Prólogo

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– CARTA ABIERTA –

Lo que tienes en tus manos es parte de mi vida, en la cual vas a encontrar respuestas a muchas cosas que habían estado sucediendo. Ahora ya no es solo mi historia, es parte de la tuya también.

Lamento mucho haber sido tan indiferente contigo, mi objetivo era que no sospeches quién era ese sujeto que te mandaba detalles. Créeme que en ningún momento tuve otra intención más que hacerte bien y provocar en tu rostro esa sonrisa que me atrapó desde la primera vez que te vi. Han pasado muchas cosas más desde aquella vez, pero me temo que ya se ha extendido mucho este relato.

Te confieso que me gustaría cambiar algunas cosas que hice mal. Sin embargo, la historia es así, no se puede cambiar. Es por eso que decidí escribirte a detalle cómo sucedieron las cosas, talvez así puedas entender los motivos que me conllevaron a actuar muchas veces de la manera más fatua e incoherente.

En el tiempo que llevo estudiando en la academia he conocido a amigos con los cuales he compartido mis sentimientos y también saben de ti. Me refiero a Andrea, José, Ana y Rodrigo; ellos saben de lo que venía haciendo y ahora son como una pequeña familia para mi dentro de la academia. Por ese motivo quizá escuchaste alguna vez tu nombre en nuestras conversaciones y espero sepas disculparles si llegaron a incomodarte cuando lo hacían.

Ahora quedan recuerdos de las muchas hojas de cuaderno que fueron testigo de tantas noches en desvelo, noches que ahora son recompensadas al apreciar el producto final, y los lugares como la academia, la Plaza de Armas y mi departamento, en los cuales acostumbraba a redactar. Escribir sobre estas hojas me ha hecho meditar mucho, he podido percibir como los conceptos que ayer tenía se desbarataban ante estas vivencias. Hoy, continúo aprendiendo. Me despido con cierta nostalgia porque fuiste el más tierno descubrimiento de mi vida. No te voy a negar el hecho que una lágrima se desliza por mi mejilla izquierda mientras escribo estas líneas finales porque me es difícil despedir de ti aún si lo hago sobre estas hojas.

Es mi deseo que cada día mejores más en todo ámbito de tu vida, especialmente en lo que respecta a tus estudios para que así puedas ingresar a la Universidad y alcanzar las metas que has trazado en tu vida. No soy la persona indicada para ponerle fin a esta historia, pues cuando termines de leer esto la vida seguirá su curso. No sabemos que acontecerá después. Solo espero vivir en tu recuerdo.

Rompecabezas de un amor adolescenteWhere stories live. Discover now