Me Convertí En El Villano Con El Que La Heroína Está Obsesionada

135

Capítulo 135: Ataque Contrarreloj

"Tsk..."

En el corazón de la ciudad.

Ante la repentina aparición de la armadura robótica, Stardus soltó una carcajada.

[Ugh... ¿Por qué es tan difícil de manipular? ¡Dios!]

Swoooooosh-

Boom. Boom Boom.

Starbreaker... La chica de la máquina, la que salió con Starbuster la última vez.

El miembro que apareció en la aparición pre-terrorista de Egostic salió de nuevo.

Y siendo bastante más fuerte que antes.

"......."

De hecho, el movimiento en sí era extrañamente lento que la última vez.

Se sentía como si se moviera como un humano la última vez, pero esta vez se sentía como si estuviera siendo controlado torpemente.

Sin embargo, la diferencia es que la potencia de fuego es definitivamente más fuerte que antes.

Todos los pequeños misiles y armas de fuego.

[¡¡¡Voy a proteger a Ego Oppa!!!]

También hubo palabras que rascaron sus nervios en el medio.

Starbreaker es prácticamente un ejército de un solo hombre. No era fácil volar hacia Stardus junto con todo tipo de armas y misiles mientras blandía su puño mientras se acercaba a ella.

Incluso el propio material se hizo más fuerte al volverse plateado, no gris, pero parece que tiene menos impacto que la última vez.

Sin embargo, Stardus.

No estaba jugando todo este tiempo.

[¡Hey! ¿Crees que puedes detenerme?]

"...Ha."

Escuchando la voz de la chica provocándola, Stardus murmuró en voz baja.

"...Diez minutos son suficientes."

Sólo diez minutos son suficientes para derribarte.

Mientras murmuraba, voló hacia ella.

Débilmente visible detrás de un traje mecánico, ella puede ver a Egostic.

Derribará esta máquina lo antes posible.

Y llegará al fondo del asunto hoy mismo.

Entonces Stardus apretó los dientes y lanzó su puño.

***

"Seo-eun... ¿No te avergüenzas con tus palabras?"

"...Sehee, ahora mismo estoy concentrada, ¡así que cállate!".

Seo-eun, con la cara roja, le gritó a Choi Sehee, que estaba sentada en el asiento delantero y se giró con expresión preocupada.

Nadie está seguro de por qué su cara se puso roja, si es porque está súper concentrada o si se siente avergonzada por sus palabras.

Seo-eun se sentó y controló la cosa con su portátil, a veces encendía el micrófono para decir unas palabras, lo que parecía ser simplemente un método de actuación.

La gente pensaría que es una genio si la ven tecleando en su portátil mientras dice algunas palabras. Oh, ahora que lo pienso, Seo-eun es una genio.

Por supuesto, había un pequeño problema en que los comentarios hacían que incluso los oyentes se sintieran incómodos, pero eso era más bien un punto encantador.