Co (Más que un escorpión)

Capítulo 13

—¡Rumbo a mi antigua casa!— Jisoo suspiró y cogió la mochila de Co

—¿En serio has sido tan cutre como para forrarle el pincho con papel?

—¡¿Cómo que cutre?! He sido muy inteligente

—¿Y los guantes?

—Jajaja, no quieres saber cómo he conseguido ponérselos...— sentí como Co tenía un escalofrío cuando los dos lo miramos —¿Prefieres que se lo quite?

—No, no, no... en el fondo me alegro...— Jisoo se apretó el puente de la nariz —¿Tienes un plan?

—¿Para qué?

—Pues para llevar a Co

—Pues mira no

—Enton... ¿Qué?— Él rubio frunció el ceño y yo me encogí de hombros

—Que no he pensado nada— el chico frunció los labios dejando solo una fina línea

—Sí, bueno, vale, claro, todo perfecto— suspiró —Sooki— asentí —¿Me puedes responder una dudita que me ha surgido?

—Claro, dime

—¿Cómo piensas meter a CO, chaval mutante con muchos brazos y que va semi-desnudo... en mi coche, aparcado en el parking del edificio?

—Fácil, llamamos al ascensor, esperamos a que llegue, entramos, bajamos al parking, abres tu coche y metemos a Co

—¿Y si nos cruzamos con un vecino?

—Bah, tan fácil como ponerle una sábana por encima y llevarlo como si fuera un perro

—Eso de perro tiene poco...— Jisoo apuntó a Co con un "dedo acusador" —Es dos veces uno

—Te sorprenderías... ¿Sabes los perros grandes estos que hay que son muy muy delgados?

—Sí, pero no son así de grandes...

—¡Ay hijo...! Era una comparación...— cogí al mencionado y lo levanté por las axilas —Apenas pesa nada

—Co!— frunció el ceño e hizo un puchero, ofendido

—Aun así ¡No podemos llevarlo en brazos envuelto en una sábana como si fuera... ¿Qué sé yo?!

—¿Por qué no?— cogí la sábana que acababa de lavar, nunca volverá a ser blanca... y lo envolví en ella

—Sooki, no te das cuenta de que ese plan es 60% lagunas...

—Ya tarde, he cogido a Co y, No, lo voy a soltar

Si es que Jisoo es un exagerado... Nada salió mal, todo fue acorde a mi plan. Todo excepto que al mutante le dan pánico los sitios estrechos con mucha luz artificial, que raro e inesperado...

Sobé mi hombro, puede que no me haya clavado el aguijón pero eso no quita que el golpe doliera... ha sido como recibir un pelotazo de hockey de esos que tiraba Kagami cuando estábamos federadas en el instituto. ¿Qué será ahora de Kagami?

—Te dije que tu plan tenía muchas lagunas— Jisoo siguió moviendo el pato con burla para evitar que Co lo cogiera

—¿Nos hemos cruzado con algún vecino?

—No pero... ¡Co! ¡No lo muerdas!— Jisoo forcejeó con el mutante para que deje el delantal del plato , si es que... él solo se lo busca —¿Las cámaras del parking qué?

—Llevan rotas una semana— el rubio frunció el ceño —A ver... dos días, me lo dijo Pákina

—¿Pákina?