🚬 ENTRE DOS ALFAS 🚬 ~YM~ ||Omegaverse||

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- Por favor... Déjeme ir. Yo... Estaré bien - Rogó la chica, al borde de la desesperación y reteniendo su llanto.

- No, por favor. Ven aquí, no te vayas - Min la volteó y la acercó a su pecho, pero Heize volteó la mirada hacía otro lado.

Ella gruño bajito al sentir los dolores más evidentes, su camisa comenzaba a mancharse de sangre y Agust no le gustó lo que vió. Así que sin preguntar o pedir permiso, le quitó la camisa a la chica, y está se asustó al ver lo que hacía.

Min acercó su rostro hasta la marca y comenzó a lamerla, con cuidado, evitando que el sangrado siguiera, la apretó a su cuerpo y dejaba leves caricias en su fina cintura, mientras seguía sellando la marca. Cuándo terminó, solo la abrazo fuertemente a su pecho.

- Perdóname linda - Pidió - No pensé correctamente lo que hacía. Se que tú... Quizá no querías esto, que siempre te he tratado mal, siempre te he alejado, pero... Cuándo te marque, en ese instante lo quería y aún en este momento, no me arrepiento de ello, solo de... No haberte preguntado antes.

Heize no pudo formular palabra alguna, solo se lanzó al llanto, pues quería creer en las palabras de Agust, él sonaba tan sincero. Pero muchas veces la trato mal y solo como un objeto sexual, ¿Cómo creerle cuando hasta ella duda de su propia existencia?

Min la cargo y la llevó de nuevo a la habitación. La recostó en la cama y la despojo de toda su ropa nuevamente, él se quitó la bata y se metió bajo las sábanas junto a la chica. La atrajo a su cuerpo y la abrazo protectoramente.

Pensó en Jimin... Para luego sonreír al no sentir esa necesidad de estar cerca de él. De comenzar aceptar que aquel lindo Omega es de su hermano gemelo y que aquella linda chica que tiene entre sus brazos. Es la que la madre luna escogió para él.

- Estaré para tí siempre linda. Perdón por fallarte, por tratarte mal antes, no me daba cuenta de lo valiosa que eres y aunque se que todo esto es precipitado... Quiero que sepas que juntos podemos intentar llevar una relación, reforzarla y hacerla funcionar.

Pero Min había olvidado, que el siguiente día al anochecer debía partir junto a Jimin hacía otro lugar.

- ¿Cómo... P-uedo creerte si... Siempre me trataste mal? - Pregunto la chica con miedo.

Era entendible su sentir. Cómo ya se mencionó antes, aunque ella al inicio quería estar siempre cerca de Min aún si este solo la quería para calmar sus calenturas, eso cambió cuando pensó en que debía valorarse más a sí misma.

- Solo cree en las palabras que tú Alfa te dice mi bella Alfita - Min dejó un beso sobre la frente de Heize y después bajo hasta los labios de esta.

La chica se dejó llevar una vez más, las caricias y besos dieron inicio, para hacer el amor por segunda vez y que Min pudiera reforzar esa marca, limpiarla como era debido y hacer sentir bien no solo a su ahora pareja, sino que al lobo de esta también.

Quizá todo era precipitado, quizá era más que obvio que un amor no puede nacer de la noche a la mañana. Pero en un mundo donde existe los Alfas, betas, Omegas, deltas... Es posible eso y más.

La mañana llegó y Heize estaba profunda entre los brazos de Agust. El Alfa la admiraba y pensaba, ¿Por qué no se dió cuenta antes de lo linda que es la chica?, ¿Cómo no pudo enamorarse de ella mucho antes?

Sonrió y dejó un beso en la frente de la chica, se levantó, tomo una rápida ducha, se puso únicamente unos pantalones de chandal, sin boxer debajo y salió, dispuesto a preparar el desayuno.

Muy sonriente y más feliz que antes. Comenzó a preparar un desayuno para ambos. Hasta que su escandaloso teléfono comenzó a sonar, gruño bajo y rodó los ojos al ver el remitente. Pero aún así, atendió la llamada.