Just For You - Roger Taylor

42; for my life

– segura que no quieres que te acompañe? - preguntó Rog.

-– puedo ir sola, tranquilo. -le sonreí. – te amo.

– también te amo. - me besó. – me dices que te dice el doctor, eh.

– ajá.

Bueno, yo era doctora así que sabía que lo ideal era hacerme un chequeo todos los meses en caso de que tenga algo para que afecte al embarazo. Estaba tan segura de que estaba bien.

Excepto por una cosa... Ya hace unos años parece que tengo algunos problemas con respecto a que me canso muy rápido y que con emociones fuerte me da un dolor muy fuerte en el pecho, pero estaba muy segura en ese momento que estaba bien.

Pero no era así, había cometido el error más grande de mi vida.

Al llegar al hospital esperé hasta que sea mi turno , me puse a leer algunas revistas , sabía que iban a tardar en llamarme ya que había llegado tarde ( nunca soy puntual, por más que lo intento, no lo soy) unos minutos después alguien se sentó a mi lado.

– Anne? - preguntaron.

Miré a la persona que estaba a mi lado, era una ex compañera de la universidad, no éramos muy unidas pero ella siempre me contaba todo lo que pasaba ahí. Nos nos veíamos desde hace muchísimo.

– Hola - le sonreí. – cuanto tiempo.

– si. - sonrió. – ¿Que haces aquí?

– Pues, me hice algunos estudios para ver si todo va bien en mi embarazo. - le respondí.

– ¡Felicidades! - dijo sorprendida. – Oye, tú no eras pareja del baterista de la banda Queen? Mi novio es súper fan de la banda.

– Sí, lo soy. - reí levemente. – nos vamos a casar.

Ella chilló de alegría y me abrazó, me sorprendió mucho ese gesto suyo, pero bueno.

– Te digo algo? Como eras toda callada en la universidad por un momento pensé que no lograrias conocer a alguien con esa actitud que tenías y que te quedarías sola por el resto de tu vida y mucho menos pensé que te casarias con un famoso. - dijo como si nada.

– Auch. - dije sin sentimiento alguno.

– no te ofendas, pero ahora ya ves que no fue así. - sonrío.

– Anne Hardmoon. - ya era mi turno.

– me tengo que ir, espero que te vaya muy bien. - le sonreí nuevamente.

– igual!

Recuerdo ese día a la perfección, estaba muy confiada en que todo estaba muy bien, todo iría bien conmigo, con mi matrimonio, con el embarazo, pero algunas cosas no salen como deseas.

– entonces, señora Hardmoon, está aquí para leer sus resultados de las pruebas ¿No es así? - me dijo el doctor mientras buscaba los resultados.

– si, y si lo hace rápido mejor. - le dije. - tengo prisa.

– claro. - el doctor limpió sus lentes y sacó los resultados. Comenzó a leer. – al parecer todo bien por ahora. - dijo mientras seguía leyendo. – Sí... - seguía leyendo. – en el embarazo todo bien. Déjeme buscar los resultados de sus otras pruebas.

Esas otras pruebas era para ver si había contraído algo, alguna enfermedad o si mi presión arterial estaba muy alta o baja, si necesitaba comer más o no, todo depende para que el embarazo vaya bien, algo mal y todo se malograria.

– ¿Por el momento como se siente? - preguntó.

– de maravilla, me he estado cuidando más que nunca. - respondí.