30. There is something in you

453 49 8
                                    

Todo sucedió relativamente lento, puesto que ninguno de nosotros sabíamos que hacer.
A pesar de ello, mi mente trabajaba a una velocidad increíble. 
Estaba claro lo que ocurría, y había que aceptarlo y decirlo tal y como es; mi hermano mellizo Joseph estaba acostado sobre la misma cama en la que se encontraba mi pesadilla más recurrente en los últimos días. Y aunque el coito estaba prácticamente implicado, o eso parecía debido a la falta de ropa en sus cuerpos y la posición en la que se encontraban, no podíamos eludir la interrogante que sabía que estaba invadiéndonos a todos: "¿Es posible?, ¿El hijo sería de él?, ¿O simplemente sería una especie de infidelidad? -claro, sin el sentido más fiel a la palabra ya que Gema y yo nunca acordamos una relación que contuviese algún vínculo romántico."

Era fácil querer aparentar que existía algo demasiado establecido entre ellos, lo suficiente como para que implicase que mi hermano fuera en realidad el padre de producto, pero no era lo más correcto, ya que en realidad era algo indeterminado, por lo menos para nosotros.
Aunque sí que abría la puerta a muchas realidades; en primer lugar, Gema no era exactamente lo que decía ser respecto a la vida sexual que llevaba, o por lo menos este hecho sugería esa posibilidad; en segundo lugar, la escena que se mostraba ante nosotros recomendaba la idea de que no tuvieron el cuidado necesario en "ocultarse", por lo que no parecía muy descabellada la idea de poder no cumplir con la responsabilidad necesaria para afrontar las consecuencias de alguno de sus actos; por último y lo que me parecía aún mejor, la había descubierto siendo infiel y por raro que parezca llamarlo lo mejor, lo era. De esta forma, yo podía excusarme en este suceso, y realmente aunque quisieran responsabilizarme a mi del embarazo, me daba igual dar alguna pensión antes que quedarme para siempre con ella.

Claro, esto último era complicado, tomando en cuenta al papá de Gema, pero seguro que le gustaría más que ese "niño", como él le llamaba, tuviese una familia más "tradicional", sí, yo tengo un pene, pero no soy un hombre.
No estaba convencida de utilizar esta herramienta, ya que, repito, nada me aseguraba un vínculo sanguíneo entre Joseph y el "bebé". Pero ya vería como hacer uso de esta nueva información.

Estaba tan inmersa en mis propios pensamientos, que no me di cuenta del momento en que Martín tomó por los hombros a Joseph, lo hizo bruscamente, atrayéndolo a sí mismo, para luego dejarlo caer lejos de la cama.
El impacto de su cuerpo contra el piso, causó un estruendo, fue así que Gema también despertó del estado en el que se encontraba.
Por supuesto que Joseph despertó algo desubicado y asustado por la repentina caída, pero puedo jurar que su impresión creció al vernos ahí.
Se miró a sí mismo, dándose cuenta de el estado de desnudez en el que se encontraba, miró su entorno también con evidente vergüenza que se incrementó al contemplar el lugar y los hechos.

-Yo, yo, no es lo que parece, lo juro- comenzó a justificarse nerviosamente.

De hecho, creo que todos fuimos participes de las miradas de lo que se podía llamar una "mezcla de vergüenza, asombro y miedo" que se dieron ellos dos.
Joseph intentaba justificarse, cosa que no salió bien, ya que incluso él notaba la ambigüedad que implicó el amasijo de versiones que daba; en cambio ella no pudo hacer más que eludir nuestras miradas y evidenciar en su rostro la vergüenza que le causaba la situación en general.

-¿Eres consciente de la situación?- le recriminó Martín.- Es tu "cuñada"- dijo dibujando las comillas con sus dedos.- Aunque, comienzo a creer que en un principio fue más que eso. 

-¿A qué te refieres?- preguntó con miedo Gema.

-¿De verdad creyeron que no noté nada antes?- se miraron entre ellos, Valentina también puso cara de asombro, confirmé que a ella tampoco se le había cruzado por la mente esa posibilidad.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 06, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Pero, yo te quiero más (Juliantina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora