19.

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Pedida.

Diego estaba preparando todo, tenía una bonita vestimenta, formal, si, pero a su estilo.

Estaba buscando las llaves de su carro para ir a recoger las flores que había pedido para Jorge.

No solía regalarle rosas, siempre buscaba ramos coloridos y bonitos, pero esta vez, era especial, así que decidió regalarle un gran ramo de rosas rojas.

Llegó un mensaje a su teléfono, sonriendo inmediatamente al ver que era de Jorge.

"Me tienen aquí desde las 7 de la mañana, no se en que momento le dije a Danna que si la acompañaba 😩😩😩"

"Ni siquiera  nos hemos podido ver en nuestro día especial 🥺"

"No te preocupes por eso coky, sigo en la oficina, cuando termines paso por ti y vamos a cenar a algún lado, va?"

"Chi! Te espero! Te amoooo 😘😘"

"Yo a ti bebé 😘😘"

Diego sonrió al ver los mensajes de su pareja, apagó su teléfono y lo metió en su bolsillo.

Saliendo rápidamente de la casa.

...

Jorge y Danna estaban en un centro comercial de la Ciudad de México, más específicamente, en Polanco.

Jorge la iba siguiendo cargando bolsas, hasta que entró en una tienda de hombres.

En ese momento frunció su ceño.

—Qué hacemos aquí?

—Le quiero comprar algo a Alex, te puedes probar algo? Si te queda a ti obvio le queda a él.

Y Jorge frunció su ceño.

Pero asintió.

Minutos después Danna había quedado encantada con un traje, Jorge giro los ojos y sonrió, a él también le había gustado mucho.

—Oye, es bonito, tal vez me debería comprar uno así yo también —dijo burlonamente, ya habían pagado, estaban en el hotel de Danna, también le había probado unos zapatos que quedaban espectaculares con el traje, estaba fascinado—

—Pues, qué crees? Diego me deposito, ese traje es para ti, porque en la noche te llevará a cenar —sonrió, Jorge frunció su ceño y giro sus ojos—

—Por eso me tienes aquí desde hace mil horas!

—Mmm... Tal vez —dijo con burla— apúrate! Ponte guapo! Que Diego no tarda en venir por ti!

Jorge empezó a reír y le sacó el dedo a Danna.

Sin embargo sabiendo perfectamente que se tenía que arreglar y empezó a hacerlo.

—Mierda...

—Qué? Por qué mierda?

Jorge busco en su bolso y gruño, enseñándole la caja de preservativos (vacía) y el lubricante pequeño que llevaba en este (al que solo le quedaban unas gotitas).

Me gusta ese de chinos...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora