Pressure, enloquecida, arrancó con fuerza las estacas que hubieron atravesado su cuerpo. Avanzaba dispuesta a seguir con el enfrentamiento hasta que la mano de Steer agarró su muñeca con fuerza.

- Se te está yendo de las manos -dijo de pronto. La obligó a colocarse detrás de él sin mucha gentileza-. Hoax no hubiera querido verte morir en un lugar así.

Las sierras que serpenteaban al rededor del pelirrojo se lanzaron al ataque de nuevo en una ofensiva directa con muchas aperturas. Un simple gesto de Blake las detuvo por completo de nuevo. Sin embargo, cuando iba a coger a Klaine para tratar de ponerlo a salvo, fue él quien se detuvo. Dio media vuelta y contempló como una cadena dentada había atravesado su pierna y se había clavado en el suelo con firmeza.

- ¿Cómo? -Preguntó.

- Mientras estabas concentrado en recuperarte del golpe de Pressure escondí una cadena entre las sombras del sótano. Es burdo, pero ha funcionado mejor de lo que pensaba. Resultará que el tan afamado Blake no es tan grande después de todo... -Sus palabras, con un tono jocoso, consiguieron despertar una emoción en el impasible Blake. Su rostro ardía de rabia.

- No eres nadie para hablarme así.

- Soy todo lo que quiero ser.

Con un movimiento de su muñeca las vigas que antes habían estado tiradas sobre el suelo se alzaron. Amenazaban con destrozar los cuerpos de nuestros compañeros. Sin embargo, poniéndose en pie, Klaine susurró algo al oído de Blake. Este asintió y agarró con fuerza la cadena. La sacó de su pierna con un tirón limpio y fuerte. Se agazapó y dejó que Klaine tomara el frente. Entonces, contra todo pronóstico, las cadenas y sierras que flotaban ralentizadas comenzaron a moverse a su velocidad habitual. No, se movían aún más rápido. Sorprendido por la repentina velocidad Steer pareció perder el control. El acero pasó rozando los cuerpos de sus objetivos pero no causaron ninguna herida. Cuando iban a volver a la vera de su amo pasó algo que nos sorprendió a todos. Klaine había endurecido su sangre al rededor de sus manos y, sin dudarlo ni un instante, agarró una de las cadenas de Steer. Salió volando junto a la cadena, la cual cada vez se movía más rápido, afectada por la habilidad de Blake. Entre aquel baile de acero, justo cuando a penas le separaba un metro del atónito Steer, se soltó y cayó sobre el demonio con fuerza. El golpe, secó, se produjo inmediatamente. El cuerpo de Steer inmovilizado contra el suelo y Klaine a horcajadas sobre él. La sombra de Pressure se alzó sobre el joven moreno; se relamió y tensó las manos.

- Eres mío, imbécil.

- No le pondrás tus sucias manos encima.

La profunda voz de Blake nos sorprendió a todos. El hombre, en pie de nuevo, tomó impulso con la pierna que mantenía sana y se lanzó a por la mujer. La velocidad que adquirió le hizo parecer más un proyectil que un hombre. Pressure alzó una mano y creó un campo gravitatorio a su alrededor. Cuando Blake chocó contra el campo se detuvo por completo. Sin embargo, en lugar de retirarse, comenzó a golpear con los puños el muro invisible de la mujer. Ella retrocedía a cada golpe, sintiendo la fuerza de los impulsos de Blake.

Tras ellos Steer luchaba por librarse del agarre de Klaine en vano. Apoyó una de sus manos contra la cara del joven y empujó con fuerza. Había perdido por completo la concentración. Con una fresca y sencilla carcajada Klaine detuvo los esfuerzos de Steer.

- ¿No te has dado cuenta de que estamos rodeados de mi sangre? Ha sido de gran ayuda que tu querida amiga me haya hecho sangrar de esa forma. Algo brusco, pero útil, ¿no crees?

Entonces la sangre que los rodeaba se alzó a su alrededor, cayendo como una fina lluvia de agujas sobre el cuerpo de Steer después. Tan precisas eran que ninguna cayó sobre el cuerpo de Klaine. El pelirrojo profirió un profundo grito de dolor. Y, ante aquella alerta, Pressure decidió que era hora de acabar con aquello. Concentró energía gravitatoria en sus pies y enfrentó uno de los puñetazos de Blake con una fuerte patada. El resultado fue el esperado: la fuerza concentrada de Pressure pudo con la desgastada energía rápida de Blake; este cayó rodando al suelo, desplazándose unos cuantos metros atrás. Cuando recuperó el equilibrio y pudo incorporarse vio como Pressure apenas podía moverse; apoyada contra un pilar respiraba con pesadez y parecía estar en su límite. Pensó entonces en Klaine. Cuando posó la mirada en los dos combatientes y la lluvia de agujas comprobó que las cadenas y sierras estaban a punto de cernirse sobre Klaine. El dolor activa los sentidos, pone el cuero en alerta y despierta los instintos de las personas. Y entonces entendió que el ataque kamikaze de Klaine había sido demasiado arriesgado.

El Ángel de Lucifer [Completada]Where stories live. Discover now