Santa voluntad

83 14 10
                                    




Narra Manuel

El sol había entrado por la ventana de la habitación, en la cama se encontraban Mayte y la nena durmiendo plácidamente, curiosamente ambas tenían la misma manera peculiar de dormir cosa de la que ya se había percatado antes pero el verlas así le dió gracia, suspiro con una sonrisa sobre sus labios pues la espera era cada vez más corta, el día siguiente sería por fin sería el gran día, se perdió mirando a Mayte como su piel lucía tan hermosa con la luz del sol chocando contra su mejilla hasta que ella abrió los ojos tomándolo por sorpresa.

Mayte: ¿No te cansas?-Dijo con la voz adormilada mirándolo con una sonrisa.

Manuel: Jamás-Le susurró acariciando su mejilla.

Mayte: Solo un día para que seas el señor Lascurain-Dijo burlesca acercándose a él abrazándolo.

Manuel: Qué afortunado, jamás me hubiera imaginado que quedaría en esa familia-Dijo guiñándole un ojo mientras sonreía burlesco y ella le dió un leve golpe en el pecho.

Mayte: Tan gordo que me caíste aquel día-Dijo riendo mientras se mordía el labio.

Manuel: Del odio al amor solo hay un paso bien dicen-Dijo sonriendo mientras la abrazaba.

Mayte: O una cama-Dijo sonriendo haciendo que Manuel soltara una carcajada.

Manuel: ¡Ay, mi Maytecita!-Suspiró-Solo un día para que seas socia de todos mis bienes-Dijo sonriéndole mientras acariciaba su espalda.

Mayte: ¿Y ese suspiro es de felicidad o resignación?-Preguntó burlesca arqueando una ceja y este volvió a soltar una carcajada.

Manuel: De felicidad mi amor-Dijo riendo haciendo reír a la Lascurain.

Mayte: Más te vale gordito-Dijo señalándolo con el dedo indice y Manuel dejo un pequeño beso sobre la yema de este-¡Gordo!-Dijo Mayte riendo.

Mailen: Pa-pá-Dijo la nena con la voz adormilada haciéndonos sonreír a ambos.

Mayte: Buenos días mi amor-Dijo sonriendo mientras ella se sentaba en la cama y bostezaba.

Manuel: Buenos días luz de mi vida-Dijo sonriendo mientras la miraba y la nena sonrió.

Mailen: Pa-pá, Pa-pá, Pa-pá-Dijo emocionada aplaudiendo.

Mayte la unió al abrazo y ambos comenzamos a dejar besitos sobre sus mejillas haciéndola reír, la nena reía a carcajadas contagiándonos de su alegría, después de un rato decidimos salir de la cama para bajar al comedor a desayunar, al llegar nos encontramos con el desayuno servido y con los gemelos a cargo de Julia quién inmediatamente se acercó a tomar a la nena en brazos para colocarla en la silla para bebés donde ya estaba listo su desayuno, Manuel y yo nos sentamos a su lado mirando a los pequeños desayunando bastante felices.

Zahir: Pá, ¿Sabías que hay caballos?-Preguntó con curiosidad.

Manuel: Mjum-Dije mientras probaba el primer bocado del platillo que nos habían servido.

Mayte: ¿Cómo sabes?-Preguntó con curiosidad mientras comía y volteé a verla con sorpresa ante la pregunta.

Manuel: Digamos que los dueños de la hacienda son muy cercanos a la familia y vine a aquí un par de veces a montar-Dije guiñándole un ojo y asintió.

Mayte: La pregunta no era para ti pero gracias por el dato-Dijo sonriendo y sentí como me daba calor en la cara de la pena.

Oliver: Un señor de los que aquí trabajan nos lo dijo-Dijo sonriendo.

Cambiando el destinoWhere stories live. Discover now