1er Prefacio

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(Captura del Capítulo 38 de "Digimon: Data Squad aka Savers")

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(Captura del Capítulo 38 de "Digimon: Data Squad aka Savers")

El Árbol Servidor, también conocido como Árbol Sagrado por los digimon. Almacén de todos los datos que conformaban la computadora host, denominada Yggdrasil, encargada de mantener y administrar el Mundo Digital. En definitiva, su dios.

La parte visible estaba conformada por, como indicaba su propio nombre, un árbol gigantesco e increíblemente frondoso, cargado de elementos digitales, que era respetado y venerado por todos los habitantes. Ni un solo ser vivo se atrevería a quebrar sus ramas o arrancar sus hojas sin ser ajusticiado por sus protectores, los conocidos como Caballeros Reales. No obstante, la tentación existente en torno a los archivos de memoria que contenían sus servidores le convertía en un objetivo deseado para aquellos más atrevidos y sedientos de poder, capaces de desafiar a la propia muerte.  

Ésta sería la razón, fortuita, que brindaría la única esperanza de futuro que tendrían los digimon para sobrevivir ante el Apocalipsis que se cernía lenta e inevitablemente sobre el Mundo Digital.

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Las catacumbas del árbol estaban compuestas por múltiples fibras ópticas, que entrelazadas unas con otras formaban galerías subterráneas que hacían las veces de raíces. En su laberíntico conjunto se hallaban infinidad de tesoros ocultos, almacenados allí desde el origen de los tiempos, que eran custodiados para su preservación histórica.

Los Goatmon se encargaban de cumplir esa función rigurosamente hasta el fin de sus días.

Los Goatmon se encargaban de cumplir esa función rigurosamente hasta el fin de sus días

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Digimon de nivel Adulto o Armor y atributo Vacuna.

Se trataba de cabras de pelaje negro y dos metros de altura, que poseían una cornamenta dorada a juego con la campana mística que colgaba de un collar metálico que rodeaba su cuello y en el que podía leerse la siguiente inscripción: cuando se unen luz y sombras, nos pone ante los ojos de la cabra que se enfrenta al alto sol. Por último, en el casco de su frente destacaba un intenso rubí.

Su cometido, si bien pudiera resultar anodino, era de vital importancia: estaban programados para proteger los grandes secretos del Mundo Digital; aunque su instinto animal había ocasionado la pérdida de algunos documentos fruto de un apetito voraz. Prisioneros a causa de dicha misión, recorrían las ruinosas y claustrofóbicas galerías de forma repetitiva en un proceso que no tenía final. Sin embargo, en el momento menos esperado, la amenaza de un intruso les obligó a entrar en acción.

Digimon: Dawn KnightsWhere stories live. Discover now