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Encontrar a Red Hood fue sencillo. Había memorizado el archivo que Hood compartió, incluidos los lugares que el justiciero quería visitar. Además, su firma de chakra era bastante distintiva. Obito se pregunta si los héroes tienen una forma de ocultar su chakra, si siquiera son conscientes de ello, y qué tan fácil es rastrearlos gracias a ello. Hasta el momento no se ha encontrado con nadie que haya interactuado con él. Por otra parte, si no hay nadie que pueda sentir el chakra, ¿por qué ocultarlo? Pero seguro que hay alguien que al menos es consciente de ello. ¿Quizás el chakra se conoce como algo más en este mundo?

A pesar de saber la ubicación de Hood, Obito mantuvo la distancia. Si no fuera necesario, no interferiría.

La sección de Metropolis de la red de traficantes fue la que se ocupó principalmente, por lo que no fue una sorpresa que Hood abandonara la ciudad lo antes posible en un coche discreto.

Sospechaban que la base de operaciones estaba en Nueva York, por lo que Obito asumió que allí se dirigía. No estaba muy lejos de Metrópolis; Obito podría fácilmente subirse a un tren y llegar a su destino sólo un par de horas más tarde.

Dios mío, ¿estaba equivocado?

El transporte público no era algo que le gustara. Las estaciones de tren eran terriblemente ruidosas y estaban abarrotadas, y los trenes eran glorificadas trampas mortales, repletas de demasiada gente. Su shinobi interior estuvo nervioso durante todo el viaje. Sus nervios estaban tan tensos cuando llegó a Nueva York que dejó caer su Henge y frunció el ceño a cualquiera que se atreviera a acercarse demasiado a su espacio personal. Sus cicatrices combinadas con su mirada amenazadora hicieron un buen trabajo ahuyentando a los transeúntes, sin que nadie se atreviera a chocar con él.

Al menos, ahora que conocía la ubicación de Nueva York y tenía una idea clara de ella en mente, podría usar Kamui para viajar la próxima vez.

Alejándose más de las vías del tren, Obito ve una tienda de souvenirs y desliza un mapa. Eran demasiado caros de todos modos . Fuera de la estación, abre el mapa y lo copia con su Sharingan.

Decide rápidamente su primer destino: Central Park. Necesita un lugar tranquilo para pensar después de esta terrible experiencia.

Una vez que trepó al árbol más alto que pudo encontrar, parte de la tensión abandona sus hombros. Respirando profundamente, puede pensar de nuevo.

Red Hood no participaría en ninguna pelea durante los siguientes días ( esperaba que no lo hiciera ), demasiado preocupado haciendo reconocimiento. Entonces Obito tiene algo de tiempo para conocer la ciudad. Aunque tendrá que tener cuidado. Nueva York está plagada de héroes. Usar algo de su ropa shinobi más resistente probablemente sea una buena idea. Por si algo sale mal. Además, si continúa siguiendo a Red Hood, es sólo cuestión de tiempo hasta que se vea atrapado en una pelea. Es mejor estar preparado.

También debería encontrar un lugar más cómodo que Kamui para dormir. Quizás realice algunas misiones rápidas. También es necesario reorganizar su arsenal de armas en Kamui.

Decisiones decisiones…