𝖒𝖊𝖘...

119 15 1
                                    

Un mes puede pasar volando, como la lluvia junto con la buena compañía de alguien amado, como un atardecer, como un comienzo.

Ya transcurrió un mes desde aquella llamada, desde aquella noticia.

Disney, quien dos o tres veces a la semana iba a visitar a su amigo, no era intencional visitarlo unas cuantas veces, el superior no lo dejaba, aún que este le suplicaba de rodillas, perdiendo toda dignidad que ahora le faltaba.

Universal se escabullia y Dreamworks lo cubría, este ultimo había cambiado drasticamente su comportamiento, había dejado de ser el matón de aquel lugar, las empresas del lugar lo notaron, menos los dos a los cuales había prestado su hombro para que llorarán y se desahogaran, tal vez aquella vez, en ese instante, se dio cuenta que podría hacer algo más que burlarse de los demás.

Dio un cabezazo al escritorio, por décima vez en la mañana. Intentando pensar en otra cosa que no lo atormentara e hiciera que se sienta más inútil de lo que ya se sentía.

Nadie se podría tomar a bien el coma de alguien amado.

En todo el mes transcurrido, no había avanzado en ninguno de su proyectos, se sentaba y daba cabezazos en el escritorio hasta la hora de irse a casa.

Y Universal, a el no le iba mejor.

- Por dios, Universal, ya superalo. - Expresó, mientras veía a su amigo en el piso tirado de boca abajo. Se acercó a él. - ¿Estás vivo? - Pregunto, tocando con el dedo índice la espalda del otro.

- Si... - Respondió, ahogado por la alfombra.

Se estaba hartando de esta situación, tener a dos personas depresivas a su alrededor era fastidioso, y tener que lidiar con ellos era peor.

- Ya, vamos. - Lo agarro por detrás del cuello del traje.

El no se desistió, y se dejó arrastrarse por Dreamworks, sin importarle que las empresas lo mirasen.

...

Tiro el cuerpo adentro de la oficina, haciendo que el contrario se dé de frente contra el suelo.

- Lo siento. - Disculpo, sin tanta importancia.

- No me importa. - Perdono, sin levantar su rostro del suelo alfombrado.

- Váyanse. - No se tomó la molestia de levantar su cabeza del escritorio.

Suspiro, cansado. - Mi psicólogo privado pronto llegará. Hablaran con él. - Ninguno de los dos levantó la mirada, ni hablaron, ni se inmutaron.

Suspiro, por última vez antes de cerrar la puerta e irse de ahí para esperar al psicólogo a las afueras del edificio, cuando llego a las puertas, vio un auto estacionadose, llegó.

...

Pasaron exactamente dos horas, dos horas donde Universal y Disney hablaban en la oficina de este último con el psicólogo. El estaba tomando su descanso del mediodía, estaba esperando a que la sesión se terminase y ver los resultados de estos dos, mientras comía un sándwich de la cafetería.

La puerta se abrió, mostrando al psicólogo, se atragantó, por un momento, con un pedazo del sándwich. Cuando se recuperó, vio hacia adentro de la oficina, los dos muchachos tapaban su logo con las manos, apoyaban sus codos cerca de sus rodillas y estaban inclinados hacia adelante, estaban llorando.

- Estan...

- Déjalos que se desahoguen, lo nesecitan. - Interrumpió, y pasó por su lado, retirándose.

Los quedó observando por un tiempo, entro a la oficina, y les dio palmadas en la espalda a ambos. - Tranquilos... - Intento consolar.

La verdad, no lo mostraba, pero su pecho dolía al verlos así de vulnerables, de indefensos ante la cruda realidad que debían enfrentar.

...

La luna se asomaba, y el sol se ocultaba.

Buscaba en su celular una foto de Pixar, un consejo que le había dado el psicólogo; recordar momentos felices con esa persona.

Hasta que encontró una, una foto de él junto con Pixar, aquella vez fue su cumpleaños, el fue el primero en felicitarlo, en la foto se podía ver como mantenía los ojos cerrados con pequeñas lagrimillas, pero con una sonrira, a lado de el estaba Pixar sonriendo de oreja a oreja.

Siguió deslizando, encontrando más fotos y recordando más momentos, y en un momento se encontró sonriendo y dando leves risas encima de su escritorio, apoyando su logo en su puño.

El tiempo siguió, y la luna estaba cerca de su punto medio, y el aún seguía ahí, sonriendo con el rostro iluminado por la pantalla.

- ¿No piensas irte? - Alguien pregunto desde la puerta.

Se sobresalto, y apego su celular a su pecho. - Ah, eras vos. - Se tranquilizo. - Si, si, ya voy. - Dijo, y se levantó, aun examinando su celular.

Agarro su bolso y salio de su oficina, cerrando la puerta. Siguió caminando mientras miraba el telefono, siendo acompañado.

Dreamworks acompañaba a Disney desde hace un mes, teniendo de excusa que se le hacía tarde por no revisar la hora, cuando solo quería pasar el rato con el.

Se hicieron cercanos, no con tanta confianza, pero dejaron de insultarse.

Empujó de manera juguetona al menor de estatura, Disney desvío su mirada del celular, un tanto confundido, pero de igual forma devolvió el empujón.

Y así siguieron, entre leves carcajadas, pudo olvidar su sufrimiento, por un rato, hasta que las puertas lo alcanzaron.

Fin capitulo.

Voten si les gustó el capitulo.

850 palabras

𝐀𝐂𝐂𝐈𝐃𝐄𝐍𝐓𝐄 | Universal x Pixar |Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang