Chapter 5

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—Es bellísimo —fue lo único que pudo pronunciar

Su boca aún estaba medio abierta, la impresión fue inevitable de mostrar, nunca le había sucedido algo parecido.
Intentó explicarle a su hermano como es que se había sentido pero las palabras no salían de su boca. Anonadada comenzó a aplaudir, de igual manera la obra maestra que había escuchado y observado no era para menos.

...

Sintió que estaba en un tipo de sueño lúcido, tenía la sensación de que era irreal, sus sentidos se agudizaron y hasta pudo percibir algunos detalles de su rostro: la suavidad de sus mejillas, sus pestañas largas y rizadas, la curvatura de sus labios que en ese momento venían vestidos de carmín.
Seguía insistiendo en que si aún fuera humano, su corazón estaría latiendo rapidísimo, lo raro es que en su pecho sentía eso que ya no tenía.

La obra había terminado y el público estaba levantándose para salir del lugar, al igual que los cantantes y músicos se preparaban para irse. Después de este triunfo todos sentían un gran éxtasis. Todos tenían expresiones alegres y de alivio en sus rostros. Había sido una de las mejores presentaciones en las que habían estado por ambas partes.

Derek avisó a su hermana que iría a felicitar a un amigo que había estado presente tocando el violín y que lo esperara. Maryam asintió gustosa pero el hecho de quedarse sola le incomodaba, se veía espectacular y sentía que todos la miraban, era obvio. Pero ella no lo ve de la misma manera, siente que los ojos que se posan en ella es porque le están juzgando el alma. A veces si necesitaba que alguien le acompañase en momentos como ese.
Intentó distraerse un poco observando a la gente pasar. De la nada un flashazo de la cara de aquel hombre que había visto se hizo presente en su mente. El como parecía que sus ojos inusuales color miel intenso acariciaban sus rosadas mejillas. El cómo su cabello rubio le sentaba tan bien y más aún peinado hacia atrás, el traje que portaba lo hacía lucir mas varonil.
No es como si lo hubiese visto antes, más bien, ya lo había imaginado con cualquier atuendo, con cualquier peinado y concluyó que se veía perfecto con cualquier cosa.
Después de unos minutos parada, los tacones comenzaban a cansarle, no estaba acostumbrada a andar con ese tipo de tacón tan delgado y alto aunque realzaba completamente su figura esbelta. Los vellos de su cuerpo comenzaban a erizarse porque la temperatura comenzaba a bajar.

Derek seguía en su plática y Maryam comenzaba a desesperarse, estaba cansada y tenía frío, por lo tanto decidió ir en busca de su hermano para generar presión. Se adentró a un pasillo que estaba iluminado cálidamente y con dolor en los talones comenzó a caminar como si de un gato espinado se tratase. Intentando disimular que los zapatos le estaban matando, se detuvo unos segundos y se recargó en la pared.

Salió del camerino y lo último que quería era llegar a casa, irónicamente se sentía cansado y a la ves extasiado. Aun sentía que sus ojos acariciaban sus pálidas mejillas y su marcado mentón. Juraba que en ese instante vivo se sentía y simplemente sonrió a tal acto. Verla detalladamente con tremenda obra de arte de fondo fue el complemento perfecto para el, la imagen de verla tan sorprendida, emocionada y ruborizada hizo que sus sentidos se intensificaran, los finos rasgos de su cara indicaban que era extranjera; su nariz delgada, chiquita y ligeramente respingada le hacía juego perfecto con todo su rostro. Sus labios vestidos de un rojo que le recodaba a su comida lo invitaron a verlos con más detenimiento... el marco de su cara. Un suspiro salió de él al mismo tiempo que su característica sonrisa de lado aparecía en su cara. Parecía un ángel.
Al momento de seguir caminando entre pasillos largos y oscuros, un aroma se le hizo familiar. Sí, era ella.
Se habían topado, ninguno de los dos sabía si era una casualidad o el destino pero al instante se conectaron y se percataron de la presencia de uno del otro, se miraron un par de segundos y una diminuta sonrisa se formó en Jasper. ¡Estaba nervioso!
De igual forma, Maryam sonrió ligeramente. No sabía que hacer o qué decir.

Conquest of Paradise || Jasper HaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora