Mi Amada Rosa Negra

Capítulo 1

NO HAY PORQUE ESTAR TRISTE.

*Hace 10 años*

estaba más que decidido, me iría de este pueblo para siempre, cosas sobrenaturales seguirán pasando aquí este yo o no.

y personalmente me siento bastante estancado en este pueblo, quiero crearme una reputación desde cero, gente nueva, vida nueva.

Meto la última maleta en mi nuevo auto, así es, dejaré el Jeep en Beacon Hills, él pertenece más a este pueblo que yo.

cierro la puerta de la maleta del auto y pego un brinco cuando veo al hombre que me ha hecho suspirar durante años. Derek.

—Entonces, en realidad si te vas— dice, no era la primera vez que veía tristeza en sus ojos pero si era la primera vez que era yo el causante.

se sentía bien tener ese efecto en el pero me gustaría provocar otras emociones en un corazón tan duro como el de derek

—claro, te lo dije

—no pensé que lo dijeras en serio

—lo decía muy en serio

—no me culpes, casi nunca dices la verdad

—o quizá esta vez esperabas que fuera mentira— digo sin mirarlo

—¿Qué hará Scott sin ti?

—Scott también se irá... estará bien. lo criamos bien

—¿Y el beta? Liam

—él estará bien— me quito la camisa de cuadros, hace calor— igual Lydia, somos como una banda— rio nervioso— nos separamos por nuestro bien.

un silencio nos atravesó

Claro que estarán bien, Lydia está comenzando una vida con el sabueso infernal, parrish.

Liam encontró el amor con Theo, al principio no lo aprobé pero pronto me di cuenta de que en realidad el 50% de mi rechazo era porque sentía envidia, oh cuanta envidia. Liam había encontrado a un amargado y ambos habían correspondido a los sentimientos del otro.

eso era justo lo que yo quería con cierto amargado

—¿Cómo está tu hijo?— pregunto ahora mirándolo a los ojos

él desvió la mirada, hace cinco años Eli había llegado a la vida de Derek, a él lo había tomado por sorpresa.

—es complicado aún vivir con un niño— eso podía verlo en las ojeras bajo sus ojos, pero también lo veía más radiante con la presencia del niño.

Eli era justo el rayo de sol que este hombre de oscuridad necesitaba

—podrá hacerlo

—¿el?

—imagino que no será fácil vivir con un necio como tú— bromeo

—mucha suerte, stilinski— divertido pone su mano en mi hombro

vamos derek... dime que me amas, dime que sientes las mismas ganas de besarme que yo siento de besarte. dime algo.

—atrapa tantos psicópatas como tu gran mente pueda— y eso fue todo.

—esto es propiedad privada— digo con una sonrisa, recordando lo primero que el me dijo hace años— deberías irte

—eso haré— miro mi nuevo auto y se fue sin mediar palabra.