El Harem De La Villana

Capitulo 4.

—Hola bienvenidos al ducado Evans, está es mi hija Lucia pero veo que ya se conocen —dijo con tranquilidad Vanessa

—claro duquesa Evans, venimos mi hermano y yo para pedir matrimonio a la señorita Lucia, sabemos que es algo inadecuado y debería venir nuestra madre a proponer el matrimonio, pero se encuentra de viaje en otro reino —hablo Lucas el mayor de los hermanos White.

—Además su hija nos quitó la virginidad por lo que debería hacerse responsable de sus acciones —hablo con desvergüenza Sebastián mientras se acariciaba un mechon de su cabello blanco.

Al escuchar lo que dijo las mejillas de Lucia se colorearon de rojo carmesi, ¿Que le pasaba a ese tipo? ¿Era realmente necesario hablar de eso? Pero sobre todo; ella a pesar de su edad avanzada en su otra vida, ella nunca había tenido relaciones sexuales.

Lucia había tenido algunos novios en su vida anterior pero jamás había pasado de besos y abrazos, así que escuchar lo honesto y claro  que sucedió en realidad la ponía algo incómoda.

Ella había muerto virgen en su vida anterior y al ver que aquí en este mundo hablaban sin vergüenza sobre las relaciones íntimas, realmente quiso enterrar su cabeza en un hoyo.

—Entiendo, entiendo, pero no deberían hablar primero con su familia, en lugar de venir a preguntar por mi hija día tras día? —pregunto levantando una ceja la madre de Lucia

—ya lo hablamos con nuestro padre y le contamos todo —hablo desvergonzadamente Lucas

—además también nos dió su aprobación —dijo con una sonrisa Lucas

—eso... —hablo Vanessa perpleja, parecía que no había nada más que discutir  —bien, mi hija está dispuesta a casarse con ustedes.

Lucia que no había hablado desde el comienzo, se quedó observando toda la situación, aunque ella nunca en su vida anterior consideró el matrimonio porque para ella; era solo pedazo de papel inservible, parecía que para otros era una meta a lograr.

Lucia se quedo mirando a los dos chicos que pronto serían sus esposos con emociones encontradas, pero se resignó a su destino, observo las sonrisas en los rostros de los dos chicos y se sintió un poco mejor, al menos sus dos futuros esposos eran personas agradables, aunque eran un poco desvergonzados parecían buenas personas.

—Entonces está decidido, ¡Nos casaremos en un mes! —exclamo Sebastián, dejando a la madre e hija sorprendidas y con la boca abierta.

—¡¿Espera que?! —pregunto Lucia asustada

—Un mes es poco tiempo, ¿no pueden esperar un poco más ? —pregunto Vanessa

—En un mes hay un día propicio para la boda, pero sobre todo no podemos ir por ahí sin nuestra marca de pureza , todos sabrán que ya no somos puros y nos despreciaran —dijo con preocupación Sebastián

—ademas está el riesgo de que estemos embarazados, no usamos protección esa noche y el riesgo de embarazo es muy alto —replico Lucas a la pregunta de Vanessa

Lucia quedó en Shock , solo ahora recordó que en el mundo de la novela, los que quedaban con el embarazo eran los hombres y no las mujeres, lo había olvidado ya que su memoria no era muy buena cuando algo no le importaba mucho.

Lo había olvidado porque cuando estaba leyendo la novela, la historia estaba tan interesante que no le importo si el que concebía era hombre o mujer por lo que le resto importancia y cuando por fin logro recordar fue por qué Lucas lo mencionó.

Ahora parecía que el mundo estaba patas arriba con la confesión de Lucas, tal parece que existe la posibilidad de que sea madre a una edad temprana

Mientras Lucía se perdió en sus pensamientos, Vanessa su madre también quedó en shock, y regaño a su hija mentalmente por ser una tonta y no usar protección en algo tan importante, pero ¿Que se le va a hacer? Ahora existía la posibilidad de ser abuela  y su hija ni siquiera había asistido a la instituto de magia Dorado .

—No perdamos más el tiempo, se casarán en una semana, yo haré los trámites y las preparaciones —hablo agitada Vanessa, ¡No podía permitir que sus futuros nietos caigan en la desgracia de haber Sido concebidos fuera del matrimonio!

Aunque claro sus futuros nietos era incierto el momento cuando los tendría.

—¡Madre! —exclamo Lucia con impotencia, ella había creído que casarse en un mes ya era demasiado pronto, pero ahora que escuchaba a su madre decir que se casaría en una semana, hizo que casi le diera un paro cardíaco.

¿Cómo se supone que iba a seguir con su vida si se casaba tan pronto? ¡Ella ni siquiera tenía 16 años! Hizo que le diera ganas de desmayarse de la conmoción que estaba sintiendo.

—Nos parece bien, para ese entonces nuestra madre ya habrá llegado de su viaje —sonrió Sebastián seductoramente.

—entonces está arreglado, haré los trámites —sonrió satisfecha Vanessa, mientras se imaginaba cuidando de sus futuros nietos