Donde Jimin y Jungkook son dos personas de sociedades distintas. Uno ha sido rico toda su vida y otro ha tenido que trabajar desde muy joven para darse algunos gustos.
Jimin está casado con un ricachón el cual le complace con todo lo que quiera, no...
Desde que Jungkook se independizó tuvo que pasar por distintos trabajos, desde mesero hasta barrendero, todo para sustentar sus estudios y su mala vida siendo un amante de las fiestas. Su vida ha sido complicada, sus manos se han vuelto duras por todo el trabajo que tuvo que hacer, pero no se quejaba de su vida, la disfrutaba mucho, pero ahora cuando se encuentra en una mala situación tiene que recurrir a un trabajo bastante bajo; ser el empleado de unos riquillos, pero cuando la necesidad lo presiona él tiene que ceder.
Porque Jungkook jamás pensó encontrarse con persona más despreciable como su jefe, Park Jimin de Kang.
Un omega presumido que no sabe nada de la vida porque solo ha alzado una mano para que le arreglen sus uñas, jamás ha trabajado en su vida pues al casarse con un ricachón su vida se resolvió, aunque estaba resuelta desde que nació en una cuna de plata.
De todas formas, aunque no quiera, Jungkook tiene que aceptar ese trabajo pues es muy buena paga y debe seguir pagando su renta, como también sustentar su mala vida y sus estudios, aunque tenga que ver todos los días la cara coqueta y arrogante de Park Jimin.
Y el desprecio es por ambos lados, Jimin al ser alguien tan privilegiado siempre ha visto a las personas de bajo status por debajo de su hombro, Jungkook no es una excepción, es aún más la viva imagen de esa "gente pobre", con sus tatuajes, piercings y boca suelta, no le gusta para nada que se pasee por su casa.
Pero ambos tienen que soportarse porque 1) es su trabajo y 2) su esposo lo contrato.
Aunque hay algo que jamás admitirán, por más que se volteen los ojos y se miren con asco, muy dentro de ellos saben que tienen unas ganas infernales de sentirse muy cerca hasta perderse en sus aromas. Pero jamás lo dirán.
perfiles
Jungkook, estudiante de ingeniería, 23 años, adicto a la fiesta y al reggaeton
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Jimin, 32 años, casado hace cinco años, clasista y amante de las perlas
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