Un día como cualquier otro, vas a tu sitio favorito para despejarte y dibujar. Ahí conoces a una chica que te llama la atención y poco a poco te irás acercando a ella sin darte cuenta.
Nada más tocar el suelo con el pie sabía que sería un mal día. Quité mis lagañas de los ojos y apagué la alarma que sonaba en bucle desde mi teléfono.
Me levanté y desayuné en la mesa de mi cocina. Mi madre estaba en casa y su mal humor se veía de lejos.
Me echó la bronca desde el sofá donde dormia (no se porque duerme en el sofá si tiene una cama para ella sola) por hacer ruido al andar. Recogí las botellas vacías de vodka que yacían a su lado y suspiré.
Cuando ya terminé, me puse la ropa más básica que encontré en mi armario. No tenía ni ganas de arreglarme. Era un día frío y nublado, pero no llovía.
Salí de mi casa y vi a Taylor esperando donde siempre. Creo que verla era lo único que me hacía feliz.
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Pude ver como me miraba con una sonrisa a lo lejos y yo me lancé a abrazarla. Ella correspondió sonriente y el abrazo duró más de lo normal. Ella noto esto y se preocupó.
-¿Está todo bien? -
- Sí, sí, tranquila, solo un día malo. ¿Vamos? -
Le di la mano y ella la agarró. Llegamos al instituto andando y nos separamos para ir a nuestras respectivas clases.
El tiempo pasaba extremadamente lento y me sentía encerrada. Cada minuto se sentían como 4 horas y media. Cuando por fin sonó el timbre que indicaba el primer receso dejé las cosas en mi mesa y bajé corriendo. Deseaba con fuerzas ver a Taylor así que intenté bajar corriendo pero a mitad de las escaleras alguien me agarró del brazo.
- ____. -
Cuando me giré y vi quien era, mi boca se secó y mi cuerpo empezó a temblar.
- Camila. - Respondí.
- ¿Podemos hablar? -
Su pregunta me sorprendió y tardé unos segundos en responder. Terminé asintiendo de manera lenta y dudosa. Ella me dio una sonrisa pero yo no se la devolví.
Mientras Camila me tiraba del brazo vi a Taylor al final de las escaleras viendo la situación. Le di una mirada de auxilio y ella asintió desde lejos.
Camila me arrastró a un sitio más apartado y suspiró. Yo me crucé de brazos y esperé que comenzara a hablar.
-____, yo... Lo siento mucho. Iba borracha, no sabía lo que decía. -
- Te conozco lo suficiente como para saber que cuando estás ebria eres la más sincera de todas. - contraataqué rápidamente.
Ella miró el suelo y la vi realmente triste.
Veréis, soy una persona de corazón blando. Intento aparentar lo contrario, pero al final mi verdadera personalidad sale a la luz. Siempre doy oportunidades así que esta vez no fue una excepción.
Suspiré. - Mira tía, tranquila. Olvidemoslo y volvamos a ser amigas. - Le sonreí
Sus ojos se iluminaron y me abrazó con fuerza.
Sus manos rodeaban mi cintura y yo empezaba a estar un poco incómoda. Me daba besos en el cuello y me parecía raro, pero lo dejé pasar, solo estaba emocionada y lo expresaba de esta manera.
Cuando se separó, caminamos juntas hasta Taylor y nos miraba con una sonrisa.
- Veo que ya lo habéis arreglado - Sonrió Taylor.
- Sí. - Contestó Camila.
- Me alegro muchísimo -
No respondió.
Taylor y yo nos miramos y levantamos los hombros. Me hizo una señal con la cabeza dándome a entender que me vaya con Camila y que ya nos veríamos luego. Le lancé un beso y ella se rió.
- - - -
- ¿No crees que ha sido muy antipática contigo? -
- Un poco sí. Quizás solo estaba cansada o tenía prisa. -
- Supongo. - Respondí poco convencida.
- Pero no nos preocupemos por eso ahora, amor - Me abrazó por la espalda y posó unos dulces besos en mi clavícula.
Apoyé mi cabeza en su pecho y cerré los ojos mientras ella cantaba en voz baja.
Su voz entrando por mis oídos mientras sus manos me tocaban era la mejor sensación del mundo.
- Podría quedarme así siempre. - Respondí relajada.
Ella se rió y siguió acariciandome.
- Te quiero. - Se escapó de mis labios.
Me miró sorprendida y me besó.
- Yo te quiero más. - respondió
- Eso es mentira. - Repliqué ofendida de manera juguetona.
Y así estalló una batalla de besos y abrazos tiernos. (Terminé ganando yo)
Haberme reconciliado con Camila me hacía sentir menos nerviosa y sola. Volvíamos a hablar y a vernos fuera del instituto y yo estaba realmente feliz.
Pero seguía teniendo un mal presentimiento.
HOLAAAA se que es súper corto lo siento muchoooo 😭😭 Pero esque teníaganas de escribir pero tengo un sueño que no me aguanto de pie. Literalmente de los 11 días que he estado fuera, todos he dormido mal y los dos últimos literalmente no he cerrado los ojos. Ahora sí, dejo este miniepisodio por aquí y mañana sigo. Disculpen los errores, faltas, etc... los quiero muchoooo ♡♡
