Capítulo 17

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– Entonces, ¿qué estás haciendo aquí exactamente? – Jazmine preguntó: – Yancy está muerto y Raleigh ya no me habla.

"¿Quizás porque le pegaste con un secador de pelo?" Pensó Gipsy.

– Bueno, es solo que … Raleigh parece un poco deprimido últimamente, ya que Yancy murió … pensé que tal vez si tuviera otro miembro de la familia con quien hablar … – empezó Gipsy a tantear el terreno.

– Así que supongo que sabes que mamá y papá también están muertos.

– Bueno, sí.

Jazmine negó con la cabeza.

– Parece que sabes mucho sobre mi familia … pero yo no sé nada sobre ti –, dijo la mujer, – ¿Cuál es tu nombre completo?

– Yo … creo que sería mejor que no lo supieras –, admitió Gipsy.

– No es justo.

– Te asustarías.

– Inténtalo.

Gipsy negó con la cabeza vigorosamente.

Jazmine frunció el ceño … se parecía a Raleigh frunciendo el ceño, Gipsy lo notó … y suspiró.

– Bien … pero en algún momento me lo tendrás que decir.

– No te lo pasaría por alto –, afirmó Gipsy, – Ni Yancy ni Raleigh tampoco lo harían.

La Jaeger se frotó los brazos, tratando de calentarse. El frío era un sentimiento nuevo para ella. Nunca había tenido frío antes … bueno, frío y humedad.

Ella no era muy fan de eso.

Jazmine notó que Gipsy estaba incómoda. Se levantó de la mesa y caminó hacia la cocina, regresando de ella con una cafetera y dos tazas.

– ¿Quieres un café? – ella preguntó.

Gipsy ladeó la cabeza.

– Huele bien –, comenzó, – Pero nunca lo he tomado … aunque he visto a Raleigh y Mako tomarlo.

– Siempre hay una primera vez –, sonrió Jazmine.

Gipsy soltó una suave carcajada.

– Sí, supongo –, respondió mientras Jazmine vertía el líquido oscuro en la taza.

Observó cómo los delgados zarcillos de humo se arremolinaban delicadamente en la taza, y Gipsy la envolvió con las manos, sintiendo el calor irradiando en sus palmas.

– Solo ten cuidado, está caliente –, advirtió Jazmine.

Gipsy sonrió mientras se llevaba la taza a los labios. Jazmine era agradable, le caía muy bien. Se preguntaba por qué Raleigh y Yancy se pelearon con ella.

Bebió un sorbo de café e inmediatamente comenzó a ahogarse.

– ¡Puaj! – se estremeció, dejando la taza en la mesa, – Es amargo.

– Es un sabor peculiar –, Jazmine se encogió de hombros, tomando un sorbo de su propia taza, – Con el tiempo te acostumbrarás.

''Quizás antes de lo que piensas", pensó Gipsy para sí misma, "Viendo que a mis dos pilotos les gusta".

¿Pero a Yancy le gustaba?

Gipsy notó que el piloto mayor nunca tomaba del líquido oscuro, sino que optava por otra cosa.

Y ninguno de sus pilotos le decía qué era.

¿Tal vez ella lo probaría en un futuro?

– Entonces … ¿qué esperas que haga? – preguntó Jazmine.

Pacifc Rim: A new chanceOù les histoires vivent. Découvrez maintenant