Capítulo 08

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Fourth se despertó con un fuerte dolor de cabeza. Apartó la almohada para encontrar la brillante luz del sol penetrando a través de la ventana de su dormitorio. ¿Cuándo habían sido abiertas las persianas?

—¿Qué hora es? —susurró, girando para observar su despertador. Las siete y veinticinco.

¿Por qué parecía mucho más tarde?

Bostezando, se detuvo al echar un vistazo a Gemini que estaba durmiendo en el suelo. Él se había negado rotundamente a dormir en el colchón de Ford, diciendo que estaba demasiado acostumbrado a la dureza para querer la comodidad de un colchón. Por no mencionar que había dejado claro que desde su llegada a Nueva Orleans, había estado durmiendo en callejones con la espalda contra la pared. El suelo era un avance para él. Al menos allí podía estirarse.

La manta que le había dado la noche anterior estaba todavía doblada bajo la almohada. No las había tocado. En vez de eso, estaba acostado sobre un costado con una mano extendida sobre la cabeza y la otra curvada justamente bajo su barbilla.

La barba de un día espolvoreaba sus mejillas. Había algo tan masculino y todavía tan de muchacho en él tumbado allí de esa manera... Pero cuando se quedó mirando sus labios y recordó el abrasador beso que le había dado la noche anterior, esto ahuyentó cualquier pensamiento de que fuera un muchacho.

—¡Fourth!

Saltó cuando Ford entró corriendo en la habitación. Una brecha de temor pasó a través de él. ¿Había encontrado el demonio una manera de entrar?

—¿Qué ocurre?

Él se detuvo al lado de la cama y pateó el suelo con el pie.

—¿Le dirás a Prom que deje de gimotear por mi música? Me gustan Culture Club y Prince.

Fourth frunció el ceño confundido.

—¿Prom?

—Sí. Regresó anoche.

—¿Cómo?

—No lo sé, ¿pero podrías hablar con él? Hay una razón por la que soy el único fantasma en esta casa. No me gusta compartir.

—De acuerdo, dile que venga aquí.

—¡Prom! —gritó tan alto que Gemini se despertó de golpe en el suelo.

Prom se manifestó enfrente de Fourth.

—Si oigo una vez más "Karma Chamaleon", juro que voy a encontrar a Boy George y hacer que se coma los discos de Ford. ¿Qué tiene que ver rojo, dorado y verde con todo, de todos modos?

Ford estaba ofendido.

—¡Es una canción brillante! Vamos... "Cada día es igual que sobrevivir. Tú eres mi amante, no mi rival". ¿Qué podría ser más significativo que eso?

Gemini gruñó cuando levantó la cabeza del suelo para fulminar a los fantasmas con la mirada.

—Alguien que me diga por favor que no estamos teniendo realmente un absurdo debate sobre la genialidad de "Karma Chameleon" a las siete de la mañana.

Fourth se rio.

—Me temo que sí, dulzura.

Gemini fulminó con una mirada hostil a los fantasmas

—¿Cómo es que conoces a Boy George? —preguntó Ford.

—Estuve en el infierno, Ford. ¿Qué crees que usaban para torturarme? Malas canciones de pop.

Prom le dedicó a Ford una mirada satisfecha.

—Te lo dije.

—Es una canción fantástica.

14 GeminiFourthWhere stories live. Discover now