Padre— Marco jalaba la camisa de aquel hombre que llamaba padre.
Ahora no marco— Marco bajo el dibujo que había en sus manitas y se dio la vuelta.
Su padre siempre tenía mucho trabajo, casi nunca le hablaba.
Pero ¡es para ti! En la tele dijeron que hoy es Día del padre— Dijo marco sonriendo. Marco hablaba de una manera clara, por que a su padre no le gustaba que balbuceara al hablar.
Te dije que no marco— Marco quería hacer un berrinche por atención. Pero no era la mejor opción. Simplemente se fue de ahí.
En otra ocasión. Marco hizo un berrinche, por que al pasar por una calle miró un postre que se veía muy bien. Su padre le dijo que no, una y otra vez.
Pero.. yo lo quiero, ¿si? Por favor— Dijo Marco jalando levemente la camisa de su padre. Su padre le había dicho que no, pero marco realmente lo quería.
En cambio su padre lo tomó algo fuerte del brazo, y lo jalo todo el camino a casa. El brazo del Niño terminó entumecido.
¡¿Quien te crees para hacer un berrinche?! ¡Si te digo que no es no! ¡Maldito mocoso!— Marco se cubría la cabeza de los golpes con un cinturón que tiraba su padre.
Marco terminó huyendo y escondiéndose en un cajón de la cocina asegurándose de ponerse lo más profundo posible.
Su padre gritó y golpeó cosas, haciendo que él niño se asustara, marco solo pudo llorar mientras trataba de aguantar el dolor que le habían dejado esos golpes.
Marco salió de la cocina casi 14 horas después, había dormido dentro del cajón.
Su padre no le dio de comer en esas horas y tampoco le dio al día siguiente haciendo que marco al ver que su padre terminaba de comer buscara algo de comida sobrante en la cocina o en su plato.
Marco había aprendido esa lección.
Newgate llevaba a Marco en sus brazos mientras caminaba a hacer las compras, a veces era bueno no usar el auto, y caminar para que Marco saliera.
Newgate notó como marco miraba todo, pudo sonreír. De vez en cuanto lo bajaba, para que caminara y en una de esas marco miró una publicidad de un postre con helado y nutella.
Newgate espero que le pidiera el postre. Pero Marco simplemente siguió caminando.
Oye marco— Newgate se paró a ver la publicación enfrente del establecimiento.
Marco paró sus pasos para mirar a su papá que estaba viendo el postre.
¿No se te antoja uno? Se ve muy apetitoso— Dijo Newgate tocándose pensativamente la barbilla.
Marco dudo un momento jugando con sus manitas, pero al ver la sonrisa en la cara de su padre asintió, y camino a su padre para que lo cargara.
¿Con que lo quieres?—
Con nutella— Dijo marco con una gran sonrisa en su cara.
Newgate solo se sintió feliz por haber acertado.
