Clientes problemáticos.

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Mientras comían de los deliciosos postres de Tweek no pudo evitar notar las miradas nerviosas que la pareja frente a él intercambiaba.

Joder, en serio le costaba demasiado creer que ese par no se diera cuenta de su amor, es decir, Tweek actuando cauteloso y con las mejillas ligeramente sonrojadas a la espera de que Craig probase sus postres y le diera su veredicto, ni siquiera a él lo miraba con tanto interés y eso que se suponía que se habían citado tan temprano para que le ayudase a elegir un nuevo postre para la temporada de verano; Craig por su lado de la pasaba con una pequeña sonrisa sobre sus labios, viendo a Tweek con una mirada casi soñadora a la vez que no dejaba de demostrar su felicidad por comer de los postres del rubio y claro que ahora él se sentía como la tercera rueda.

No es que no le agradara ver a su mejor amigo junto al chico que le gustaba pero era algo incómodo ser el único ahí que sabia que esa pareja estaba perdidamente enamorada mientras que ellos trataban de esconder su amor del otro y que, para colmo (aún con lo evidentes que eran), consiguieran mantener al contrario con la duda de si estaban enamorados o no.

- Espera, amor - el pelinegro tomó a su "novio" por el mentón y, usando su pulgar, limpio una mancha pequeña de mermelada de frambuesa de sus labios- debes tener más cuidado -.

¡¿Era jodidamente en serio?! ¡¿Cómo es que ese par era tan ciego?! Es decir, habían servilletas en la mesa y aún así Craig había limpiado esa mancha minúscula con sus propias manos y, peor aún, ¡Había lamido su dedo cuando el rubio frente a él bajó la mirada avergonzado! En verdad ese par necesitaba ayuda, su ayuda.

- ¿Y-Y bien? - el rubio de ojos azules llamó la atención de los chicos - ¿Cuál creen que debería ser el postre para la temporada? -

- La tarta de frambuesa se siente bastante fresca para los días "calurosos" así que tiene mi voto - respondió el pelinegro mientras le daba otro bocado a su mini tarta con todo el gusto que era capaz de expresar.

- Hmmm coincido con ¡CARAJO...! Con Craig, aunque el pan de zanahoria es delicioso - le dio otra probada a dicho pan con una gran sonrisa, en verdad Tweek tenía una gran habilidad para los postres.

Ver a Tweek emocionado porque las personas disfrutaran de sus recetas era tan agradable, ahora entendía porque Craig sonreía tanto cuando hablaba sobre él... deseaba tanto poder ayudarlos a estar juntos y así poder compartir su entusiasmo.

- Creo que lo mejor será que lo probemos con algo de café- sugirió el pelinegro a la vez que se levantaba de su asiento - voy a preparar un poco y... - su mirada en seguida buscó a la de su amado, el cual, estaba a punto de replicar - para ti haré algo de chocolate caliente, amor~ - era increíble como hasta su tono de voz cambiaba al tratarse de Tweek - y de paso voy a preparar las cafeteras para la hora de apertura - joder, en serio el Craig enamorado era... irreconocible y tan considerado, a veces le resultaba difícil creer que ese chico tan meloso era capaz de meterse en una pelea a puño limpio y terminar sin casi ningún rasguño.

- G-Gracias, cariño - y Tweek también era adorable, con esas mejillas sonrojadas y esa pequeña sonrisa sobre sus labios, eran una pareja tan linda, le parecía un crimen que aún no estuvieran juntos de verdad.

El pelinegro se alejó de la mesa para ir a la trastienda, seguramente para buscar ingredientes y los vasos de la bodega para llevarlos al mostrador o algo así, sea como fuere, lo había dejado a solas con el rubio, algo que no desaprovecharía, después de todo, tenía que tantear el terreno con él.

- Vaya, es lindo ver como ¡COÑO!... como te cuida -

Los ojos del contrario se abrieron por lo inesperadas de sus palabras y sus mejillas ardían en un intenso tono carmín mientras sus manos instintivamente se dirigían a su cabello, estaba a punto de tirar de él.

Aquel veranoWhere stories live. Discover now