Capítulo 7

66 9 11
                                    

─ ¿Otro mundo?

Jiang Sango sintió su cabeza dar vueltas por el impacto de la noticia.
Claro, las cosas extrañas tendrían sentido. Lo que no, es como llegó a un mundo que no era suyo. Era tan alarmante. ¡Quería estar de regreso a su hogar!

─ ¿Estás bien? Toma un poco de agua ─ Kagome Higurashi le ofreció.

Tampoco era una buena noticia para el grupo, acababan de darse cuenta, hasta el momento lo que pudieron teorizar. La Sango que conocían de alguna forma se había transportado a un mundo desconocido dejando a ... otra Sango en su lugar.

─ Una especie de intercambio de almas. ─ Miroku reflexionó. ─ A diferencia de Kagome, que ella está aquí en cuerpo y alma. Usando el pozo devorador de huesos como portal hacia su mundo. ¿Cómo haremos posible conectar este nuevo mundo que acabamos de descubrir y hacer el intercambio?

─ No tengo la menor idea ─ Inuyasha escondió sus manos entre sus mangas─ Pero lo averiguaremos.

─ ¿Me ayudaran a regresar? ─ Sango preguntó, conmovida luego de soltar un pesado suspiro.

─ ¿Qué clase de gente crees que somos? ¡Claro que sí! ─ Inuyasha le aseguró.

---

Sango despertó. Antes de abrir sus ojos, rezó al cielo, esperando despertar en alguna aldea o incluso a la intemperie, donde fuera, pero donde estuvieran sus amigos, los que conocía. Que estuviera en su mundo.

Cuando estuvo lista para mirar su entorno, fue grande su decepción.
Lotos por todos lados.

Definitivamente no era un sueño.
Era otro mundo o una ilusión bien elaborada. Aunque apostaba más con que era otro mundo en realidad.

Una experiencia tan extraña pero a la vez maravillosa. No podía negar que sentía miedo de no saber cómo regresar. Pero debía de averiguarlo. ¡Debía volver! ¿Y si esas niñas pudieran ayudarla? Tendría que convercerlas de mantener el secreto.
Al mismo tiempo, debía de actuar como la Sango que conocían, al menos por algún tiempo.

¿Cuanto tiempo?

Por suerte se había familiarizado con su habitación asignada. No tuvo problemas con su vestimenta. Aunque no se realizó su supuesto peinado tradicional. Con su cabello atado en una coleta alta. Sin usar los tocados de lotos. Eran preciosos sin dudas, pero temía incluso romperlos de lo delicado que se veían.

Terminó tardando más en su maquillaje, después de todo, aquel tocador era suyo. Siempre tuvo preferencia por el rosado fuerte y coral. Eran sus colores favoritos.

El sol apenas empezaba a surgir, calculaba que debía de ser muy temprano todavía. Escuchó tocar la puerta. Se trataban de siervas doncellas que la ayudarían a prepararse.

─ No se preocupen ─ sonrió. ─ Ya estoy lista. Pueden retirarse.

¿Fue otro error? Las doncellas se miraron entre sí sin saber que decir. Este era su trabajo, su joven maestra siempre se dejaba al menos peinar por ellas. Y la coleta alta no era su estilo habitual, a menos que participara de alguna actividad física, que tampoco era lo habitual.

─ ¿Puedo hacerles una pregunta?

─ Por supuesto, mi joven maestra. ─ una de ellas dio el paso al frente.

─ ¿Saben si los demás están despiertos?

─ Los líderes Jiang ya están por comenzar sus rutinas. Los discípulos mayores ya están turnándose en sus respectivos puestos. Los demás discípulos comenzaran a levantarse en una hora aproximadamente. Su hermana la joven maestra Jiang Wanyin debe de estar despertandose en este momento. Y la Jóven Maestra Wei se levantara en tres o cuatro horas más.

Naabot mo na ang dulo ng mga na-publish na parte.

⏰ Huling update: May 31, 2023 ⏰

Idagdag ang kuwentong ito sa iyong Library para ma-notify tungkol sa mga bagong parte!

𝐒𝐀𝐍𝐆𝐎 𝐢𝐧 𝐭𝐡𝐞 𝐥𝐢𝐟𝐞 𝐨𝐟 𝐉𝐢𝐚𝐧𝐠 𝐘𝐚𝐧𝐥𝐢Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon