Capítulo 8

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PIE DE LIMÓN

ya era viernes, hacía dos días había ido a casa de Theo a conversar.

Lydia parecía más pendiente de mí desde entonces.

nos mensajeamos seguido, bueno en realidad ella enviaba mensajes y yo los leía y respondía con "genial" "bueno" "ok", a ella no parecía molestarle

—dame la harina—le digo a Eli. él la tomó y me la entregó distraído en su celular.

estamos preparando un pie de limón para la tarde. planeamos con Parker y Eli hacer un maratón de películas de misterio.

—¿entonces te cayeron bien?— pregunto. Eli me había estado hablando durante la última media hora de sus nuevas amistades. aunque puntualiza mucho más en la peliroja, Violeta.

—son agradables— dice escribiendo en su teléfono.

—¿con quien mensajeas?— pregunto midiendo la harina.

—con ellas. hicimos un grupo— dice dejando el teléfono en la mesa—hablamos mucho, oye yo... te queria preguntar algo

—te escucho— dije acomodandome las mangas de la camiseta.

—llegó el primo de Violeta ... y hoy querían hacerle una fiesta de bienvenida— dice jugando con su camisa— no es una fiesta como tal, es una reunión... estoy invitado.

—¿Solías preguntar a Derek estas cosas?— pregunto con una sonrisa.

—si

—¿Y si te decía que no ibas de todas formas?— le pregunto. el se sonroja— yo creo que no te pareces a mi

—¿por qué?— pregunta mirando cómo mezclo los ingredientes.

—yo directamente me saltaba la parte de preguntar y simplemente hacía lo que se me ocurría. tu papá tampoco era muy bueno con las reglas

—prefiero que no desconfíes de mi, si me escapo perderás la confianza y no... ¿mi papá no era bueno con las reglas?

—no lo era

—pero siempre me enseño a seguir las reglas.

me río ante la idea de un derek obediente. lo miro y él está con ambas cejas alzadas

—¿hablas en serio?... supongo que era su responsabilidad como padre, pero él no era así de joven...— sonrio ante el recuerdo— no me enorgullezco de las ilegalidades de mi pasado, es decir, soy un detective pero tengo que admitir que las anécdotas son divertidas

—espera. ¿cuantas ilegalidades?

—bastantes, no recuerdo una historia que no tenga algo ilegal

—Entonces papá omitió los detalles.

—los más jugosos, ni siquiera se como pudo cambiar la versión de las historias. cuando lo conocí, a la semana ya estaba en la cárcel.

—¡mi papá estuvo en la cárcel!— pregunta exaltado. me doy cuenta de mi error

el timbre suena.

—Esa es mi alarma para que me calle de una vez— digo limpiandome las manos en el paño de cocina. Voy hacia la puerta.

—Buenas tardes...— digo casi como una pregunta, en realidad no conocía su rostro.

—Buenas, mi nombre es Mabel Momoa soy trabajadora social, me informaron que aquí vive una niña— ella revisa su agenda— Eli Hale, ¿es correcto?

—es un niño. pero si, es correcto— digo tenso

—¿Está por aquí? Me gustaría hablar con él— miro a Eli, él se asoma desde la cocina atento, la mujer se asoma por la puerta y alcanza a ver a Eli—¿me permiten pasar?— me mira, yo no alcanzo a decir nada— gracias— camina hacia la isla de la cocina donde Eli está sentado

Mi Amada Rosa NegraWhere stories live. Discover now