Epílogo

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Los años habían pasado como si una corriente de un río se tratara. En tan poco tiempo ocurrieron tantas cosas. Una infiltración en un país enemigos, con armas que no eran nuestros equipos de expedición y unos caballos maquinarios llamados "coches". Perdimos amigos y ganamos nuevos. Sora pudo reunir a más personas a nuestra causa, lo que nos dio ventajas en nuestra operación, pero ver a Armin destruir un puerto entero en su forma titánica, para luego destransformarse y observar su cara de arrepentimiento. Puse la mano en su hombro y le intenté tranquilizar.

Tn: Piensa que lo estamos haciendo por la libertad. - apreté el agarre al sentir como intentaba no llorar -

Es verdad que perdimos a Eren por días, el cual estaba más cambiado. Se veía más serio y se había dejado la barba, la cual yo con cariño se la afeitaba. ¿En qué momento se convirtió en un hombre? El momento en el que dió señales de vida fue para destrozar un edificio y acabar con aquella nación.  Como ya dije, muchos de los nuestros fallecieron, algunos de forma injusta y, a la hora de la verdad, parecíamos más de los que eramos.

En aquella última misión que resultó tan fatídica, descubrimos que Mikasa era de la realeza nipona y, seguramente, Levi también, pero a este no le importaban esas cosas, sino acabat con Zeke, el cual en un momento se alió con nosotros, para luego traicionar a tods persona que confiaba en él, aumentando la ira de mi novio. No sé cuántas veces le pedí que no lo hiciera, que no se dejara guiar por sus impulsos, en vano, ya que siempre hizo lo quiso, hasta que me harté.

Levi: Tenemos que matarlo ya. - nos susurró a Hanji y a mí -

Tn: No es buena idea. Debemos dejarlo como está y que se encargue Eren de dictar sentencia - dije, recibiendo una mirada de odio por su parte -

Levi: Últimamente has estado muy pegada al culo de ese niño. ¿No será que te gusta? - me recriminó y yo negué con la cabeza -

Tn: Es la única persona que me queda de mi antigua familia. Normal que lo quiera proteger. - me defendí, enfadándolo más -

Levi: Ya, lo que pasa es que a esta altura ya lo seríamos tú y yo. - espetó, pasándose de la raya -

Hanji: Chicos... - intentó calmarnos, sin tener resultado alguno -

Tn: No fue mi culpa y lo sabes. Yo no sabía que... - me tomé unos segundos para respirar hondo, intentando no temblar - pasaría. Tenía que cumplir con mi deber. - una lágrima se deslizó por mi mejilla - Ojalá no hubiera ocurrido, ojalá no lo hubiera perdido. - toqué mi vientre -

Levi: Tn, yo... - vio mi estado, por lo que se arrepintió, pero no recibió respuesta - Lo siento, cariño. No quise... - no terminó de formular la frase porque su nariz se encontró con mi puño, derribándolo.

Tn: Eres un insensible. Todo lo que hago le pones pegas. - seguí golpeándolo -

Mi rabia duró solo unos segundos más, ya que Zeke aprovechó la oportunidad para autoinmolarse, arrasando con todo a su alrededor, lanzándonos unos metros más allá. En el momento que la explosión terminó, noté algo caliente en mi espalda, acompañado de un ardor infernal. Jadeé y me quité de encima de Levi, al cual estaba abrazando, protegiéndolo. Algunos trozos de la carreta en la que estaba el propietario del titán bestia se incrustaron en mi espalda, atravesando mi carne. Al apartarme un poco y pasar unos segundos de pie, me desplomé en el suelo, completamente inconsciente.

Me desperté en una camilla, completamente inmovilizada y vendada. Estaba completamente desorientada. ¿Cómo había llegado hasta allí? Mi pregunta fue respondida con la entrada de mis acompañantes a la sala.

Levi: Que sea la última vez que me das un susto de estos - me regañó, causando una carcajada de la pelirroja -

Tn: Un gracias me bastaba.

