✧°. En algún momento Rodolfo se ofreció a enseñarte español. Por supuesto que conocías algunas palabras, pero no las hablabas con fluidez y podría resultarte útil mientras estés en México con ellos. Obviamente sugirió ese trato para pasar más tiempo contigo.

✧°. Y no mucho después, ustedes dos caminaban juntos a todas partes. Si no es interrumpido por Alejandro, claro.

✧°. "Quiero agarrar tu culo, chiquita.

✧°. "Quieres... mi... lo siento, ¿qué? No conozco esas palabras, Rudy."

✧°. "No te preocupes. Lo haras."

✧°. Intentó ser disimulado con sus comentarios sucios, pero Rodolfo no entendió el momento en el que empezaste a entender las conversaciones en español. Sólo se dio cuenta cuando volvió a decir algo similar y tus mejillas se sonrojaron de un rosa brillante. Pero fue sólo una broma tonta, ¿verdad?

✧°. ¡Pervertido!Rudy quedó hipnotizado con tu olor: no pudo determinar si era un detergente con el que lavabas tu ropa o un gel de baño que limpiaba tu piel suave y tersa de la suciedad. Si tuviera la oportunidad de estar cerca de ti, inhalaría discretamente el aroma de tu cabello.

✧°. Quizás, cuando él estaba parado justo detrás de ti, corrigiendo tu postura mientras apuntabas hacia el campo de tiro, su cabeza inclinada sobre tu hombro para devorar tu dulce aroma.

✧°. Y eso lo hizo pensar, ¿a qué olería tu vagina ? ¿ A qué sabrían tus jugos en su lengua? Divino seguro. <3

✧°. ¡Pervertido! Rudy sería fuerte en "marcar su territorio". Si alguna vez mencionabas que tenías frío cerca de él, te daría su sudadera con capucha sin dudarlo ni dudarlo. Verte con esa ropa de gran tamaño, una pertenencia suya , empapada con su olor y sudor, haría que Perv!Rudy se volviera salvaje.

✧°. Debido a su hospitalidad y amabilidad no pasó mucho tiempo antes de que usted confiara plenamente en el sargento mayor. No te importaban sus toques, incluso cuando mantenía su mano sobre tu hombro o espalda casi todo el tiempo. Su toque fue cálido y gentil. Siempre.

✧°. No te sentiste incómoda incluso cuando comenzó a apretar juguetonamente la felpa de tu muslo debajo de la mesa de la cantina como si fuera una pelota antiestrés.

✧°. Como Rodolfo es un hombre de muslos, no puedes convencerme de lo contrario. Si alguna vez te pusieras calcetines hasta los muslos, se desmayaría de euforia.

✧°. Una vez, vio una canasta llena con tu ropa limpia y cierto par de bragas le llamaron la atención. Saliste del cuarto de lavado por un momento mientras uno de tus amigos te sacaba para contar algunos chismes. ¡Pervertido! Rudy dudó un momento antes de tomar esas bragas de la pila de ropa y guardarlas en el bolsillo de sus pantalones.

✧°. Más tarde esa noche inspeccionaría el material de algodón, vertiéndolo entre sus dedos, antes de envolverlo alrededor de su eje palpitante y goteante. Rodolfo empujaba sus caderas contra su propio puño, pensando en cómo lucirías tú, sentada a su lado y ayudando a Rudy con su dolorida erección. :(

✧°. Necesitaba mucho tu ayuda: tus ojos inocentes pegados a su rostro, esperando más instrucciones sobre cómo satisfacer al sargento Parra acariciando su grueso y carnoso eje.

✧°. La última vez, mientras una misión salió muy, muy mal, te encontraste a ti y a Rudy siendo arrastrados río abajo por su corriente. Conseguiste sacarte a ti y a Rodolfo de las aguas agitadas.

✧°. Tu ropa estaba empapada, ajustada a tu figura femenina y los fuertes jadeos que tomabas para respirar; fue lo primero que Rudy registró después de que lo sacaste del río. Sintió tu mano presionada contra su pecho mientras tosías un poco de agua.

𝐂𝐀𝐋𝐋 𝐎𝐅 𝐃𝐔𝐓𝐘 𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒Where stories live. Discover now