A Shattered Cross

capitulo 3

Las ramas que colgaban por encima del suelo del bosque se balanceaban de un lado a otro con los fuertes vientos. Mirando hacia las copas de los árboles, las hojas susurraban y podías vislumbrar todos los colores que estaban presentes. El viento parecía ser lo único vivo en el denso bosque, el silbido que creaba soplando a través de las copas de los árboles era el único ruido que se podía escuchar.

En el suelo, pequeños charcos acribillaron el área, cambiando el suelo fangoso normal a un desastre fangoso. El agua ha movido gran parte de la capa superficial del suelo que las raíces de algunos de los enormes árboles sobresalían del suelo en un desorden disperso. Enredándose y creando un área aún más difícil de atravesar.

Cuando el viento comenzó a amainar nuevamente, el sonido de los disparos rompió el silencio del bosque. En un instante el ambiente silencioso se llenó de gritos y ráfagas de disparos. A lo lejos, los destellos del cañón de una pistola brillaban a través de la espesa maleza, acercándose cada vez más.

Chocando a través de una maraña de ramas bajas, un cuerpo comenzó a correr a través del bosque. La persona medía poco más de seis pies de altura y era algo delgada. Mientras corría, su capa blanca azotaba el viento detrás de él. Cuando el hombre se deslizó detrás de un árbol, una flecha azul se estrelló contra el tronco de un árbol enorme a su lado. Rápidamente, desde donde se disparó la flecha, varios hombres más llegaron corriendo entre los árboles.

Todos ellos vestidos con lo que parecía un traje militar. En su mayoría ropa blanca que tenía algunos acentos azules, y todos usaban un sombrero que tenía una estrella de cinco puntas dentro de un diseño circular en el frente. Diez de ellos en total, ocho de los cuales sostenían un arco largo azul gigante. El arco parecía estar hecho de la luz misma e inhumano.

Los otros dos hombres empuñaban una espada de algún tipo. El mango de la espada parecía estar hecho de plata, sin embargo, la hoja estaba hecha de la misma luz azul que los arcos.

Cuando el hombre encapuchado se deslizó detrás del árbol, rápidamente se puso de pie y corrió hacia adelante. Mientras se lanzaba a través de los árboles, su capa comenzó a ondear en el viento una vez más. El hombre dio un giro rápido y su capa voló hacia un lado, mostrando parte de su atuendo.

Llevaba pantalones blancos que colgaban holgados, pero no se hundían mucho. Si bien sus botas estaban cubiertas de barro, se notaba que también eran en su mayoría blancas. Tenían detalles en rojo y los cordones eran rojos y negros. Alrededor de su cintura llevaba dos cinturones diferentes. Uno era de cuero rojo que le ceñía la cintura con fuerza. Mientras que el otro era más una tela roja y estaba envuelto alrededor de su cintura y también un lazo alrededor de su pierna izquierda.

El cinturón de cuero tenía alrededor de quince a veinte pequeños lazos que corrían alrededor de la espalda, en cada uno se sostenía un pequeño vial que tenía un líquido rojo en su interior. En el cinturón de tela tenía diez piezas planas de plata que colgaban de él. Todos espaciados uniformemente y colgados de un pequeño anillo, también corrían alrededor de la parte posterior de su cintura y continuaban hacia los lados. La capa solo voló al bloquear esto por un segundo antes de que cayera detrás de él mientras corría.

Los hombres detrás de él continuaron corriendo tras él y no parecían quedarse atrás. Hubo un destello rojo frente al grupo y un segundo después desapareció. Todo el grupo se detuvo y miró hacia donde la luz volaba más allá de ellos. La última persona del grupo fue empujada contra el tronco de un árbol y una espada que se parecía a la de ellos, solo que diferente en color, sobresalía de su cabeza. Mirando más de cerca, la espada atravesó su cabeza y se clavó en el árbol, sobresaliendo unos centímetros por la espalda. La luz roja que formó la hoja se disipó lentamente hasta desaparecer por completo, una vez que desapareció, el cuerpo del hombre cayó inerte al suelo.