Emití un leve gruñido mientras me removí entre las sábanas, no fue hasta que abrí los ojos que me levanté de golpe.
Dónde cojones estaba? Revisé toda la habitación con la mirada y la decoración me sonaba familiar, pero el creciente dolor de cabeza no me dejaba pensar con claridad.
-Estás despierta-Gavi apareció por la puerta.
Le miré de arriba a abajo, Ilevaba unos pantalones de chándal y una camiseta del Barça..espera, ya lo recordaba. Esto era casa del sevillano.
Pero ahora bien, Qué narices hacía yo en casa de Gavi? No me digas que...?
-Emma estaba empezando a preocuparse, pensó que te había dado un coma etílico-El Sevillano sonrió mirándome.
-Pablo...Qué pasó anoche?-Me acerqué un poco a él.
-Bueno, después de que hablaras con Pedri las copas te fueron pasando rápidas, de lo demás tendrás que ir acordándote-Asentíno muy convencida y el sevillano salió
de la habitación dejando la puerta abierta-Vienes?-
No dije nada y simplemente caminé por el pasillo siguiéndole hasta el salón, nada más entrar todas las vistas se fijaron en nosotros.
En el sillón Emma estaba con un vaso de agua para tomarse una pastilla. A su lado Eric que me miraba sonriente, creo que Gavi nos presentó ayer. Por otro lado Pedri estaba sentado en una silla algo más alejado, tenía un pequeño moratón en la cara y parecía mirarme con cierto odio o enfado, la verdad es que no sabría describirlo al cien por cien.
Caminé en silencio y me senté al lado de Emma, tomé el paquete de pastillas y saqué un Paracetamol para después arrebatarle el vaso de la mano a la Polaca y tragarme la pastilla sin pensarlo. Dejé
el vaso en la mesa y me eché hacia atrás apoyando la espalda en sillón.
-Y..Cómo acabamos aquí?-Pregunté al aire.
-Bueno a lo mejor necesitabas un sitio para follart..-Pedri fue interrumpido por una colleja de Gavi.
Miré a los dos amigos extrañada y después a Emma que estaba igual que yo.
-Vale... Pablo?-La Polaca habló para que el sevillano nos lo explicara.
-Yo era el único que no iba borracho y no me apetecía llevaros a cada uno a vuestras casas así que os traje aquí a todos-Se encogió de hombros-Os podéis ir cuando queráis.
Todos le miramos y asentimos connvencidos.
[...]
-Ya lo hago yo-Hablé quitándole a Gavi el plato de la mano, cogí el resto y caminé hacia la cocina.
Gavi nos había invitado a desayunar y el Canario se había pasado todo el rato asesinándome con la mirada, estaba harta.
Ahora mismo se encontraba en la cocina e iba a hablar con él.
Entré a la cocina y dejé los platos en la encimera, Pedri estaba de espaldas y aún no me había visto.
-Gavi yo me largo, paso de estar aquí-Habló sin girarse.
-Pasas de estar conmigo-Me crucé de brazos.
Pedri se giró examinándome con la mirada.
Negó con la cabeza varias veces y se acercó a la puerta con intención de irse, por suerte le conseguí parar.
-Se puede saber qué te pasa?-Agarré su muñeca obligándole a mirarme.
-Luna no quiero discutir..-Habló entre dientes.
-Por qué íbamos a discutir?-Pregunté.
-Luna de verdad que ya, vale-Pidió.
-Ni si quiera puedes responderme?-Hablé.
