07 - pobrecito

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En el sombrío sótano de S City, un chico de dieciocho o diecinueve años estaba acurrucado en un rincón, y junto al chico estaba parado un hombre alto y grueso.

  El gran hombre siguió apretando el cinturón en su mano, su rostro estaba lleno de burla, "¡Jaja, pequeño bastardo, todavía caíste en mis manos! ¡Déjame huir! ¿Hmm? Estás convencido por mí, jaja ..."

Los ojos del niño que yacía en el suelo estaban llenos de disgusto, pero su cuerpo no tenía ninguna fuerza después de no haber comido durante mucho tiempo. A medida que el hombre se acercaba, el niño se desesperó gradualmente.

  Mientras el hombre seguía acercándose, el joven miró claramente la cara del hombre, dientes amarillos y un mal olor en todo su cuerpo.

  El joven miró en silencio a su alrededor, listo para terminar con su vida en cualquier momento, a nadie le importaba de todos modos.

   "Jaja, esto es tan bueno, aún no he probado el pollito, puedo disfrutarlo hoy, ¡jaja!"

Traductora: viejo cochino puerco🤢 ¡Con el niño no!

   Después de terminar de hablar, bajó la cabeza, pellizcó la barbilla del niño con una mano y la levantó.

  Al ver que la repugnante boca del hombre estaba a punto de tocarlo, el chico no pudo contenerse y lo escupió.

   Pero nada salió de un estómago que no hubiera comido durante días.

  La acción del niño obviamente enfureció al hombre, y el rostro del hombre se volvió visiblemente vergonzoso.

   "¿Me desagradas? No me has desagradado por ser sucio, un bastardo nacido de una puta, tú..."

"No se te permite hablar de mi madre, no se te permite hablar de mi madre". El niño se levantó de repente y se estrelló contra el hombre. Quizás la ira extrema estimuló el potencial del niño y lo derribó unos pasos.

   Obviamente, esto enfureció aún más al hombre. El hombre se quitó el cinturón y se lo arrojó ferozmente al niño.

   "Maldita sea, todavía te atreves a resistir, te mataré, pequeño bastardo." Mientras maldecía, arrojó el látigo en su mano al niño.

  El joven se mordió los labios con fuerza, aunque su rostro se puso pálido por el dolor y su frente estaba cubierta de sudor frío, no le dijo una palabra al hombre.

  Simplemente contando en silencio uno, dos, tres, cuatro, cinco... dieciséis, diecisiete, diez...

  El grito de un hombre vino junto a su oído: "Ah... Gan, que no tiene ojos".

   "Tu tía y yo" Después de hablar, Jin Jiang pateó al hombre nuevamente.

El hombre recibió una patada directa y cayó al suelo. Cuando miró hacia arriba, vio a una hermosa mujer parada frente a él, sus ojos apretados por la carne y las hendiduras miraban de arriba abajo hechizantemente.

   "Oye, de dónde vienes, la zorrita, por qué, de qué te sirve encontrar a este cabroncete, sígueme señor, te prometo que serás popular y picante... ah..."

   Antes de que el hombre terminara de hablar, Jin Jiang dio un paso adelante y golpeó al hombre directamente en la boca parloteante.

   "Es mejor salir de aquí antes de que mi tía se enoje, o... eh".

  Al ver la mirada desfavorable de Jin Jiang, el hombre se levantó y salió corriendo, pero siguió mirando a Jin Jiang.

  El joven en el suelo se puso de pie lentamente mientras se apoyaba en la pared de pintura descascarada, "Ejem... tos... vete, me temo que va a llamar a alguien, apúrate... vete".

Renacimiento en los últimos diasWhere stories live. Discover now