—¿Cómo podes estar tan seguro?—Lionel conocía a Pablo Gavira, era un chico un tanto problemático, pero sinceramente no le encontraba parecido con su amigo.
—Solo lo sé, es él, Lionel yo-yo no sé cómo explicarlo, pero te juro que es él.—Emiliano lo sabía, podía sentirlo, era una sensación que solo sintió una vez, la vez que conoció a Clau, la vez que vio por primera vez sus ojos, los mismos ojos que el joven de la foto tenía.
—Pablo Martin Páez Gavira, su padre adoptivo murió cuando él apenas tenía dos años, creció con Aurora Gavira, su madre y su hermana que también lleva el mismo nombre que la madre.—Robert leía con atención la información que tenía del joven.
—Tenemos que ir a Barcelona, yo voy a hablar con él.
Emiliano se movía de una forma nerviosa, recogiendo los papeles con la información de Pablo Gavira.
—Emi.
—Necesito decirle.
—¡Emiliano!—Lionel pocas veces alzaba la voz, Dibu lo miró sorprendido.
—Pablo es un pibe con temperamento complicado, no es conveniente que te aparezcas de la nada y le digas algo que al final puede no ser verdad.
—Pero yo sé que es él.
—Vamos a ir a Barcelona, vamos a hacer una prueba de ADN, sin esa prueba en tus manos, vos no vas a decir nada.
—Lionel...
—Es lo mejor, el chico ya perdió a un padre, si resulta que no es tu hijo, vas a lastimarlo Emiliano.
Emiliano lo pensó, estaba seguro de que Pablo es su hijo, pero Lionel tiene un buen punto.
—Esta bien.
आप पढ़ रहे हैं
Soy Emiliano...Tu Padre
बेतरतीबCon solo una carta, la vida de alguien puede cambiar Créditos de la portada a: LaEditorialFugaz
