantes y su cabello naranja

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
A su altura o a sus piesWhere stories live. Discover now