•un negativo•

18 2 0
                                    

La mañana en Brook Mountain había sido una de las más frías en lo que iba de invierno. Los 10ºF estaban calando hondo en cada habitante de la ciudad. Por muy alfas, betas u omegas que fueran las temperaturas se estaban sintiendo. Dean no había podido salir de la cama. Trató pero parecía que su cuerpo había absorbido el frío y le estaba pasando factura. Los escalofríos, la fatiga, las incontables veces de sus viajes al baño entre sus necesidades y uno que otra vez devolver lo que no tenia en su estomago. A duras penas se sentó en su cama y el dolor de cabeza era insoportable, abrió su cajón de la mesa de noche y tomó un par de píldoras para aliviar un poco el malestar. Vio la jarra vacía y maldijo. Se tendría que parar.

-W-Wou...- susurró asombrado al sentir un mareo.

Volvió a sentarse y se quedó mirando a unos zapatos frente a él. Se perdió en ellos mientras analizaba cuidadosamente la duda que se acababa de instalar en su mente. Era posible, claro que sí, ambos estaban en su celo y además hubo nudo. Sin duda alguna era muy probable que estuviese esperando un cachorro de su alfa. Abrió los ojos de par en par ante la gran duda y no perdió el tiempo y buscó su celular.

Los síntomas desaparecieron al instante igual que su teléfono. No lo encontraba, había desaparecido o era los nervios que por eso no lo visualizaba. Estaba junto a las píldoras que no había podido beberse. Suspiró y con manos temblorosas tomo el celular. Que haría, como reaccionaría Sam, lo querría, tendría que mudarse con Sam, como sería de papá, como lo cuidaría, sería buen papá. Tantas preguntas en cuestión de segundo nublando sus pensamientos.

-Cariño hola...- escuchó a los lejos la voz del moreno pero aún así no reaccionaba -Dean que te pasa...- añadió Sam

-N-Necesito que vayas a una farmacia y compres una prueba de embarazo. Pudiera tener un cachorro ahora en mi panza. Necesito que dejes lo que estes haciendo vengas. No podría estar solo- dijo de sopetón sin dejar que Sam procesara toda la información que él le había dado.

La llamada terminó y en silencio Dean se tiró hacia atrás en la cama. Tenía muchas dudas volando por toda su mente y esperaba tener todas las respuestas porque sino todo lo que había logrado se iría por el caño. Pidió al cielo tranquilidad y entendimiento para procesar una noticia como esa. Uno debe tener cuidado con lo que pide cuando se está en el celo. Sus mejillas se colorearon cuando los recuerdos de él suplicando que lo anude y que quería tener un hijo del alfa invadían su mente.

Una pequeña sonrisa se escapó de sus labios y por un segundo se sintió valiente, se sintió feliz y dichoso por cargar a su cachorro. ¿Como sería? Piel trigueña y pecas o blanco con el rizo en su cabello. Valiente como sus padres, detallista como el moreno, cariñoso como el pelirrojo.

-Que sea como su papá- susurró y no se percató de que el moreno se encontraba en la habitación con el rostro enseñado miles de emociones.

-Que sea así de hermoso como tu...- dijo Sam con una sonrisa asustando al pelirrojo quien se levantó al instante volviéndose a marear.

-Que haremos si sí?- preguntó Dean con la preocupación en su rostro

-Haremos la familia que tanto cree en mi mente junto a ti...- dijo Sam sentándose junto al pelirrojo

-pero si no?-

-Lo intentaremos hasta que nos salga.- añadió el moreno tomando sus manos para darles un beso -no me molesta la idea- dijo soltando una sonrisa

Dean asintió desganado y en silencio. Hasta ese preciso instante no se había planteado que de verdad él si quería ese positivo. Tenía sentimientos encontrados porque le aterraba tener un hijo pero de igual manera le encantaba esa idea. Se levantó cambiando por completo su actitud tratando de esconder la decepción en su rostro.

-Dean, hijo, el desayuno está listo- dijo Clara desde el pasillo pero tan pronto llegó a la puerta, no emitió ninguna otra palabra.

Sintió el ambiente tenso y no quiso emitir ninguna otra palabra, por un par de segundo observó a su hijo y luego a Sam. Definitivamente no era el momento perfecto para interrumpir, el rostro de ambos lo gritaba.

-¿Todo anda bien?- preguntó por compromiso porque ella sabía que nada andaba bien.

