el destino

capitulo 35

Cuando volví a la cocina el ya estaba sirviendo los platos puso dos en la mesa y subió con otro en manos hacia la habitación de la abuela, me senté en la mesa y después de unos minutos el bajo, se sentó al lado mío y comimos, el hablo sobre su día pero yo solo decidí escuchar y eso hacia que su voz sonara triste Terminamos de comer el levanto los platos sucios y los lavo.

_¿no vas a ir al campo de entrenamiento en la tarde? -pregunto serio

_no, hoy quiero quedarme en casa -respondí

El terminó de lavar los platos y se acerco hacia mi, me dió un pequeño beso en la mejilla y se fue, me rompe el corazón verlo así pero no sé cómo expresarme, no quiero verme vulnerable.

Sin darme cuenta las lágrimas caían sobre mis mejillas, me las limpie y moje mi rostro con agua, busque una toalla y seque mi rostro, de nuevo volvi a la oficina.

pasaron unas dos horas aproximadamente y decidí salir un rato a tomar aire fresco, salí de la oficina caminando por el pasillo y abri la puerta decidí salir sin abrigo ya que tenemos una temperatura bastante alta y no lo necesito, caminar por la blanca nieve, el aire frio, me despeja la mente,y me hace sentir tan bien luego un recuerdo llego a mi mente, recorde cuando hice mi primer muñeco de nieve junto a papá.

Junte un poco de nieve e hice una bola para hacer el torso del muñeco luego hice una más pequeña y la puse encima de esta, busque unas piedras para ponerlas de ojitos y hacer una boquita, cuando las coloque y me gustó como quedó decidí buscar unas ramas para ponerle unos brazos me adentre un poco en los arbustos y de repente escuché unos pasos que pisaban firmemente sobre la nieve.

Mi loba se puso en alerta y mi instinto se activó, las ramas cayeron al suelo, podía sentir como sus pasos se acercan cada vez más, olfateo para saber cuantas personas son y logré percibir a dos hombres, grandioso que suerte la mia, camine lentamente sin hacer tanto ruido hacia atras pero vi como un hombre del alfa salia de entre los arboles de mi lado izquierdo, me puse más tensa, ya que no sabia cuales eran sus intenciones y luego el otro hombre salio de mi lado derecho.

_¿Que quieren? -dije sería

_el alfa te busca -responde uno de los hombres

Y cuando iba a responder la abuela grito.

_¡¿Que hacen aquí?!

_tenemos que llevarla con el alfa -dijeron al unisono

Y sin más me tomaron de los brazos uno cada uno y me empezaron a arrastrar por la nieve, la abuela desesperada grito pero estos hombres no me dejaban libre.

_¡tranquila!, ¡Todo está bien!

Ella asintió y poco a poco nos alejamos de casa, trate de olfatear para ubicarme y me di cuenta de que me llevaban hacia el lago, cada vez nos acercamos más al lugar, me estoy poniendo nerviosa, ¿Que quiere?, ¿Y si ya se enteró de los planes?, ¿Que voy hacer?, ¡me matará eso es seguro!, y después de un tiempo ya habiamos llegado observe como estaban unas chicas paradas en filas casi unas diez chicas, unas que parecen de mi edad, otras que parecen un poco mas chicas que yo, y unas de unos años mas grandes que yo.

Me pararon en la fila y unos minutos después ese imbécil había llegado y con su repugnante voz hablo.

_una de ustedes será mi pareja elegida y quizás las otras mis concubinas -dijo sonriendo.

Me quedé atónita cuando dijo esas palabras.

¡que mierda estaba diciendo!.

¡¿Como se le ocurre decir estupideces?!, el es un viejo desagradable, ¡se me revuelve el estómago de solo pensarlo!.

_¿alguna de ustedes tiene ya su mate? -pregunto.

Cinco de ellas levantaron las manos con temor este se acerco a ellas y las olfateo, su cara puso tal desagrado, lo que significaba que estaban marcadas, hizo unas señas y sus hombres se las llevaron el alfa camino mirando a las demás chicas y cuando se paró en frente mío esto hizo que saliera de mis pensamientos, y su asqueroso aroma se poso en mi nariz, jamas habia sentido tal asquerosidad.

Este me miró con desagrado.

No entiendo.

Liam estaba ocultando su olor entonces por qué su expresión se puso así, se escuchó como un lobo aullo con advertencia, entonces el dió unos pasos hacia atrás y algo más llamo su atención mire hacia a dónde el tenia su mirada fija y de la nada un lobo enorme salio de los arbustos, ¡era Apolo mi lindo lobito!, corrió hacia mi y se puso enfrente mío, las chicas salieron corriendo con miedo, mientras que el alfa tenía una cara de enfado.

Apolo dió un fuerte gruñido y el alfa decidió transformarse, decidí hablar o mas bien le ordene.

_¡apolo acaba con el! -dije sería.

El no dudo y se abalanzó hacia el, levantando sus garras para clavarlas en el cuello pero este se zafo de su agarre, a pesar de esto Apolo logro hacerle daño este se alejo un poco pero luego se abalanzó hacia Apolo, arañando con sus garras el lado izquierdo de apolo, apolo consigo mantenerse firme y levanto sus garras para arañar con fuerza el rostro del alfa, Apolo estaba impaciente por matarlo, siguieron haci un buen rato, arañando y mordiendo, provocando heridas en el otro.