𝙻𝚘𝚜𝚝 𝚒𝚗 𝚝𝚒𝚖𝚎 (𝐿𝒾𝓃𝓀 𝓍 𝐿𝑒𝒸𝓉𝑜𝓇𝒶) [Botw] ᘛEᗪITᗩᑎᗪOᘚ

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—¿Shiva?

—Un gusto volver a verte, Aku.

—¿Qué es lo que quieres?

—¿No te vas a presentar, Link?

—¿Cómo sabes mi nombre?

—Conozco a Impa, creí que estaba claro ya.

—Jamás mencionaste algo, señor.

—No me digas señor, por favor. Dime Shiva, o decidme en todo caso.

—¿Crees que por decir que conoces  a Impa es suficiente para que te cojamos confianza?

—Jamás pedí confianza, solo pedí que no me dijera señor.

—Ella dice señor si tiene respeto o no tiene confianza con alguien.

—Pero Link, en qué momento-

—¿Qué sucede?

—¿En qué momento llegaste a analizar eso?

—En el momento que solo tengo una amiga.

—Oh-

—No quisiera interrumpir, pero Impa os está esperando. No tardéis. Ah, y Aku...

El de mechones blancos caminó hacia la pelinegra hasta quedar al lado de la oreja izquierda de la pelinegra para luego susurrar.

—Cuida lo que tienes para no perderlo como lo hiciste en el pasado, Aku...

Dicho eso, el de mechones blancos se dirigió a su aldea con suma tranquilidad, como si nada hubiera pasado, pero la de ojos rojos estaba confundida. Bastante confundida.

—No entendí, Link.

—¿Qué te dijo?

—Que cuide lo que tengo para no perderlo como lo hice en el pasado...

—Sigo diciendo que no me da buena espina ese chico.

—Oye, dijiste que el nombre de Shiva te sonaba y por eso pusimos así al caballo, ¿no?

—Así es, ¿qué  insinúas?

—¿Y si el nombre es que ya conocíamos a Shiva de hace años y ahora trata de ayudarnos?

—Me encanta como ves el lado positivo a las cosas, pero creo que es momento de ir ya con Impa y que nos resuelva este lío que tenemos con el pasado y las bestias divinas y todo lo demás.

La del pelo largo asintió con un poco de decepción, pues su amigo tenía razón, pero a ella le gustaba especular y, sobre todo, crear escenarios buenos. Mas tenía que quitarse esa idea de la cabeza. Al fin y al cabo, las especulaciones y los escenarios que imaginaba eran solo un reflejo de lo que quería muy en el fondo.

Sacudió su cabeza y puso un semblante serio para seguir al chico, el cual ya había comenzado a caminar para bajar la rampa y llegar cuanto antes a la aldea de nuevo. Después de continuar por un camino marcado al estar este sin césped, llegaron a la entrada de unas escaleras, las cuales estaban custodiadas por dos guardias.

—¡¿Quiénes sois vosotros? ¡Esta es la casa de Impa! ¿Eh? No puede ser... ¿Tenéis una piedra Sheikah? Entonces vosotros sois...

Ambos bajaron la guardia y parece ser que se calmaron para comenzar a hablar normal con los jóvenes que querían pasar.

—Disculpad que hayamos sido tan groseros. No os habíamos reconocido; pero, ahora que  lo recuerdo, Impa nos había puesto al tanto. Adelante, entrad.