04. Trato

106 23 12
                                    

'¿Cómo termine en esta situación?

Es lo que se preguntaba Aelin mientras era llevada por Cale jodido Henituse a rastras.

Después de soltar su nombre, Aelin intentó hacer lo más razonable que se le ocurrió en ese momento. Huir. Sin embargo, Cale nunca soltó su brazo.

"Ven conmigo". No fue una petición.

Cale no espero una respuesta y precedió a arrastrarla por el territorio, ignorando los susurros de la gente. Aelin era consiente de ellos, pero no les prestaba atención. Ruth por otro lado, inmediatamente miró hacia atrás.

"¿Quién es la chica con el joven maestro?"

"No sé, parece una chica ordinaria"

"¿No se ve más joven que él?"

"¿Sera una buena chica? No parece basura como el joven maestro..."

Ruth resopló. Por supuesto que su protectora es una buena chica. Nadie más lo había tratado con tanto cariño y cuidado como ella.

Aelin mantuvo su mirada en la espalda de Cale, su mirada no vaciló a pesar de que sentía las miradas de la gente quemando su nuca, la única razón por la que no se dejó llevar por sus pensamientos intrusivos fue porque no dejaba de preguntarse, ¿Por qué Kim Rok Soo llegó un día antes?

Sabía que este no era el verdadero Cale Henituse, ya que él habría fruncido el ceño y la ignoraría por completo. Al contrario, este Cale parecía preocupado lo que la desconcertó aún más.

¿Qué razón tendría Kim Rok Soo para preocuparse por ella? Según lo que había leído, el coreano no se entrometía ni preocupaba por asuntos que no estaban relacionados con él.

Ruth, en sus hombros, no dejaba de observar al pelirrojo, atento a sus movimientos. Esa sonrisa parecía sospechosa.

Llegaron a su destino un poco más tarde.

Aelin miró hacia la tienda frente a ella con confusión.

«La fragancia del té con poesía»

'¿No era esta la tienda de té de Billos?'

Aelin miró a Cale, estremeciéndose al notar que él ya la estaba observando y apartó la mirada de golpe. Cale frunció el ceño, preguntándose si enserio daba tanto miedo, pero no dijo nada y tironeo de su mano que sostenía la muñeca de la joven.

En algún momento de la caminata su mano se había deslizado hasta su muñeca. Tenía el extraño presentimiento de que si la soltaba saldría corriendo.

Un sonido de campana silencioso pero claro anunció la entrada de té. Aelin se paró al lado de Cale y miró alrededor. Todavía era temprano y no había mucha gente. Pudo ver que todos se sorprendieron al ver a Cale allí y sosteniendo la mano de una jovencita que parecía menor que él.

"Bienvenidos"

Ambos miraron hacia el dueño de esta tienda. Un hombre con aspecto de cerdo bebé que les dio la bienvenida desde el mostrador. El bastardo rico, Billos.

'Ah, Rok Soo tiene razón. Parece una alcancía'.

Cale sacó una moneda de oro y la puso sobre el mostrador.

"Planeo quedarme en el tercero piso todo el día de hoy".

Cale volteó hacia Aelin y preguntó.

"¿Cuál té prefieres?"

"Cualquiera que no sea amargo está bien".

Billos miró entre Cale y Aelin con una sonrisa en su rostro. Cale fingió no darse cuenta mientras señalaba la estantería.

Alma Errante [TCF]Where stories live. Discover now