Después de que me dieran el alta ese mismo día, por estar en guerra y con falta de personal, descubrimos que Eren había creado una facción el solito, como si una religión se tratase, la noticia de la "resurrección" de Annie y su acercamiento con Armin, que el puto de Sora tenía una novia esperando su vuelta y que solo había una forma de acabar con todo este problema, cosa que no me gustó. Antiguos enemigos y nuevos amigos se unieron para un mismo propósito: parar la catástrofe que Eren Yaeger iba a causar. Levi se encargó de asesinar a Zeke, el cual había revivido gracias al poder de la trama, liberando toda su rabia y Mikasa, Sora y yo nos encargamos de lo más difícil.

Saltábamos de edificio en edificio, impulsados por el gas de nuestros equipos de expedición, volando por los aires y llegando al gran esqueleto del titán de Eren. Ambas nos miramos y, con una seña, nos separamos, rodeando lo que se suponía que era su nuca.

Tn: Lo siento, Eren. - destruí con las lanzas bombas el hueso, dejando al descubierto su cuerpo anexado con la médula. - Es tu turno. - miré a Sora, el cual asintió, dejando atrás aquella escena y volviendo al lado de mi amado....

Estaba por escribir mi última frase, cuando entraron en la habitación, haciendo escándalo.

Nadja: Deberías estar lista desde hace media hora, Tn - me regañó la prometida de Sora, la cual era la mujer más bella del mundo a mi parecer. Si que tenía suerte el cabrón. La mirpor unos segundos y dejé mi pluma en el tintero, levantándome, mostrando que ya tenía mi vestido puesto -

Tn: Que se aguante. Yo llevo esperándolo por años y lo que me encontré fue con un enano gruñón - ambas reimos por mi comentario y me dirigió hasta la puerta de la iglesia - ¿Tú crees que dirá que sí?

Nadja: Ni lo dudes - me soltó la mano, dirigiéndose hacia donde estaba Sora, el cual se veía radiante con su traje -

Respiré hondo y entré, encontrándome con la estancia llena de personas, la cuales se habían congregado para verme dar el paso más grande de mi vida, acompañada de Eren, el cual me tendió su brazo con el objetivo de llevarme al altar. Caminamos por el pasillo, sintiendo como mis piernas se habían convertidos en flanes de lo que temblaban. Mi vista estaba puesta en el ser más hermoso que mis ojos habias visto, el cual no pasaba del 1.60, quien me sonreía nervioso. Llegamos hasta la altura donde me recibiría y, antes de soltarme, Eren habló.

Eren: Si la dañas, te prometo que te mataré. - aseguró, dándole la mano -

Levi: Ni en mil años, mocoso. - correspondió y, entonces, mi castaño amigo se unió a una Mikasa sumamente embarazada de 4 meses -

La boda fue sencilla, sin votos melosos, más que jurarnos que jamás nos separaríamos y que siempre protegeríamos nuestras vidas con la del otro, hasta que la muerte nos separase. Nuestra promesa fue sellada con un beso que se alargó, gracias a que Levi se hizo paso entre mis labios, enredando nuestras lenguas y afianzando su agarre fuertemente, demostrando que iba en serio. Todos estallaron en aplausos y entonces, nos separamos.

Levi: El mocoso se nos adelantó, pero podemos intentar crear una nueva vida de nuevo - acarició el dorso de la mano -

Tn: Sería todo un placer mi capitán - sonreí -

Levi: No me esperaba menos, mi subordinada.

Bueno, esto llegó a su fin. Agradezco a todas aquellas personas que han estado presente en estos largos 6 años. Hemos pasado muchas cosas juntos pero, el que más ha sido Sora-01, que ha estado detrás de mí, obligándome a actualizar. Espero que lo hayáis disfrutado como yo. Nos vemos en mis demás historias. De nuevo, gracias. Os quiero.

 Os quiero

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Mi Subordinada(Levi ×OC) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora