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Un gran prado de el bosque habia Sido tomado por telas, flores y decoración lujosas, los asientos muy bien decorados y los invitados en sus asientos esperando la entrada de la novia, si el gran día había llegado la boda de Edward y Cristal había llegado

El más emocionado el novio estaba en el altar sintiendo los nervios como un humano cualquiera

Pronto un balada empezó a sonar y el delicado pisar de la novia se escuchó, Cristal apareció entre una cortina de flores, su vestido blanco estilo princesa caía asta el suelo, piedras preciosas y un delicado bordado demostraban elegancia, unas mangas transparentes sin hombros con delicado bordado y piedras preciosas eran la parte superior, un escote en corazón se formaba en el degradó del bordado y piedras en el pecho

Un velo con la misma temática y una tiara de diamantes decoraban su cabeza, sus cabellos negros caían como cascada por la espalda y un ramo de hortensias, ponías y lavanda en sus manos

Edward al verla sintió por un momento sus piernas flaquear pero su sonrisa no pudo ser más notoria, si pudiera llorar por la emoción lo estaría asiendo

Cristal al verlo sonrió mientras llegaba a el y tomaba la mano que el le extendió, al llegar al altar las palabras del maestro de ceremonias empezaron y luego pasaron a los votos

— De humanos te prometí entregarte mi vida, también prometí amarte en todas las vidas que existiera y hoy puedes darte cuenta que mi promesa fue cumplida, pues te sigo amando ahora que soy inmortal y te seguiré amando por la eternidad y en Cualquier circunstancia, no existe mujer que pueda completarme como tú, ni en vida ni en muerte, por eso prometo está vez que seguiré amandote aunque nuestras almas se alejen de nuestros cuerpos por qué sin ti no éxito, sin ti no hay pasado, presente o futuro hoy renuevo mis votos pues ya no son efímeros sino para la inmortalidad — hablo Edward poniéndole el anillo

— Te e amado en todas mis faces, y cada una de ellas sigue locamente enamorada de ti, soy la niña que te dió una golpisa el primer día que se conocieron, soy la amiga con la que hiciste travesuras y te arrastraba a sus locuras, soy la novia que se dió cuenta que su amigo siempre había Sido el dueño de su corazón, soy la esposa que amo con locura a su compañero, soy la inmortal que se enamoro de ti sin recuerdos y hoy soy la mujer que llevará asta el fin de los tiempos su amor por ti, siempre te ame, y siempre te amare Edward, siempre serás el único dueño de mi corazón y de mi amor, mi compañero para toda la eternidad, hoy renuevo mis votos pues ya no soy efímeros hoy los ago para la inmortalidad— dijo sonriendo poniéndole el anillo

El maestro de ceremonias dió la señal para que se besaran y Edward la tomo de la cintura y la beso, los aplausos no se tardaron en escuchar

La alegría reinaba en el lugar y los novios eran los más felices del mundo, después de eso pasaron al área de la fiesta, uno a uno fueron dando las felicitaciones a la pareja

Edward no soltaba ni por un segundo a cristal mientras todos los saludaban

— Aún creo que no eres dignó — Hablo caius

— Se que ya me estás aceptando — Dijo sonríendo edward

— Edward — regaño cristal

— lo siento, no puedo evitarlo — Se disculpo

— Chismoso — Dijo caius al saber que leía su mente

— Vamos caius no molestes a la pareja — Dijo Marcus

— Felicidades mis queridos — Dijo aro

— Te ves hermosa — hablo Jane

— Si, lastima que el novio te aruina la imagen, por qué no lo cambias — Dijo guiñando alec

— hey! — Se quejó Edward

— Ja! El día de la boda ya te la quieren robar, yo que tú huyo antes de que se arrepienta — Se burló Emmett

— Dejen de molestarlos — dijo Esme

— Te ves encantadora cristal, muchas felicidades — Dijo Alex

— Si, realmente ese vestido es de ensueño — Dijo Alice

— Si, incluso el novio estuvo apunto de desmayarse, impactante — Dijo Jasper

Edward rodó los ojos y soltó un suspiro mientras cristal reía

— Ya suficiente, no voy a dejar que lo maltraten, para eso me tiene a mi — Dijo Cristal sonriendo

— No pues, que alivio — rio Edward

— Se que te encanta — Sonrió cristal mirnadolo

— Hay muchas cosas que me encantan — Sonrió con picardía Edward

— Hey! Sin doble sentido, eso déjenlo para su luna de miel — Dijo Emmett

Edward soltó una ricilla mientras cristal rodaba los ojos y le daba con el codo

La boda paso entre risas competencias y cuentos, Alisa dió palabras para la pareja al igual que los demás, todos estaban felices por los dos, alisa advirtió a Edward de cuidar a su madre y luego agradeció por hacerla feliz y renesmee igual, ella le había tomado mucho aprecio a Cristal y queria lo mejor para ella

Cuando la fiesta termino la pareja se despidió y tomaron marcha, Edward le había preparado una sorpresa a cristal sin que ella lo supiera la llevo a dónde todo comenzó

Cuando Cristal vio el lugar, apesar de los arreglos pudo reconocer la casa, está no pudo evitar sollozar recordando su vida ahí

Edward la cargo para hacerla entrar por la puerta como ase tantos años

Recuerdos de su pasado los inundaron, ellos en aquel hogar siendo tan felices, peor ahora viviendo lo que nunca pudieron

Ahí empezaron a olvidarse que eran vampiros y volvieron a su pasado incluso salían a su bosque, este aunque se había diesmado aun quedaba un lugar intacto pues Edward había comprado aquellas tierras, pues no quería perder el recuerdo de Cristal

Para Cristal fue regresar a su pasado, jugaron como en su niñez

— Gracias por todo Edward — Dijo Cristal besándolo

— Gracias a ti mi amor, por haber vuelto, por aceptarme una vez más — Dijo Edward besándola

Ambos se abrazaron mirando el horizonte

— Lo que el destino me prepare quiero vivirlo a tu lado — Hablo cristal

— Y así será, no volveremos a separarnos nunca...










Fin...

A Pesar Del Tiempo Where stories live. Discover now