Amor Vincint Omnia - Dramione [Traducción]

7. Style

5 de septiembre, 5to año

Draco estaba seguro de que la ira que había estado saliendo de Hermione hoy era tan fuerte que todo el castillo podía sentirla, no sólo él.

Había tratado de llevarla al armario de las escobas en el tercer piso después de Transformaciones para hablar sobre lo que sea que la molestaba, pero ella obstinadamente había pasado junto a él, sacudiendo la cabeza con furia en sus ojos. Draco se había devanado los sesos, tratando de descubrir si era él con quien estaba enojada, pero habían estado juntos en la Sala de los Menesteres la noche anterior, y ella parecía perfectamente bien entonces...

No estaban destinados a verse esa noche, pero cuando la vio al otro lado del Gran Comedor durante la cena, mirando su plato como si quisiera prenderle fuego, no pudo soportarlo más. Sacó su diario y garabateó:

¿Nos vemos esta noche a las 8? Te amo.

Intentó ocultar la forma en que la miraba, esperando su respuesta. Pasaron unos momentos antes de que notara el tenue brillo que salía de su bolso, la indicación de que había un mensaje sin leer en su diario correspondiente. Lo cogió y leyó rápidamente. Sus ojos se suavizaron inmediatamente y los levantó para fijarlos en los de Draco. Ella sonrió levemente y asintió, antes de volver inmediatamente a centrar su atención en su plato.

A las 8 en punto, la puerta de la habitación se abrió de golpe y Hermione entró corriendo, sin apenas mirar a Draco mientras arrojaba su bolso e inmediatamente comenzaba a caminar frente a la chimenea, pasándose las manos por el cabello.

"Increíble. Es increíble. Inaceptable. ¡¿Cómo, cómo está pasando esto?! ¡¿Que voy a hacer?!"

Draco se puso de pie lentamente, acercándose a ella con temor.

"Hermione, amor, ¿qué pasa? ¿Soy yo? ¿He hecho algo?" Su voz era tranquila y llena de preocupación.

Ella debió haber sentido su miedo, porque dejó de caminar de inmediato y giró la cabeza hacia él, con el rostro en shock.

"¿Qué? ¡No! No, Draco. Merlín, ¿pensaste eso?" Ella suspiró y caminó hacia él, colocando sus manos en sus mejillas antes de deslizarlas por su cabello. "Dioses, lo siento, Draco. Nunca quise hacerlo... ¡Estoy tan enojada!"

Colocó una mano en su cadera y sus dedos se movieron en círculos tranquilizadores, mientras que con la otra mano se dirigió a su cabello, masajeando ligeramente su cuero cabelludo.

"¿Por qué estás enojada?"

Ella gimió. "Ella está torturando a Harry, Draco. Tortura literal y real".

Draco giró la cabeza confundido. "¿Qué? ¿Quién lo está torturando?"

"¡Umbridge!" Hermione se soltó de su abrazo y comenzó a caminar de nuevo.

"¿Esas detenciones que ella le dio? Ella le hizo escribir líneas con una pluma encantada". Sus ojos eran feroces, su boca apretada en una línea apretada.

"Bueno..."

"Está encantado para usar la sangre del escritor como tinta. Cada línea que escribes, talla una copia directamente en tu piel. Ella lo obligó a hacerlo durante horas, Draco. ¡Horas! ¡Está loca! Esto es... no puedo... ¿Qué hacemos...?"

Los ojos de Draco se habían abierto como platos. "Salazar... había escuchado un rumor de que sus detenciones eran horribles, pero no tenía idea... Dioses. Es..." Se tragó su disgusto. "¿Potter está bien?"

Hermione se rió sin humor. "Él se niega a ir con Dumbledore. Se niega a decírselo a McGonagall. Al paso que va, tendrá marcado permanentemente en su mano "No debo decir mentiras"..."