La reacción de Dean la dejó muda. Ver a su hijo ir directamente a ella con esa mueca en su rostro la alertó. Las manos de su hijo casi la asfixia del abrazo que le dio pidiendo un consuelo. Un consuelo que llegó lleno de muchas palabras de aliento. Clara no sabía los anhelos de Dean de tener cachorros hasta ese momento. A pesar de los largos meses de relación con el moreno.

-N-No...- susurró en llanto.

-Oh cariño tranquilo...- dijo al ver como el moreno, en silencio, le mostraba la prueba -Tienes por delante tiempo para tener cachorros. Ese negativo no es para siempre. Ya verás que llegará en el momento oportuno y estas lágrimas que botas, ahora, de tristeza cambiarán a unas de alegría.-

El teléfono del moreno sonó trayendo a los alfas a su realidad. Sam contesto con una sonrisa en sus labios observando a Dean y Clara hablando bajo. Ver como a mejorado la relación de Dean y su mamá lo tenía contento a pesar de la noticia. Zack le había llamado solicitando su presencia en una nueva operación que tenían. La operación BOA había sido todo en éxito pero lamentablemente aún había uno que otro alfa abusando de su poder y eso tenía que agregarle la despiadada de Phelicity que no habían logrado dar con su paradero. Sam había jurado asesinarla con sus propias manos al momento en que Dean le contó en lágrimas lo que esa mujer le había hecho y el dolor que le había causado.

-Cariño...- esperó que Dean se apartara de su madre y acarició su mejilla mientras lo observaba detalladamente -Zack me pidió que fuera con él. Al parecer hay una nueva misión.- este asintió y la decepción en el rostro del pelirrojo se tornó en preocupación -Estaremos bien...- dijo Sam al notable cambio en el rostro de Dean

-No me importa los demás me importas tu. Es muy peligroso. Mira que pasó en la ultima misión y ya he perdido bastante como para también estar con la incertidumbre de perderte. No quiero...no estoy dispuesto a perderte.- los brillosos ojos de Dean preocuparon a Sam.

-No lo harás. Te prometo volver, te prometo que me verás entrar por esa puerta, te prometo volver a ti.- dijo Sam mientras secaba con sus pulgares los ojos inundados de lágrimas.

Dean soltó un suspiro entrecortado tratando de soltar todas las palabras que quería decirle al moreno. No quería que se fuera, no quería que el moreno se apartara de él pero ese era su deber y el pelirrojo no era quien para prohibirle hacer lo que tanto le apasionaba.

-Eso espero porque no soportaría perderte de verdad Sam...- las manos del moreno viajaron desde su rostro a su cintura e hizo que sus cuerpos se acercaran a una cercanía casi imposible -Me prometiste completar la ecuación- esta vez Dean fue quien tomó el rostro del moreno en sus manos -Debes cumplirlo escuchaste...- eso último se escuchó como una orden.

Sam tomó una de sus manos y la llevó a sus labios para dejar un beso en la palma de esta -Entendido alfa...- dijo con una sonrisa

-Ahora bésame...- exigió Dean y Sam no era un hombre que no acatara las exigencias de su alfa. En instantes los labios del moreno se encontraron con los de Dean haciéndolo suspirar en medio del beso. Ambas bocas se movían en un movimiento lento pero muy apasionado.

Las manos del moreno se aferraron al cabello del pelirrojo evitando que se separara aunque sabía que este no quería separarse. Las manos de Dean terminaron enganchadas en el cuello de Sam aferrándose a este suplicando así que no se aleje. Un enredo de lenguas, gemidos y suspiros pesados era lo que se escuchaba en la habitación. El amor desenfrenado y único que ambos sentían estaba en el aire.

-C-Cariño...- susurró Sam entre el beso -me la estas poniendo difícil. Si las despedidas siempre serán así no voy a querer irme. Mi alfa no me permitirá alejarse de su alfa. Tendré que dejar de lado las operaciones...- dijo bien cerca de sus labios -repito serás mi perdición pequeño...-

-No...- dijo mientras sus ojos escaneaban el rostro del moreno -Las operaciones es lo que tu amas...-

-Pero te amo más a ti...- dijo y se separó -Tengo que irme- dijo dándole un beso en los labios y luego en la frente. -Te llamaré para tenerte al tanto- dijo y desapareció dejando a un Dean preocupado y nervioso en la habitación.

_ + a = _       •Sam y Dean• #IO2Where stories live. Discover now