Galería

3 2 0
                                    

Desde aquel día no lo volví a ver, me sentía lo suficientemente mal como para volver a verlo. Sé que no había hecho nada malo, pero me sentía mal, no quería saber nada de él, quería olvidarlo.

Habían pasado unos cuantos días desde entonces, trataba de aparecer lo mínimo y necesario, pues, sabía que podía encontrarme con él, y no estaba lista, de seguro lloraría en cuanto lo viera, no podría. Regresé a mi habitación como ya era una rutina, fue entonces cuando...

"Dijiste que querías subirte a un bote, entonces yo..." alguien decía esto en mi mente, era igual que un recuerdo.

"¿Cómo conseguiste esto?" le respondía.

"Soy un Moonacre, podía conseguirlo" me tomaba de la mano "¿qué te parece si damos una vuelta?"

"¿En serio?"

"Si claro, ya estamos aquí, además... habías dicho que te gustaría subirte a uno"

"Es cierto, pero no creí que harías esto" me soltaba de su agarre.

"¿Tienes miedo?" se acercaba más a mí.

"¡Por supuesto que no!" le respondía "Es solo que... y si se hunde, o si pasa algo, es peligroso y..."

Aquella persona me tomaba la mano y decía "Tranquila, no creo que pase nada, y si lo hace yo tomo toda la responsabilidad, cumple mi capricho"

Terminaba de esa forma ese inesperado recuerdo. En cuanto terminó, sentí un escalofrío que recorría toda mi columna vertebral. No sabía como llegó esto a mi mente, nunca lo había vivido, tampoco era algo que ya hubiese visto antes, pero aún así, sentía familiaridad con dicho recuerdo.

"¿Por qué cuentas las estrellas?" decía esto y otro recuerdo aparecía junto con esto.

"No las cuento"

"¿a no?"

"No, en realidad las comparo"

"¿Con qué?"

"Las comparo con el brillo de tus ojos, ¿me pregunto cuál es más brillante?"

"Por supuesto que las estrellas, es absurda tal comparación"

"Para mí no lo es... si sonríes brillarán más que las estrellas" ... Acababa el recuerdo.

De esa manera pasé varios días, en distintas situaciones. No importaba que sucediera, caminaba de regreso a casa y un recuerdo extraño inundaba mi mente otra vez.

"Toma, o te resfriarás" aquella persona me daba su abrigo.

"Está empapado, me refriaré más con eso puesto" respondía.

"No debiste de haber venido con esta lluvia"

"Quería verte, ¿tú no?"

"Claro que quiero, pero si te enfermas no podré verte por un buen tiempo" ... me acomodaba su abrigo "Así que verte ahora no serviría de nada"

"Entonces tu tampoco hubieras venido"

"Amm... creí que no llovería"

"Mentiroso"

Llegué a ver su sonrisa y acabó el recuerdo. Pasaron días y noches en las que iban apareciendo recuerdos, a veces era uno solo, otras eran dos o más lo que se posaban en mi mente igual que una mariposa.

Al cabo de unos días eran tantos los recuerdos que iban y venían a mi cabeza que se iban coleccionando igual que una galería de arte, uno tras otro. Y por si no fuera poco, en eso se fueron convirtiendo.

Mi alma anhelaba plasmarlos sin saber por qué, mis manos se empezaron a mover por su propia cuenta, y lo que en algún momento fue un simple recuerdo que había pasado por mi mente, se había convertido en una pintura.

Comenzó con un recuerdo, luego fueron dos, y así sucesivamente, hasta que rápidamente llené mi habitación con algo más que un par de cuadros.

"Te amo" otro recuerdo salía a relucir.

"Yo también lo hago, pero no tengo una medida exacta para decirte cuanto"

"Lo sé" le sonreía "Ni siquiera estas palabras son suficientes para expresarlo todo"

Se esfumaba de la misma forma en la que llegaba a mi cabeza, y enseguida aparecía uno nuevo...

Solo una imagen, un cálido abrazo, era tan cálido que derramé una lágrima inconscientemente.

"No sabes cuanto te he extrañado"

"Yo también te extrañé" me besaba en la coronilla "Sería una mentira si dijera que no te pensé ni una sola vez"

Terminaba de esfumarse y aparecía otro recuerdo más, un poco más breve o tal vez más largo. A veces, simplemente no volvía a aparecer ningún recuerdo hasta el siguiente día, o en ocasiones eran otro par de días más.

No sabía quien era aquella persona que aparecía siempre en mis recuerdos, pero con solo unos recuerdos ya había hecho todo un lío en mi cabeza, justo de la misma forma en que Hansel hizo desde que llegó a mi vida.

Te Espero en mi Próxima VidaWhere stories live. Discover now