- No me importa si piensas que aún no tengo la edad suficiente, ¿Podrías amarme de una vez? - sonreíste maliciosamente montándote encima del pelinegro - Quiero hacer estallar tu dulce corazón de chicle...
• Inspirada en la canción de MARINA - BUBBL...
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Capítulo 12 Fricción
. . .
Shinichiro que mantenía su rostro en ti, bajo tu camisón y se recostó a tu lado cubriendo su rostro. — Que estoy haciendo... — susurro.
Había perdido la cabeza por completo.
No podía negar que en el último año empezó a verte con otros ojos. Pero tampoco imaginaba que la situación escalase tanto.
Se suponía que todo era un capricho tuyo, algo que más adelante olvidarías y recordarían entre risas y anécdotas. Pero cada intento, cada propuesta, la manera en la que lo mirabas y la forma en la que expresabas tu amor, lo hicieron caer a tal punto que lo volvió codicioso e inconscientemente esperaba más y más de ti.
Por otro lado tu sacabas provecho de la situación, sabías que él era un hombre y que tenia deseos sexuales, los cuales no hacías más que agravarlos en los últimos meses.
— Shin... — Lo llamaste.
El pelinegro te vio de reojo y se tensó — Perdón .... — se sentó en la orilla de la cama.
Rápidamente lo abrasaste por la espalda — No te detengas por favor, no pienses en otra cosa. — Cerraste los ojos — Céntrate solo en mi...
Shinichiro se dio la vuelta y te sujeto de los hombros — _______, Por favor olvida todo lo que acaba de pasar...
Acariciaste su mejilla — Si lo hago....tú lo harás? — musitaste mirándolo fijamente — Porque cada ves que me veas a los ojos, recordarás la sensación de mi cuerpo.... — te acercaste a su rostro — Y el rose de mis labios — susurraste uniendo sus bocas.
Shinichiro te recostó sin separar de ti, tomaste aire y sonreíste al tener a shinichiro nuevamente sobre ti, pero para que no se vuelva a repetir lo de hace unos minutos invertiste las posiciones.
Una vez estabas sobre el, sentiste tener el control así que empezaste a ser tú la que recorría el cuerpo de shinichiro entre besos y caricias. Tomaste una de sus manos e introdujiste uno de sus dedos a tu boca mientras lo mirabas de manera lasciva.
Tu intención era clara, querías excitar a shinichiro lo suficiente como para que no vuelva a retractarse.
Gateaste hacia abajo — Dime.... lo olvidarás — susurraste moviendo tus manos hacia su pelvis.
Shinichiro se sentó rápidamente y te sujeto de las manos — Detente...
Sonreíste de manera lujuriosa — Quieres que lo haga?...
Shinichiro cerró los ojos y soltó el agarre, y sin pensarlo dos veces sacaste su miembro erecto.
Tus pupilas se dilataron al ver el tamaño y el grosor — grande... — sonreíste mirando a shinichiro.
Este se sonrojó y te cubrió los ojos — No mires
Quitaste su mano y acercaste tu rostro para besar la punta de su glande, causando una contracción por parte del pelinegro. El cual ya estaba completamente avergonzado de la situación.
Lo sujetaste con tu mano izquierda y empezaste a masturbarlo, shinichiro botaba líquido preseminal en cada movimiento debido a la excitación.
Después de unos segundos recorriste tu cabello hacia atrás y decidiste introducir su miembro a tu boca causando que shinichiro te sujetase del cabello por el placer que le generaste. Lamias y succionabas con delicadeza, no querías lastimarlo por tu inexperiencia.
Shinichiro tenía la vista nublada, nunca pensó que una de sus fantasías se volviese realidad, sujetaba tu cabeza y friccionaba hacia abajo de vez en cuando, hasta que después de unos minutos empezaste a sentir contracciones en el cuerpo del pelinegro, dándote a entender que llegaría a su clímax.
Aumentaste la velocidad, querías hacer que el pelinegro quedase más que embaucado con tigo, querías hacerlo perder la cabeza.
Shinichiro te levanto y te abrazó ocultando su rostro en tu hombro antes de que pudiera correrse. Respiro entrecortadamente tratando de tranquilizarse. Estaba controlándose para no lanzarse sobre ti, estaba suprimiendo sus ganas de hacerte el amor.
Te moviste tratando de continuar tu trabajo, no querías dejarlo a medias.
— Espera... — shinichiro tembló. — No quiero lastimarte. — musito contra tu hombro.
— Pero...
— Ya no sigas...
Una vez relajado, se levanto y acomodo su pijama ocultando su miembro aún erecto.
— ¿Que sucede? — gateaste hasta la orilla de la cama — ¿Porque te levantas?
Shinichiro sujeto su rostro esquivando tu mirada — Dejémoslo así — Cogio una almohada — Dormiré en la sala
— ¿¡Porque?! — te levantaste y lo sujetaste de la mano — ¡Que hice mal!
— Nada...En realidad lo hiciste muy bien — Susurro lo último cubriendo su rostro sonrojado.
— Entonces porque te vas, ¡porque no continuamos! — trataste de buscar su mirada en medio de tu desesperación.
— No, aun no tienes la edad suficiente — te observo — Por mas que quisiera... me sentiría culpable por quitarte algo Preciado a tu edad...
Abriste los ojos y lo empujaste con molestia — No me importa, solo ¡hazlo! — volviste a empujarlo — ¡Hazlo de una vez, que importa mi maldita edad! — lo pateaste.
Te sentías molesta, después de todo nuevamente te dejaría poniendo la edad e inexperiencia como obstáculo.
Shinichiro se acercó a ti y trato de tocarte pero lo alejaste — ¡Excusas! Siempre pones excusas — enfureciste — Te demostraré que soy una mujer — corriste a la cama y te cubriste — Te arrepentirás de no tomarme esta noche...— sollozaste mientras escuchabas a shinichiro salir de la habitación.
Este se sintió culpable por dejar que la situación escalase tanto y miserable, pero al mismo tiempo no podía dejar de recordar la sensación y suavidad de tu cuerpo, y la manera en la que chupaste su miembro. Ahora recordaría esa escena cada vez que te mirase a los ojos.
Sacudió su cabeza y se lanzó al sillón tratando de conciliar el sueño, quizás en ellos podría continuar lo que dejó a medias esa noche...
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Sufro de ansiedad, así que es inevitable que no suba capítulos cada dos dias como máximo hahaha. >~<
