-¡Yo no le he hecho nada a absolutamente a nadie!
Blaise solo se alzó de hombros mientras Draco se tocaba la larga cola.
-Oye Draco ¿y ves bien con ese ojo amarillo? –pregunto Goyle.
-Pues sí, creo que si –respondio tapándose un ojo y luego el otro.
-Bueno, en lo que descubren que pasa voy a bañarme –dijo Crabbe tomando una toalla y dirigiéndose al baño- no tardan en servir el desayuno.
-Es cierto –añadió Goyle haciendo lo mismo.
-Pues yo no puedo salir así, se van a reír de mi –dijo angustiado- acepto que pueda ser una broma de mal gusto de no sé quien pero ¿Cuánto durará?
-Lo bueno es que es domingo y no vamos a clases, tienes todo el día para averiguar que pasó- dijo Blaise.
-¿Pero cómo? Yo no saldré así.
-Pues no sé, solo queda esperar.
-¿Y si no se quitan para mañana?
-Tendrás que ir a la enfermería.
-¡No!... no pienso poner un pie fuera así.
Tomo su varita y de nueva cuenta intentó romper el hechizo mientras Blaise también se metía a bañar y cuando ya casi estaban listos Pansy tocó la puerta.
-Hey ¿ya están listos?
-Adelan...
-¡No! ¡Se va a reír de mí!
-¿Y? de todos modos te verá –respondio Blaise- pasa Pansy.
-¡No, al menos espera a que me ponga pantalones!
Su compañera de casa esperó un minuto y después entró muy campante.
-Draco ¿todavía estás en pijama? Mira que no te vamos a... -Draco se cruzó de brazos en espera de la inevitable carcajada, algo que efectivamente sucedió- ¿y eso? –Dijo sentándose junto a Blaise cuando acabó de reír- ¿es algún fetiche para alguna de tus novias?
-No –respondio malhumorado- no sé qué pasó, cuando desperté ya las tenía.
-¡Y tienes una cola, que lindo! –exclamó poniéndose las manos en las mejillas.
-¿¡Lindo!? –Respondio echándole ojos de pistola- ¡esto no tiene nada de lindo, es horrible, humillante y atroz!
-No seas dramático, solo tienes orejitas de gato, oye ¿y puedes ver bien con ese ojo amarillo?
-Sí.
-Bueno ¿ya nos vamos a desayunar?
-Yo no voy a salir así.
-Entonces te traeremos algo –dijo ella levantándose.
-¿Van a dejarme solo con esta desgracia?
-Igual seguirás teniendo orejas y cola si me quedo aquí con hambre –respondio Blaise camino a la puerta seguido por todos- te traeremos algo.
Cuando se quedó solo se sentó en su cama y recargó sus codos en sus rodillas y sus palmas en su barbilla, luego se levantó y fue de nuevo ante el espejo, observó sus orejas gatunas y para su sorpresa una se movió, por lo que haciendo el intento logró que se moviera de nuevo.
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Una cuestión de pelos
Mystery / ThrillerCuarto grado en Hogwarts y Draco Malfoy tiene más lecciones que aprender además de hechizos mágicos.