Cap. 29 - Llueve Por Dentro

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-"No seas estúpido! Me refiero al beso. No esperaba eso y me sentí muy incómoda y muy mal. Mis labios pertenecen a una rubia que está a cientos de kilómetros y a la cual no puedo besar. Joder! Joder! Joder! Me cago en todo!!" gritó con desesperación mientras se daba unas palmadas en la frente y unas lágrimas comenzaban a bajar.

-"Amelia ya, no te trates así. No pasó nada. Tu no le correspondiste el beso así que no pasa nada. Y de bailar con ella pues tampoco. No te castigues. Y si tienes que contarle pues hazlo para tu tranquilidad.

-"Y cómo crees que lo tomará"?

-"Buena pregunta. Héchame la culpa. Que yo te di cervezas demás o que se yo. No le ocultes y que explote por donde tenga que explotar. A la final, tu conciencia estará tranquila porque fuiste sincera."

-"Creo que mañana me voy a enfermar para no ir a la oficina y lo que sea de trabajo lo resuelvo via remoto. Necesito buscar tiempo con ella, volver a reconectar, sabes. Voy a llamarla tan pronto llegue. Necesito, me urge hablarle. Yo no quiero perderla Nacho" decía mientras una lágrima se escapaba y comenzaba su travesía por la mejilla.

-"Ya Amelia. Cuentas conmigo, tranquila. Todo va a estar bien."

Nacho se despidió de ella y siguió su camino. Amelia, mientras, le daba vueltas al asunto dilusidando la forma, el tono, las palabras para hablarle a Luisita. Fue a la cocina, buscó un gran vaso de agua para ver si eso la ayudaba. Puso spotify.

-"Que bonito sería si estuvieras aquí mi Luisi. Todo sería más fácil" decía a la vez que recostaba su cuerpo en el sofá, la tristeza la invadía, la soledad la acompañaba, y varias lágrimas asomaban en sus ojos.
Tomó su celular, hizo varias respiraciones como le había indicado su sicóloga hace algún tiempo, buscó el nombre de la rubia y lo marcó. Se imaginaba todas las posibles reacciones. Volvía a respirar profundo con cada tono que escuchaba.

-"Amelia!! Estás bien amor? Estabas trabajando hasta estas horas? Son unos malditos si te tienen trabajando hasta estas horas! Estás sola? Había más gente en la oficina?" preguntaba de sopetón.

-"Luisi..."

-"Que no Amelia, que no es justo. Dios creó un día detrás de otro, así que lo que no pueden resolver hoy lo hacen mañana y ya! Que no pueden pretender que lo hagas todo tú!" continuaba sin darle oportunidad a Amelia.

-"Luisi, no, es que..."

-"Que Amelia, que? Que me vas a decir? Que recuerde que tienes una responsabilidad, que siempre es bueno dar la milla extra, que para eso te pagan, que es tu trabajo, blah blah blah..."

-" ME PUEDES DEJAR HABLAR COÑO!!" dijo alzando un poco el tono de voz.

-"Pero por qué me gritas Amelia, si es que me tenías preocupada, joder! Que no se de ti! Ya casi no hablamos como antes, el tiempo es una mierda!"

-"Estaba en un bar...con Nacho"

Luisita no pronunció palabra alguna tras escucharla. Ella toda preocupada y la otra de fiesta, pensó.

-"Quizás pudiste haberme escrito eso Amelia, y ser un poco más considerada. No?" dijo visiblemente molesta.

-"Luisi déjame explicarte como sucedió todo, sí?"

-"Mira, Amelia, que yo no tengo problema alguno que tu salgas, te diviertas, pero me puedes avisar coño, porque yo no estoy ahí contigo"

-"Ya..."

Entre MaresWhere stories live. Discover now