El jefe de mi sobrina (TaeGyu ~ Kang TaeHyun y Choi BeomGyu)

Capítulo 13~Oro brillante

Maratón 5/6

-¡Papá! -TaeHyung comenzó a fingir que le temblaba el párpado por ansiedad. SeokJin, tumbado bajo su cuerpo, le quitó la paleta de la boca a su Alfa para comerla él. -¡Papá!

El Alfa se levantó de la cama, dejando a su Omega libre de la encerrona en la que planteaba deborarlo al saberse solos en casa antes de volver al trabajo.

-Castañita. -Dijo el más tatuado abriendo su puerta. -Papi y yo estábamos en algo importante.

-Iugh, que asco. -Se escuchó desde la planta inferior de la casa. -¿Seguro que no sois conejos en vez de lobos? -TaeHyung miró a su marido sentándose en la cama y con su caramelo en la boca.

-La idea de tener nueve hijos no me agrada, por lo demás todo bien. -SeokJin se rio, su cuello rojo al instante. TaeHyung volvió a caminar hacia él para besarlo, la desesperación de su hijo sonando de nuevo por todo el vecindario.

-¡Se me ha pinchado una rueda! ¡Tengo que llegar al colegio a por MinMin, por favor! -TaeHyung quedó con la boca hecho piquito cuando SeokJin se levantó de golpe y corrió escaleras abajo.

-¡Nosotros te llevamos! ¡Queremos conocer al pequeño MinMin!

-No grites. -Demando a SeokJin. -No lo toques. -Exigió a TaeHyung.

-Okey. -Alzaron ambos de sus padres sus pulgares, sonriendo cómplices y haciéndolo rodar sus ojos.

BromGyu bajó del coche de su papi, el cual conducía su papá, y se maldijo por no haberse sacado el carnet de conducir aún. En la parte trasera habían colocado su vieja silleta de bebé rescatada del garaje. Al llegar a la puerta del colegio, tan solo quedaba SeungMin con su profesora. La cual, como llevaba haciendo desde que lo conocía, le miró con irritación y juzgona.

-Llegas tarde. -Dijo la mujer pelirroja.

-Lo sé, gracias por la información no deseada. -Su carácter de desagrado hacia la mujer cambió a una sonriente cuando miró al pequeño. -Hola, MinMin, perdón por llegar tarde. -El menor corrió hacia él y alzó sus brazos, como llevaba haciendo desde que lo contuvo en su ataque, y BeomGyu lo alzó con ligereza. -Tengo una sorpresa, mis papás han venido para llevarnos a casa en coche.

-A SeungMin no le gustan los desconocidos. -Volvió a hablar la profesora, con tono señalado al decir el nombre del cachorro, BeomGyu la miró con la interrogante de "porqué seguía alli".

-De nuevo; un dato que no he pedido, que ya sé y que yo mismo juzgaré. -El pequeño comenzó a lanzar pensamientos dando sin querer en la mejilla de BeomGyu con sus deditos, este pasó sus labios en caricias por su frente hasta que se calmó. Mas algo fuera de lugar lo extrañó y alertó. -Tienes fiebre.

-Ha estado raro todo el día, podría estar enfermo. -La mirada desafiante del menor a la mujer le tomó por sorpresa e intimidó.

-¿Y no has podido llamar a su padre?

-El señor Kang es un hombre ocupado.

-Vete a la mierda. -BeomGyu giró y se marchó camino al coche, donde sus padres se mantuvieron en silencio viendo al niño solo por el espejo retrovisor. -Tiene fiebre. -Dijo finalmente sentado a su lado en la parte trasera y tocando su frente con el dorso de su mano, SeungMin se removió incómodo.

-¿Quieres que vaya a su casa contigo para cuidarlo? -Ofreció SeokJin girando a ver al niño, BeomGyu dudó.

-Un momento. -Pidió sacando su móvil y marcando rápidamente a su jefe. Bastaron dos tonos para que la llamada fuera atendida.

-¿Qué pasa? -A eso se refería BeomGyu cuando mandó a la mierda a esa mujer. Sí, Kang TaeHyun era un hombre muy ocupado, pero el papá de SeungMin se desvivía por él y era más que obvio que había dejado una reunión a mitad para atender esa llamada.

-SeungMin tiene fiebre y parece resfriado. -Explicó tratando de nuevo de tocar al menor, este tomó su mano y la abrazó a su pecho como si fuera un peluche que estrujar. -No sé cómo cuidar de niños enfermos. -Sinceró escuchando un suspiro nervioso al otro lado. -Sé que hoy vas a salir más tarde del trabajo por mi culpa...

-No es tu culpa. -Las dos horas que BeomGyu había estado en el bufete de abogados la mañana se dos días pasados habían retrasado el resto de reuniones de TaeHyun. Por lo que, en vez de salir a las siete, saldría a las nueve.

-¿Puedo llevar a SeungMin a mi casa? -La línea quedó en silencio. -Mis padres podrían ayudarme.

¿TaeHyun sería capaz de dejarle tal responsabilidad? Sabía que tenía cámaras en su casa. Seguramente vigilara, sobre todo los primeros días, sus movimientos con el pequeño. Él mismo le había confesado que había visto como calmaba a SeungMin y le cuestionó cómo lo había hecho.

-Sí, iré a por él allí en cuanto pueda. -BeomGyu sonrió, escondiendo su felicidad contra el cabello castaño del cachorro para que sus padres no lo vieran. TaeHyun, de nuevo, estaba confiado lo que más amaba a él.

Habían parado en una farmacia, comprando un medicamento genérico para cachorros. El pequeño se había negado en un principio al baño de agua fría, aceptando finalmente cuando BeomGyu entró al agua helada con él y lo sostuvo contra su cuerpo.

TaeHyung había preparado la habitación de su hijo con un humificador, aroma a menta y eucalipto para abrir sus pulmones. SeokJin le había ayudado a vestirlo con ropitas del mismo BeomGyu y que también fueron de JungKook. Era ese tipo de ropa que no podías tirar, aún si sabías que no tendrías más hijos, porque guardabas recuerdos en ella.

El chándal de dos piezas blanco, con perritos dámmatas, hacía lucir adorable a SeungMin. BeomGyu sonrió al verlo vestido, por primera vez, con ropas de niño normal. SeungMin siempre vestía camisas, incluso vaqueros, pero con esa ropita era de verdad un cachorro desprotegido sin mami o papi que lo cuidara.

-Es un cachorro adorable. -BeomGyu asintió, también vestido con un chándal casual, mientras lo arrullaba.

-Es muy bueno, pero incomprendido. -SeokJin miró con nostalgia a su hijo sostener al pequeño, con cautela se acercó con secador en mano a la cama donde ambos estaban sentados. -Lo asustará.

-Cántale, a ti te funcionaba. -Sugirió TaeHyung. BeomGyu lo pensó, la melodía que ligeramente habían compuesto la noche anterior sus amigos y él resonando en su cabeza. Comenzó a cantar, SeungMin durmiendo por momentos mientras SeokJin les secaba el cabello a ambos.

-"En el fondo de ese hoyo, eres el único oro brillante. Ahora no puedo dejar de pensar en ti cuando me estoy hundiendo solo. Un ángel apareció de pronto para mí, llévame a casa*. Sé que eso es real, puedo sentirlo."