Capitulo 5 La mujer misteriosa

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Sakura permaneció dentro del cuarto de huespedes toda la mañana. Decidió permanecer en aquel lugar sin pedir nada más que las comidas que necesita para esperar a su tonto padre, quien a pedido que sea amigable con la persona que la "rescató". Cómo puede hacer ello si se trata del mismo que ordenó la masacre de Naruto y sus camaradas. Sentía que era como traicionar de la forma más sucia a la memoria de Naruto y todos aquellos que convivieron mientras fue la esposa del Uzumaki. Aunque hubiera sido corto el periodo del casamiento pasó buenos días con todos ellos. También pensaba en lo que diría el supuesto hermano que no fue presentado, el gemelo, si en dado caso llegaran a encontrarse en un futuro, para evitar problemas solo debía mantenerse alejada de Sasuke.

Ayer por la noche pudo haber sido cortesía querer plática después de comunicarse con su padre. Lo que tramara no estaba en su lista de deberes crear amistades con Sasuke. Un golpe a la puerta la obligó a abrir sospechando que podía tratarse de él, sin embargo, no fue a él a quien encontró, sino a la persona que no a sido comunicativo, solo conversa lo necesario para hacerle saber sobre las comidas. También se hace cargo de otros deberes mientras la cuida, pudo notarlo en los tiempos que desaparece durante el día.

—Volvere en una hora. Tienes permiso de salir a caminar mientras Sasuke Uchiha no se encuentra en la propiedad. Si aceptas a dar un paseo pido que no te alejes demasiado de la cabaña. Más adelante encontrás la mansión principal donde viven los padres de Sasuke, son personas amantes de la privacidad, así que no te alejes demasiado.

Sakura asintió con la cabeza y lo observó marcharse por la puerta delantera donde lo esperaba una camioneta que partió pronto como el pelinaranja subió.

Revisó los alrededores al interior de la cabaña. Por la ventanas no pudo observa a otra personas cuidando de ella. No era necesario que lo hicieran ya que estaba claro que no podía salir de la propiedad de los Uchiha. Tampoco quería hacerlo ahora que sabe que en unos días vendrán por ella, después deberá volver al aburrido pueblo, aunque eso no era lo que quiera. Sakura tenía pensado abandonar otra vez el pueblo, pero de la forma correcta para que sus padres no repitan la misma estupidez de pedir ayuda a un jefe de la mafia. Ellos deben entender que su hija no quiere vivir junto a ellos, que desea más que nada explorar y aprender de sus errores como toda una persona independiente. Pero por ahora estaba obligada a quedarse dentro del cuarto de huespedes.

Media hora transcurrió dentro de la habitación cuando de pronto el relincho de un caballo la alertó. La única persona que a visto montado en un caballo es a la persona que quiere evitar. Mientras no salga nada la obligaría a salir de esa habitación. Un poco nerviosa revisó a través de la ventana que daba hacia la parte trasera de la cabaña. Un hermoso caballo blanco con una silla de montar apareció. Si él se encuentra dentro de la cabaña no hay nadie más que ellos dos.

La desconfianza de la pelirosa la obligó a pegar un costado de su cabeza contra la puerta. El sonido de pasos con tacón subiendo la escalera que lleva a la plata alta atrajo su atención. En los tres días que lleva habitando la cabaña nunca a subido a la segunda planta. La curiosidad por ver desde hace días a una mujer la llevo a salir y acercarse al comienzo de la escalera. Podía ser una sirvienta o alguien más de la familia Uchiha. Sakura sospecho que de ello se trataba por el majestuoso caballo blanco purasangre.

De pronto encontrarse con otro familiar de Sasuke no sería agradable. Sakura tomó la decisión de volver a la habitación antes de encontrarse con esa persona que seguramente no se trataba del tipo. Sin embargo, antes de volver a la habitación en silencio, el llanto de una mujer sonó fuerte. Alguien comenzó a llorar.

Sakura de pronto se sintió confundida, ya que el llanto aumentó seguido de palabras como si hubiera una tercera persona dentro de la cabaña. Pronto supo que la mujer conversaba por teléfono. El timbre sonaba todos los días a la misma hora para avisar a Jūgo sobre el menú del día. Sakura sabía que en la cocina había un teléfono que solo servía para contactarse a la mansión principal y la entrada principal. No servía para otra cosa porque era necesario una clave. Intentó hacer una llamada mientras el pelinaranja no se encontraba, y se encontró con una operadora pidiendo la clave para hacer llamadas que no fueran las dos opciones que tenía disponible.

Pesadilla (Anti-romántico / EN EMISIÓN)Where stories live. Discover now