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Nuevamente hoseok se encontraba en la entrada de la biblioteca uno de sus maestros no había asistido, por el simple hecho de que le pegaba la gana de no ir.

Esta vez el pelirojo sostenía en sus manos una caja de chocolates y galletas que tenían bombón encima de dos tipos de colores y un poco de rayadura de coco, llamadas arcoiris un regalo de parte de taehyung.

—okey, tu puedes campeón — dijo jimin mientras le deba unas palmadas en el brazo, que se había encargado de llevarlo y de que no retrocediera de nuevo.

— jimin — hoseok lo miró con ojos inexpresivos — voy a ver a yoongi no a un partido de futbol, actúas como mi mamá.

— bueno... Tu puedes tigre ve y atrapa a tu presa.

— ¡jimin! — el rubio salió corriendo, mientras que los murmullos haciendo un sonido que exigía silencio empezaban a sonar.

Hoseok se disculpó y dispuesto a ir a ver a yoongi, sintió que su mano fue sujetada, volteó a ver quien era, pero solo era jimin:—dame el paquete de chocolate.

—¿para qué?

—tú no preguntes solo dámelo — el pelirojo a duras apenas le entregó la caja que contenía doce chocolates. Jimin comenzó a sacar algunos para al final dejar solo ocho.

— ¿pero qué?— hoseok jalo la caja con fuerza, fuerza que por otro poco pegaba a una chica que hiba saliendo de la biblioteca con algunos libros — ay, perdón lo siento— se reverenció a modo de disculpa.

La chica sonrío amablemente y se fue no sin antes decir que no pasaba nada.

Jimin estaba por meter un chocolate a su boca cuando hoseok se lo arrebato — ¿por qué lo hiciste?

— acaso quieres que te descubra tan rápido, jungkook fue lento conmigo pero le dio tiempo de conquistarme, en cambio si tu vas rapido es posible que te rechace— el pelirojo lo miró sin entender aún— si tu vas y le entregas la caja de chocolates básicamente llenos sabra de tus intenciones, pero en cambio si tu le preguntas si quiere un chocolate y le tiendes la caja, obviamente pensará que por cortesía le estás invitando, kookie a si fue al princio y...

—okey — dijo levantando sus dos pulgares y dándole una sonrisa que mostraba todas sus encías, sabía por que rumbo hiba a llegar esa conversación si se quedaba.

Jimin contando como es que paso toda si relación y como llegó a estar tan enamorado, uf, en fin, se sentía como el típico hijo que escuchaba una y otra vez la historia de amor de sus padres.

Hoseok encontró a aquel pelinegro sentado en el mismo lugar que ayer.

Paso número dos:darle detalles y algún alago. Una forma de hacer los lazos más fuertes.

—hola de nuevo, yoongi.

— hola, hobi — aaaahh, me dijo hobi y aparté sonrío, aaaaahhh, ahora si ya puedo morir en paz.

sigues leyendo el mismo — señaló el libro intentando que aquel pelinegro no se diera cuenta de su sonrojo.

— si, ayer apenas me quede por la mitad, ¿y tú ya terminaste el tuyo?

—bueno, es algo largo— respondió mientras ponía la caja de chocolates y el paquete de galleta en la mesa — aproximadamente unas quinientas páginas, aunque son textos cortos, pero casi no entiendo que intentan decir.

El último comentario hizo a yoongi reír, y hobi sintió que aquella risa era algo más que hermoso, más que perfecto, nuevamente aquellas personas que se encontraban adentro de la biblioteca pidieron silencio y hoseok tenía ganas de golpearlos por hacer que aquel chico dejará de reir.

— por un momento olvidé que estabamos en una biblioteca.

— tu risa es hermosa— respondió sin pensar el pelirojo, y al percatarse de lo que había dicho agacho su cabeza intentando ocultar el sonrojo al igual que yoongi, pero fue algo que hobi no logro ver — quise decir... Eh... ¿Quie-res un choco-late?— en donde demonios estaba jimin cuando lo necesitaba, estaba seguro que le daría un buen merecido golpe.

—no gracias. Es. Que... Soy alérgico al chocolate.

— ah... Este.. Yo — piensa hoseok, piensa — entonces no quieres una galleta.

Yoongi aceptó el paquete de galletas ya que hobi no quería darle solo una, por el simple hecho de que si no podía comer chocolates las galletas estaban dispuestas para el.

Ambos comieron en silencio, uno con el miedo de que se diera cuenta de que estaba enamorado y lo terminaran rechazando de la peor manera y por otro lado yoongi estaba nervioso y confundido, por el simple hecho de aquel chico pelirojo dijo que su risa era linda.

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Mrs. Cupido [Sope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora