★彡 ☠『 Dᴇsᴇᴏs ᴅᴇ sᴀɴɢʀᴇ 』☠ 彡 ~★James March y tu★~

Capitulo 5

POV'S NARRADORA :

El chófer y la joven avanzaban a toda velocidad hacia Los Ángeles. La lluvia y el viento eran cada vez más fuertes, y la joven notaba que sus nervios empezaban a volverse incontrolables. El chófer conducía hacia el Hotel Cortez, donde podría encontrar el refugio que necesitaba, pero la tormenta se interponía en su camino.

Mientras el coche se acercaba al Hotel Cortez, ___ podía ver cómo la tormenta hacía añicos los árboles y las farolas, y podía ver el brillo de la electricidad en el cielo. Una ola de emoción y miedo le recorría el cuerpo, y el chófer intentaba tranquilizarla.

—No te preocupes, casi hemos llegado -decía-

Entonces, la luz del coche se enfocó en el Hotel Cortez. Era grande y victoriano, y la lluvia golpeaba su tejado, con la misma fuerza que golpeaba el coche. El chófer bajó la velocidad, y las ruedas del coche hicieron un ruido sordo y retumbante al pasar por el camino de entrada.

Mientras el chófer aparcaba, ____ se asomó por la ventana y miró fijamente hacia el edificio. Algo le hizo sentirse inquieta, como si el hotel la estuviera mirando de vuelta. El chófer abrió la puerta, y la joven salió del coche con mucho cuidado, consciente de que la tormenta todavía podía arrojar un rayo en cualquier momento.

La noche de la tormenta era helada, pero ____ estaba lista. Llevaba un vestido elegante que la había costado mucho dinero, y que estaba diseñado para resultar impresionante y cautivar a quienquiera que la viera. Sus tacones altos, su pelo ondulado y su maquillaje parecían resistir la tormenta con la misma fuerza con la que había luchado con sus propios miedos.

La puerta del hotel se abrió, y una vez allí, ____ se sintió más segura. El chófer cerró la puerta, y el vestíbulo estaba casi vacío. Por un momento, todo estaba en silencio. El reloj del vestíbulo marcaba las 09:30 pm.

Mientras miraba hacia la recepción, una figura de pie salió de las sombras. Era Liz, sus ojos observaron a ____ de arriba abajo, mirando su vestido, sus zapatos y su peinado.  Liz soltó una risita forzada, una risa que no tenía sonido ni humor.

—¿Segura que quiere hacer una reserva? -dijo en un tono que sonaba a desprecio. Su rostro era inexpresivo, y su vestimenta era ligeramente parecida a la de una monja. Sus ojos, por el contrario, eran como quemadores de carbón que se aproximaban a ____ y la calcinaban-

_____ sabía que Liz intentaba intimidarla, pero no iba a permitir que le quitara la seguridad que tenía en sí misma.

—Por favor, quiero hacer una reserva -dijo ____. Sus ojos permanecieron fijos en los de Liz, y no desviaron la mirada. No iba a dejar que ella la intimidara. Quería una habitación, y Liz le iba a dar una habitación-

Unos momentos más tarde, Liz parecía un poco inquieta.

—Por favor, sírvase a sentarse -dijo Liz, mostrando una mesa, con unos papeles y un bolígrafo. Sus ojos estaban incómodos, como si no supiera cómo enfrentarse a la decisión de ____ de no apartar la mirada- ¿Podría, por favor, llenar estos papeles? -dijo-

____ se sentó y tomó el bolígrafo, pero no lo tocó sobre el papel.

—¿Me puede decir en qué establecimiento estoy? -preguntó. Su voz sonaba firme y no delataba ninguna impresión. Liz era una testaruda, pero no la intimidaría. Había llegado al Hotel Cortez, y no iba a darse la vuelta sin lo que había venido a hacer-

Liz parecía incómoda, pero trató de ocultar su nerviosismo.

—Por favor, está usted en el Hotel Cortez -dijo Liz, intentando ser lo más amable posible. El tono de su voz se notaba forzado. ____ sonrió al asegurarse de que era el lugar del que su tía Elizabeth le había comentado- La estancia del hotel es de 300 dólares por noche, y... -dijo Liz, y después se quedó en silencio, esperando a que ____ reaccionara. Pero no había reacción.- Esta habitación está a la vuelta de la esquina. A un costado hay un ascensor -dijo Liz- Puedes pasear por el hotel, pero si algún empleado necesita que te dirijas a él, por favor, seguir sus instrucciones. Tenemos muchas normas aquí, y tenemos que respetarlas -continuó Liz, recitando un discurso que le habían enseñado El primer piso está dedicado al restaurante y al bar. Tenemos una variedad de comida, asegúrate de pedir lo que quieras. En la planta superior hay una piscina, y en el sótano hay un spa. Esperamos que disfrutes de tu estancia -dijo Liz. ____ sonrió, agradeció y recogió sus cosas-