Parte 8

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Ya estábamos llegando al Autódromo, la emoción y la sorpresa de estar en Brasil para el Gran Premio de Fórmula 1 era abrumadora.

Mientras admiraba el paisaje, sentí una respiración en mi cuello que me hizo estremecer. De repente, un beso en el cuello me sacudió por completo, y al voltearme descubrí que era Charles.

- ¿Qué estás haciendo? - le pregunté con sorpresa.

- Nada, solo disfrutando la vista, mon amour - contestó Charles con una sonrisa pícara.

Antes de que pudiera decir algo más, la puerta se abrió a mi lado.

- ¿Lista? - me preguntó Lewis, ofreciéndome su mano para ayudarme a bajar del coche.

Asentí con la cabeza, demasiado nerviosa para articular palabras en ese momento.

Diez minutos después, todos se habían ido menos Charles, Lewis y Checo, quienes me estaban dando un tour privado por el Paddock.

- Gabi, este es mi Motorhome, por si te aburres de Hamilton - bromeó Checo antes de alejarse.

- Ay, los mexicanos son raros - comentó Lewis.

- Perdón, ¿olvidaste que estás con una mexicana? - respondí divertida mientras Lewis se apresuraba hacia su Motorhome.

Quedábamos solo Leclerc y yo.

- Pilotito - lo llamé.

- ¿Qué pasa, Mon Amour? - me preguntó.

Decidí ir directo al grano y le pregunté: "¿Por qué me besaste el cuello?"

- Solo estaba reclamando lo que es mío - respondió Charles.

- Quién dijo que era tuyo, Leclerc - repliqué, siguiendo el camino por el que se había ido Hamilton, dejándolo con la palabra en la boca.

Gabriella 2 - Charles 0

* Narra Charles *

- ¡Maldición! - exclamé al ver a Gabriella marcharse.

Después de mi encuentro con Gabriella en el Paddock, me sentía confundido y en cierto modo, emocionado. La energía que transmitía esa chica tan espontánea y segura de sí misma me había dejado pensando en la razón detrás de mi impulsivo gesto de besarle el cuello.
Mientras me adentraba en mi Motorhome, mi mente seguía divagando en torno a Gabriella. Era una sensación extraña y novedosa para mí, quien solía mantenerme concentrado exclusivamente en mi carrera y en ser el mejor piloto posible. Pero algo en ella me provocaba curiosidad, un deseo de conocer más sobre esa chispeante mexicana que había irrumpido en mi vida de manera tan inesperada.
Al entrar, me encontré con Carlos Sainz, mi compañero de equipo, inmerso en una charla técnica con nuestros ingenieros. Al ver mi expresión distraída, Carlos se acercó y me preguntó si estaba bien. Al notar mi desconcierto, Carlos se acercó y me preguntó si estaba bien.

- Sí, solo un poco nervioso por el fin de semana - le mentí, ocultando la verdadera razón de mi turbación. ¿Por qué había besado el cuello de una chica que acababa de conocer?

"¿Por qué le besaste el cuello?" Esta pregunta retumbaba en mi mente, mientras debatía internamente si ese gesto revelaba algún sentimiento más profundo hacia Gabriella.

~"La besaste porque te gusta"~, murmuró mi conciencia. ¿Me gustaba ella? Era una incógnita que aún debía resolver. Traté de disimular mi desconcierto, mencionando que solo me sentía algo nervioso por el fin de semana de carreras que se avecinaba.

Esa voz en mi cabeza susurraba que tal vez lo había hecho porque, de alguna manera, me gustaba Gabriella. La idea de sentir algo más que una simple atracción física por ella me resultaba inquietante pero al mismo tiempo emocionante. ¿Estaba dispuesto a abrirme a nuevas emociones, a explorar territorios desconocidos y a permitirme ser vulnerable frente a alguien como Gabriella?
La incertidumbre y la expectación me invadían mientras reflexionaba en silencio, anhelando descifrar el enigma que representaba Gabriella en mi vida. Quizás, en medio de la vorágine de la Fórmula 1 y la competencia feroz, había encontrado un oasis de frescura y autenticidad en ella.

Decidí que no dejaría que mis dudas y temores me detuvieran. Enfrentaría la situación con valentía y determinación, dispuesto a descubrir qué deparaba el destino en mi encuentro con Gabriella en el Gran Premio de Brasil. Porque a veces, las sorpresas más inesperadas resultan ser las más memorables y transformadoras.

La Protegida de los Pilotos --☞Charles Leclerc☜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora