Capítulo 14 - Carrera de Confianza

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— Siento haberle hecho esperar, poderoso Dialga... —Dusknoir se encontraba parado en una superficie de ladrillos grises, la zona estaba hecha un desastre, con trozos de columnas y pedazos del suelo suspendidos en el aire sin ningún orden. Al frente, un vacío sumido en completa oscuridad. — Aunque me he encontrado con más problemas de los esperados... He cumplido la misión. La captura ha sido un éxito.

Un apagado gruñido fue lo único que se escuchó como respuesta, acompañado por un par de ojos rojos junto a algunas líneas de un naranja brillante que se encendían y apagaban constantemente, dando la impresión de parpadear.

— Entiendo... Comprendo lo que debemos hacer ahora. Aquellos que buscan alterar el curso de la historia... deben ser eliminados. Me haré cargo de ello inmediatamente.

Se repitió el mismo gruñido con la diferencia de ahora ver su volumen aumentado.

— Entiendo. Como desee. Ahora me retiro.

[...]

— Oye... Rubén...

El Mudkip escuchaba débiles sonidos que no era capaz de distinguir entre su ensoñación. Su cuerpo entumecido era una clara señal de que llevaba un buen rato dormido en una posición para nada cómoda, sumado al dolor en varias partes, principalmente en la espalda le hicieron creer que lo más probable era que se hubiese caído de algún lugar alto antes de perder la consciencia.

— ¡Despierta, Rubén! —al ver que comenzaba a desperezarse, el Shinx pasó de intentar despertarlo con simples palabras a agitar levemente a su compañero que descansaba en el suelo.

— Ay... —intentó abrir los ojos, pero por alguna razón sentía los párpados pesados. Se sentía desorientado e incapaz de poner en orden los pensamientos que daban vueltas en su cabeza, de manera similar a las palabras que simplemente no le salían.

— ¡Te has despertado! —celebró Rinx sin poder evitar envolver en un abrazo al contrario, quien reaccionó enseguida para observar a su compañero y caer en cuenta de lo cerca que estaban.

Sin embargo, el gesto no duró mucho más que unos segundos, tras los que el tipo Eléctrico se apartó aún con una sonrisa en su rostro. Él llevaba ya un rato despierto, tiempo que dedicó a observar sus alrededores, decidiendo despertar a su compañero tras comprobar que no hubiese más Pokémon cerca.

— ¿Dónde estamos? —consiguió pronunciar Rubén, concentrado en evitar pensar demasiado en lo que acababa de pasar, notando por fin el extraño sitio y lo oscuro que estaba más allá de lo que el Shinx era capaz de iluminar.

— Creo que estamos... —pensó un momento en la mejor descripción según todo lo que había visto. — ...en una prisión.

— ¡¿Una prisión?!

El Mudkip se puso alerta enseguida, analizando a detalle pero con rapidez todo lo que estuviese al alcance de su vista, llamándole la atención los enormes barrotes a su derecha que hacían de pared.

— Me he despertado hace poco, así que no estoy muy seguro de lo que pasa. He intentado abrir la reja, pero está cerrada con llave y no parece haber ninguna otra salida. Creo que nos han encerrado...

— ¿Qué ha ocurrido? —incluso tras recibir una explicación, Rubén decidió comprobar por su propia cuenta la sala que los retenía.

Tal y como había mencionado Rinx, la reja hecha de barrotes no dejaba espacio para que pudieran atravesarla, y la cerradura de la puerta que ésta tenía justo en medio no permitía moverla lo más mínimo.

El resto de paredes, al igual que el suelo, estaban completamente firmes, y con una superficie tan dura como aquella, ni siquiera sus intentos de Excavar fueron de ayuda.

Pokémon Mundo Misterioso: Fragmentos DimensionalesWhere stories live. Discover now