Soy de tu propiedad, mi alfa...

¿Tu esposo? ¿Yo?

-Los ojos de James, padre de Edgard, se iluminaron de inmediato, al ver a sus nietos, eran muy parecidos a su hijo, no había manera de dudar que eran realmente hijos de Edgard.-

-Los pequeños tenían 6 meses, eran muy adorables, sus padres aún no sabían sus otros géneros, pero sospechaban que Oli podría ser un omega y Eli una alfa.-

-Todo eso se lo explican a James, el cual no estaba muy contento con respecto a Oli, pero a pesar de todo, seguía feliz de al fin ser abuelo, a pesar de los orígenes de la madre, obviamente reconoció de inmediato a Andrew.-

-Andrew, era idéntico a su madre, un hermoso omega de el cual había estado enamorado, James sufrió demasiado cuando el murió, uno de las mayores perdidas, el mayor dolor para aquel mafioso, a pesar de que Andrew era el hijo de su amor perdido.-

James: Tu apellido es Vitali, ¿cierto?

Andrew: S-si. (Se sentía un poco intimidado ante el padre de Edgard)

James: Yo conocí a tu madre, aunque de hecho yo... Lo amaba. (En su mirada se reflejaba una profunda tristeza)

Andrew: ¿E-en serio? (Se sentía un poco incómodo y nervioso)

James: Si, era muy hermoso, amable... (Sus ojos se ponían un tanto llorosos)

Andrew: Si... Lo era

James: Eres idéntico a él... (Acercando su mano hacia Andrew, acariciándole la mejilla, mientras le miraba fijamente)

-James no quería tenerlo, poseerlo, o si quiera tocarlo, sentía la necesidad de protegerlo, siendo amable, cariñoso con Andrew, la reacción contraria que esperaba Mako, ya que su marido era de las personas mas agresivas y crueles que conocía, además de Edgard.-

-Probablemente odiabas o sigues odiando a Mako ¿Cierto?-

-A pesar de todo lo que había pasado hasta el momento, al menos Andrew ya tenía a alguien mas que lo defendiera, James carga a sus nietos, dándoles cariño, lo cual era raro para Mako, ya que ni con sus propios hijos era de esa manera, también mientras le dedicaba tiempo a sus nietos platicaba con Andrew.-

James: ¿Estás nervioso por la boda? (Le brillaban los ojos de la emoción)

Andrew:¿Q-qué boda? (Lo que le dijo Jame lo dejó un tanto confundido)

James: JAJAJA, que gracioso eres. (Ya estaba comenzando a confundirse)

Andrew: N-no se a que se refiere señor...

James: ¿Cómo no vas a saber si estas nervioso de tu propia boda?

Andrew: ¿Mi boda?

James: ¿En serio no sabes?

Andrew: No...

James: En dos días es la boda, hoy irás a medirte la ropa que te confeccionaron hace bastante tiempo...

Andrew: No sabía... Nunca me mencionó alguna boda, no hemos sido ni siquiera novios, mucho menos me propuso matrimonio, ni siquiera me preguntó si quería... Lo de las medidas fue en los primeros días en que llegué a la mansión... ¿Ahora nos vamos a casar en dos días?

James: Ese hijo de puta... (Lo decía mirando hacia otro lado, muy enojado)

Andrew: E-es su hijo...

James: Pero Mako lo parió.

Andrew: Aunque de todos modos no estoy en ninguna posición de negarme a casarme con el, el ya me había mencionado que seria su esposo... desde hace como un año, no pensaba que hablaba en serio.

James: Bueno, ahora te tienes que casar.

Andrew: Me alegro que usted sea mi suegro. (Sentía que al menos eso era un tipo de consuelo)

James: Haz feliz a mi hijo, satisfácelo cuando él lo diga. (Con una mirada bastante fría)

Andrew: L-lo haré... (Se encontraba bastante incomodo)

-De la nada llega Edgard mientras hablaban, tomando de el brazo a Andrew, dejando a sus hijos con su pare, Edgard se lleva a jalones a Andrew a una habitación para que se mida su traje.-

-Era un traje de novio, hecho con telas finas y confeccionado por diseñadores profesionales, la temática de las flores de la boda eran las rosas blancas y las hortensias azules.-

-La tela de aquel traje era blanca, la diseñadora había hecho un velo, las mangas tenían hermosas flores bordadas a mano, piedras preciosas, el traje en lugar de tener un pantalón, tenia unos shorts, los cuales le llegaban mucho mas arriba de la rodilla.-

-A pesar de las diferencias que el traje tenía a uno tradicional, a Andrew le quedaba perfectamente, resaltaba su belleza, sus hermosos y gorditos muslos, en el velo tenía detalles azules y verdes, todos aquellos colores eran en tonos pastel, perfectos para resaltar el hermoso color de ojos de el omega, se veía precioso.-

-Los demás preparativos ya estaban listos, el lugar sería en la mansión de James, solo faltaba que llegara el día, la hora de la reunión estaba próxima, Edgard se lleva a Andrew a la habitación donde se quedarían en esos días que estarían ahí.-

-Edgard obliga a Andrew a desnudarse, el cual lo hace de inmediato, por miedo a ser golpeado o pero, dejar de ser amado y terminar abandonado y separado de sus hijos.-

-Edgard estaba muriéndose de nervios, sentía que era la única forma de calmarse, comienza a tocar con delicadeza el cuerpo desnudo de su hermosos y vulnerable omega, tocando cada rincón de su cuerpo, planeaba ser breve y que fuese una cogida rápida.-

-Su omega no tenía otra opción mas que dejarse tocar, dejarse manipular de su alfa, las caricias de Edgard eran torpes y agresivas, no eran muy placenteras para Andrew, a pesar de eso, el continuaba, luego, recuesta a la fuerza en la cama a Andrew.-

-Va de inmediato a uno de los cajones de la mesa de noche, sacando un pequeño vibrador, gel y un látigo, el gel tenía en sus componentes un afrodisiaco bastante fuerte, aquellos objetos estaban destinados para el pobre Andrew.-

-A Andrew no le agradaba la idea de que Edgard tuviera en sus manos un látigo, lo aterraba, aunque por mas que el suplicara por no ser azotado, no sería tomado en cuenta y sería golpeado aún mas fuerte.-

-Para Andrew antes todo era placentero, pero últimamente Edgard era mas agresivo y cruel con su cuerpo, le dolía, no solo físicamente, sino que le dolía muy adentro, dolía mucho, en su corazón.-

-Heria sus sentimientos, lo hacia sentir inútil, dependiente de cualquier mínima muestra de afecta hacia el, lo hacía sentir que era un idiota que solo servía para coger y dar hijos, se sentía miserable, con los tratos de su alfa, al cual le daba completamente igual, incluso, todo lo anterior, Edgard se lo decía casi todos los días, aún así Andrew lo amaba, siendo capaz de hacer lo que sea por su alfa.-