Cap. 32 - A Medio Vivir

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Luego de esa llamada tan decisiva, fue una noche fatal para Luisi y una mañana gris para Amelia. Tenían tanto en común, eran tan parecidas, que hasta coincidieron en que se tuvieron que excusar de sus respectivos trabajos. Ambas almohadas fueron testigos del dolor, del sufrimiento, de la incertidumbre sobre la decisión que habían tomado. Necesitaban procesar, internalizar y reflexionar sobre la relación y sobre ellas mismas también.

Amelia se refugiaba en la compañía de Ignacio y María, y Luisita con Naya y titi Lucy. Ese cuarteto representaba el amor y la amistad incondicional, y el soporte que muchas veces necesitamos para ayudarnos a levantar cuando caemos.

Cada una por su lado hacía memoria de como sus miradas se encontraron por primera vez, y como de a partir de ese momento, todo se fue cocinando poco a poco, cual plato principal de la mejor cena de sus vidas.

Ambas tomaban sus celulares cada dos por tres para verificar si había algún mensaje nuevo, una canción, una foto, una frase. Se habían acostumbrado a esos detalles que la realidad era que se les estaba haciendo muy cuesta arriba hacer tiempo, aunque sabían que era algo necesario el haber puesto una pausa.

Cada una por su lado en algún momento, revisaba las fotos que se tomaron durante el tiempo que compartieron juntas. Platos de comidas, selfies, paisajes, ellas dos, fotos de las fiestas de la calle con los artistas, fotos sin pose y sin avisar. Para Luista había una foto muy especial. La dejaba sin aliento y con el corazón revoloteando. Podía verla horas y horas.

-"Dios, Amelia como te extraño

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-"Dios, Amelia como te extraño. Esto no nos puede estar pasando. No a nosotras..." se decía mientras observaba la foto por vez infinito.

Por otro lado, Amelia tenía como favorita una foto que le trae muchos recuerdos, pues fue cuando descubrió la calidez en unos nuevos labios y una valentía increíble en una misma persona.

Por otro lado, Amelia tenía como favorita una foto que le trae muchos recuerdos, pues fue cuando descubrió la calidez en unos nuevos labios y una valentía increíble en una misma persona

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Había transcurrido un buen tiempo entre ellas en el que solo se había limitado a unos escasos mensajes de "hola, espero que estés bien" de parte y parte,  sin abundar más. Todo estaba cayendo en tiempo poco a poco en la vida de cada una, y por lo menos a nivel profesional, todo iba bastante bien.

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